Enlace judío México e Israel- Actualmente, la suplantación de identidad es un serio problema que ha florecido con el auge de las redes sociales, por lo que parecería ser un tema relativamente moderno. Sin embargo, según un artículo, la primera persona que suplantó una identidad de otro vivió hace 4000 años y se convirtió en patriarca de un pueblo.
BENJAMÍN TROYSE PARA ENLACE JUDÍO
Se trata de Jacob, el hijo de Isaac y Rebeca, uno de los tres patriarcas del pueblo judío.
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El artículo en cuestión pertenece al suplemento ICON del diario El País de España. Eduardo Bravo escribe Usted oculta algo: 17 impostores que nos engañaron a todos, en el cual relata la manera en la que varias personas suplantaron identidades, entre ellos Jacob.
Rebeca tuvo hijos mellizos; Esaú, quien nació primero y Jacob. Por lo tanto, Esaú era el primogénito y heredero de los derechos del sacerdocio, el patriarcado y doble porción de la herencia. Esaú era cazador y de personalidad violenta. Jacob era pastor y de carácter tranquilo. Un día que Esaú regresaba hambriento de cazar, vio que Jacob guisaba y le pidió que le diera de comer algo de eso que preparaba. Jacob le dijo que lo haría si le vendía la primogenitura. Esaú contestó que lo haría porque moría de hambre y la primogenitura no le interesaba. Jacob hizo que se lo jurara y le sirvió el plato de lentejas.
Cuando ya estuvo satisfecho, las Escrituras explican que, de igual manera, despreció la primogenitura.
Años después, en su lecho de muerte, Isaac llamó a Esaú para darle la bendición y le pidió que fuera a cazar y le preparara algunas de las viandas que tanto le gustaban. Al oír eso, Rebeca llamó a Jacob, lo vistió con la ropa de Esaú, le cubrió los brazos con la piel de cabrito que había cocinado y le dijo que entrara con su padre y le dijera que era Esaú y que iba a recibir la bendición. Isaac ya estaba ciego y le pidió a Jacob que se acercara para tocarlo y asegurarse que fuera Esaú, quien tenía el cuerpo cubierto de vello. Isaac pensó que la voz era de Jacob pero los brazos velludos debían de ser de Esaú. Le pidió que se acercara para olerlo y, como vestía la ropa de su hermano, Isaac quedó cierto de que se trataba de Esaú.
Así fue como Jacob recibió la bendición de Esaú.
LA EXPLICACIÓN
Nuestros rabinos explican el hecho diciendo que Jacob sabía que Esaú no valoraba la primogenitura.
También agregan que había dos bendiciones: la de Esaú era una bendición material, en la cual recibiría lo mejor de los frutos de la tierra y mucha abundancia.
A su vez, la bendición reservada a Jacob- la cual le da posteriormente, aún a sabiendas que fue engañado- es la bendición de Abraham, en la que promete dar la tierra de Canaan a él y a su descendencia.
Entonces, ¿por qué la suplantación de identidad? Los rabinos consultados opinan: porque Rebeca pensaba que, para lograr el camino de la Torá, eran importantes la abundancia y los bienes materiales.
MÁS DETALLES
Como en cualquier caso contemporáneo de suplantación de identidad, en el de Jacob, hubo errores y descuidos de la víctima; Dijo Esaú: “Estoy que me muero. ¿Qué me importa la primogenitura?” Gen 25:32.
También hubo información privilegiada y aliados, que en este caso fueron D-os y la misma madre de Esaú – y de Jacob –, Rebeca. En efecto, los hermanos ya peleaban desde el vientre de su madre. Entonces, Rebeca dijo: ¿Si es así, para qué vivo? Y fue a consultar a D-os, quien le respondió:
Dos naciones hay en tu seno,
Y dos pueblos serán divididos desde tus entrañas;
Un pueblo será más fuerte que el otro pueblo
Y el mayor servirá al menor.
No hay nada nuevo bajo el sol….
