RABINO YOSEF BITTÓN

¿QUÉ PODEMOS APRENDER DE NUESTROS ENEMIGOS?

Hoy es Yom Hashoá. El día en el cual recordamos el brutal exterminio de 6 millones de judíos a manos de los asesinos nazis y sus colaboradores.

Anoche di una clase acerca del efecto que tuvo la Shoá en las comunidades sefaradíes. Mencioné primero lo más conocido. Que todas las comunidades sefaradíes de Europa en Holanda, Francia, Bulgaria, Yugoslavia e Italia sufrieron el mismo destino que las comunidades ashkenazíes de Europa. Probablemente el caso más estremecedor fue el de la comunidad de Salónica en Grecia, donde cerca de 54,000 judíos, el 95% de su población, fueron exterminados en Auschwitz (ver aquí) . Mi primera reflexión es que tenemos que aprender una lección de nuestros enemigos: que somos UN pueblo y debemos mantenernos unidos. Que no hay, ni deben haber, diferencia entre Sefaradim, Ashkenazim; más religiosos o menos religiosos. Debemos hacer lo imposible para sentir que somos miembros de una misma familia.

LOS JUDÍOS DE MARRUECOS Y ARGELIA

El tema principal del cual hablé anoche fue el impacto de la Shoá en las comunidades judías del norte de África: Marruecos, que en 1940 contaba con una población de 200 mil judíos. Argelia, 120 mil judíos. Túnez, 80 mil judíos, y Libia, 30 mil judíos. Los primeros tres Estados estaban bajo el protectorado francés y Libia bajo el protectorado italiano. Francia fue ocupada por los nazis en 1940, lo que se conoce como “la Francia de Vichy”. Los alemanes gobernaban Francia, sus colonias y también sus protectorados. Y esto incluía: Marruecos, Argelia y Túnez. En Marruecos y Argelia se establecieron los infames Statut de Juifs que les permitía a las autoridades alemanas confiscar las propiedades de los judíos, restringir en extremo sus actividades y prohibir el acceso a la educación, etc. También establecieron cerca de 30 campos de trabajo para construir la carretera del trans-Sahara, y para eso los alemanes reclutaron unos 4 mil judíos de Marruecos y unos mil judíos de Argelia. Cabe señalar que había un gran diferencia entre estos campos de trabajo y por ejemplo, Auschwitz o Bergen-Belsen. En los “campos de trabajo” del norte de África, en un principio, solo llegaron hombres adultos aptos para el trabajo. Docenas de ellos murieron debido a las condiciones insalubres de los trabajos, el calor abrasador, la enfermedad. Pero la gran mayoría sobrevivió. Los campos de Europa, por otro lado, eran “campos de exterminio”. Los niños, los ancianos, las mujeres y los hombres que no podían trabajar eran inmediatamente exterminados en las cámaras de gas. Y a los hombres y mujeres aptos para el trabajo se los hacia trabajar en última instancia para matarlos. Esta horrible estrategia, poco analizada, tiene “nombre” en el idioma alemán. La expresión es: Vernichtung durch Arbeit, «asesinar judíos a través de trabajos forzados» .

Volviendo al norte de África, el 8 de Noviembre de 1942, y B»H antes de que los nazis pudieran llevar a cabo el proceso de deportación y exterminio de los judíos, las fuerzas aliadas dirigidas por el general Montgomery llegaron a las costas de Marruecos y Argelia y pudieron vencer a los nazis dirigidos por el general Rommel en una operación militar llamada Operation Torch (ver mapa arriba, y ver este artículo aquí en español).

LA COMUNIDAD JUDÍA MAS ANTIGUA FUERA DE ISRAEL

Túnez es una historia aparte. Túnez fue el único país del norte de África que fue ocupado directamente por los nazis. Para comenzar digamos que la población judía de este país, el más pequeño de la región, constituía el 15% de la población total. Los judíos vivían en la capital (del mismo nombre) y en la famosa isla de Djerba. Según la tradición, un grupo de Cohanim (sacerdotes) que servían en el Templo del rey Salomón escaparon a Djerba cuando el Gran Templo de Jerusalén fue destruido en 586 AEC. Y llevaron algunas piedras del Bet Hamiqdash que utilizaron para construir allí su sinagoga. Hasta el día de hoy la mayoría de los judíos de Djerba poseen en su ADN el gen de los Cohanim, y Djerba es una de las pocas comunidades judías que aun sobreviven en el mundo árabe. Un día después que comenzó la operación Torch, el 9 de Noviembre de 1942, los alemanes ocuparon Túnez. La idea de Rommel era agruparse en ese país y desde allí repeler a las fuerzas aliadas que llegaban desde Marruecos y Argelia, y a las fuerzas británicas que llegaban desde Egipto. A los pocos días de llegar, y a a pesar de que estaban ocupados en pelear con las fuerzas aliadas, los alemanes ordenaron a los líderes de la comunidad judía a pasarles todos los datos de la comunidad. Miles de judíos fueron llevados a los campos de trabajo para construir carreteras militares (la gran mayoría sobrevivió) y más de 200 judíos de ese país fueron trasladados directamente a Europa, donde fueron exterminados en los campos de concentración. B”H en Mayo de 1943 los aliados derrotaron y expulsaron a los alemanes de Túnez, y las pérdidas de vidas judía no llegaron a ser superiores.

¿QUIÉNES NO ESTABAN INCLUIDOS EN LA SOLUCIÓN FINAL?

Voy a dejar la historia de los judíos de Libia para mañana. Quisiera terminar con una reflexión final. El 20 de Enero de 1942 tuvo lugar la infame conferencia de Wannsee, un pueblito cerca de Berlín. En esa conferencia (ver aquí) se reunieron los jerarcas nazis con el propósito de evaluar y estrategizar “la solución final” al problema judío. Allí se mencionó, entre otras cosas, la cantidad de judíos que había que eliminar en Francia. Esta lista indicaba 700 mil judíos. Pero en Francia ¡solo había 350 mil judíos!. Los historiadores dicen que la única forma de entender esta diferencia de números es que los nazis tenían planeado exterminar a todos los judíos de los países que estaban bajo el protectorado francés: en Marruecos, Argelia y Túnez…

Siempre me definí a mí mismo como “un sobreviviente del Holocausto”. La simple razón es que, tal como sucedía con el norte de África, la ambición de la solución final de los nazis no terminaba en Europa. Si, JAS VESHALOM, los nazis hubieran triunfado en Europa, entonces los judíos del norte de África, del Medio Oriente y del continente americano también habrían sido sometidos a la solución final.

Todos los judíos del mundo somos sobrevivientes de la Shoá.

 

 


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