Enlace Judío México e Israel – La abogada y activista de derechos humanos israelí, Nitsana Darshan-Leitner conversó con este medio sobre lo que considera una inminente guerra de Israel contra Hezbolá en el Líbano que, dijo, podría causar miles de muertes en ambos países.
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“Como sabemos, Hezbolá está trabajando en la frontera de Líbano, intentando traer a Israel a una guerra contra ellos. Hezbolá es un apoderado de Irán e Irán quiere destruir Israel y sienten que este es el tiempo preciso para hacerlo”, advierte Nitsana Darshan-Leitner, fundadora del Centro Jurídico de Israel Shurat HaDin.
“Entonces, nosotros nos estamos preparando para la próxima guerra contra Hezbolá, que será la tercera guerra del Líbano, y de acuerdo con los asesores de seguridad, en el primer día de guerra, Hezbolá tiene la capacidad de lanzar más de 1,500 misiles contra Israel. Son misiles de precisión, de largo alcance, que podrían impactar Tel Avivi, el aeropuerto Ben Gurión, y causar miles o decenas de miles de muertes en Israel.”
La idea, de acuerdo con la activista, es provocar una represalia israelí en territorio libanés, que podría causar muchas muertes de civiles, pues Hezbolá los usa como escudos humanos. “Esconden sus misiles entre las casas, entre las escuelas, en los hospitales, en los kindergarten. Y la idea es bastante clara: mientras las muertes ocurran entre los civiles israelíes, el mundo permanecerá callado, pero tan pronto como haya muertos civiles en el lado del Líbano, habrá presión internacional contra Israel para que pare la guerra.”
O, dice, habrá presión para que Israel pare la ofensiva por misiles y entre con sus soldados al Líbano en operaciones terrestres, lo que causaría la muerte de muchos de ellos.
La misión de Darshan-Leitner, entrevistada en México por Enlace Judío en días recientes, consiste en advertirle al mundo que si de verdad quiere evitar la muerte de muchos civiles libaneses, hay que actuar ahora para evitar la guerra, pues Israel no podrá quedarse impasible tras un ataque masivo de misiles contra su territorio.
“Vamos a alertarlos sobre la situación (a la comunidad internacional) —no es que no lo sepan pero, ya sabes, en Derecho le llamamos notificación de servicio—, vamos a notificar a la Unión Europea, a la Corte Penal Internacional, al Vaticano, a la ONU, a todas las organizaciones internacionales de Derechos Humanos”, para hacerles saber que, si quieren salvar la vida de los civiles libaneses, el tiempo para actuar es ahora.
La forma de hacerlo, asegura, es presionar a Hezbolá y al gobierno del Líbano, que se dice neutral, para que despejen el área de civiles, pues “Israel tiene derecho a defenderse y el precio será muy alto del lado libanés.”
La activista prepara una campaña legal y mediática para alertar al mundo sobre la urgencia de actuar ahora y prevenir una futura catástrofe. Su lucha la llevará a buscar a la prensa de diversos países y a buscar aliados. “Una de las razones por las que estamos en México es para buscar aliados y socios que nos ayuden a enfrentar este problema. Vamos a buscar a las iglesias evangélicas, pues es de interés común para los cristianos y para los judíos que Israel sobreviva a la próxima guerra.”
Israel, en gran peligro
¿Acaso está en peligro la supervivencia de Israel?, se le pregunta. La activista es muy precisa al aclarar que esta vez la amenaza es muy seria:
“No se trata de los cohetes que Hamás nos lanza desde Gaza”, alerta, “sino de misiles reales de largo alcance que poseen sistemas de precisión que, digamos, si quieren alcanzar un edificio en Tel Aviv de 40 o 50 pisos, pueden hacerlo. Si ese edificio colapsa podrían morir miles y es solo un edificio. ¿Te imaginas qué pasaría con 1,500 misiles?”
De acuerdo con la abogada, la devastación en territorio israelí podría ser mayúscula. ¿Qué puede hacer Israel? Golpear primero, pero “la reacción internacional sería incluso peor”. Asegura que su misión trabaja en todos los escenarios para que las FDI puedan ser libres para actuar como sea necesario para proteger al país.
La lista negra
La egresada de Bar Ilan habla sin tapujos respecto al papel de la ONU y otras organizaciones en el intento de boicot contra empresas que operan en los llamados “territorios ocupados”. “Una de las organizaciones más antisemitas del mundo es la ONU”, dice, “pero arriba de ellos está el Consejo de Derechos Humanos de la ONU”, integrada por todos los países que “realmente protegen los derechos humanos”, ironiza, “como Arabia Saudita, China y Rusia. Pero lo único que importa es Israel. Cada que se reúnen, cada año, ellos condenan solo a un país: Israel.”
Ahora, “ellos vienen con la Lista Negra, un proyecto en el que han trabajado por cinco años, bajo la presión del movimiento BDS, para enlistar a todas las compañías que trabajan en el área de Judea y Samaria, en los Altos del Golán, en Jerusalén Oriental, en lo que ellos consideran los territorios ocupados.”
La idea de la Lista Negra es llamar la atención internacional sobre las empresas con actividades en esos territorios y pedir un boicot contra ellas, aludiendo a leyes internacionales. Sin embargo, “ellos no pueden obligar a nadie a boicotear esas compañías. Como sea, no es bueno, y no es bueno porque ellos etiquetan a estas compañías como “violadoras de los derechos humanos”, y hay temor de que algunos países no quieran hacer negocios con ellas. Que otras compañías boicoteen a estas compañías de la lista. Y entonces nos defenderemos.”
Dice que “no te puedes defender hasta que alguien boicotee de verdad a alguna de estas compañías, entonces, estamos preparando demandas, tal como lo hicimos con Air bnb, para que tan pronto como alguna compañía decida boicotear a estas 112 compañías de la lista, seremos capaces de tomar acción contra ella.”
Estas acciones de defensa, según la experta, son posibles gracias a las leyes de los países de origen de las compañías que pretendan boicotear a las de la lista, leyes que previenen actos de discriminación por motivos religiosos o de nacionalidad.
“Cuando Air bnb boicoteó las casas en Judea y Samaria, estaba violando la ley de Vivienda de Estados Unidos, que obliga a todos a actuar de manera justa para todos en materia de vivienda y residencia. Entonces, hay leyes que esas compañías van a violar y nosotros estamos preparando demandas contra ellas.”
“¿Por qué no actúan contra compañías que trabajan en otros territorios ocupados?”, cuestiona Darshan-Leitner, “como Chipre del Norte, como Sahara Occidental, como Georgia, que está ocupada por Rusia (…). Como dije antes, es simple antisemitismo.”
Te invitamos a ver la entrevista completa en el video adjunto.
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