Enlace Judío México e Israel – En una ceremonia surrealista, la 23ª Knéset se inauguró este lunes bajo la sombra del brote del COVID-19 en Israel.

Los 120 miembros del parlamento tomaron juramento en 40 turnos de tres legisladores a la vez, de acuerdo con las directrices del Ministerio de Salud que prohíben reuniones de más de 10 personas, de acuerdo a la cadena pública israelí Kan.

El presidente Reuven Rivlin dio inicio a la ceremonia con la presencia del primer ministro Benjamín Netanyahu, el líder del partido Kajol Laván, Benny Gantz y el presidente de la Knéset Yuli Edelstein.

“Los ciudadanos de Israel están exhaustos de campañas electorales que agudizan las diferencias entre nosotros”, dijo Rivlin a los presentes.

“Estamos esperando el día a día, una rutina en la que volvamos a ocuparnos del común denominador, de nuestro destino común que se expresa tan claramente en la crisis actual. El pueblo de Israel siempre ha sabido discutir, pero ahora está cansado y preocupado. Necesitamos un descanso, una cura”.

“La política está lejos de ser perfecta, pero la política debe ser el arte de lo posible”, agregó. “Muchas veces, la política debe servir como el arte del compromiso”.

“La actual crisis política es muy real, es muy profunda y nos divide en dos”, enfatizó. “Y, sin embargo, no hay otra opción porque no tenemos otro pueblo, no tenemos otro Estado. En una democracia, quizás el gobierno puede ser reemplazado, pero no el pueblo. No parte del pueblo, ni una mitad, ni la otra. Estamos destinados a vivir juntos”, apuntó Rivlin.

“Ante ustedes ven un parlamento vacío. Pero no está vacío. Está lleno. Están aquí todos los ciudadanos de Israel, millones de ellos. Y ellos tienen una expectativa: trascender”, expresó el presidente de la Knéset, Yuli Edelstein.

“Ellos esperan que formemos un gobierno de emergencia nacional ahora. Un gobierno de emergencia que el pueblo pueda escuchar, con el que pueda contar”.

“Un gobierno que pueda lidiar con la gravedad de la crisis del coronavirus, pero no sólo de ella. Un gobierno de emergencia que comience a llenar el enorme pozo que se abrió en todo un año de irresponsabilidad política, un pozo excavado por funcionarios electos de todo el espectro político”.

“Ustedes saben muy bien que no esperé pacientemente al coronavirus. He pedido reiteradamente la formación de un gobierno de unidad”, añadió Edelstein.

“En la ceremonia anterior, propuse una reunión en mi oficina, que está a pocos metros de aquí, para llegar a un acuerdo y establecer de un gobierno amplio. La oficina aún está abierta. El pozo político puede repararse hoy, ahora mismo, y afrontar juntos los enormes desafíos ante nosotros y los que vendrán”, concluyó.

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