Enlace Judío México e Israel.- Guido Weiss era un estudiante de la Universidad Hebrea de Jerusalén que ocasionalmente visitaba el mercado Majané Yehuda. Ahora, se postula para el Congreso en una plataforma pro-Israel.

OMRI NAHMIAS

Guido Weiss

Hace solo cinco años, Guido Weiss era un estudiante de la Universidad Hebrea de Jerusalén que ocasionalmente comía en Pasta Basta y bebía en el Casino De Paris, un moderno bar de moda en el corazón del mercado Majané Yehuda. Ahora, se postula para el Congreso en una plataforma pro-Israel, y probablemente sea el único candidato que publique un anuncio de campaña en el que se muestre hablando en hebreo.

Weiss nació y creció en el condado de Palm Beach y ahora está desafiando a la actual Lois Frenkel en una apuesta primaria demócrata. “Ella tiene $ 1.2 millones en su cuenta de campaña, y nosotros tenemos mucho menos. Pero creo que vamos a darle una oportunidad por su dinero”, dijo a The Jerusalem Post.

Llegó a Israel en un viaje de Birthright en 2008. “No sabía nada sobre Israel. Cuando regresé, decidí aprender hebreo y árabe y decidí trabajar en Hasbará”, recuerda. Desde entonces, visitó Israel muchas veces y vivió en el país desde 2012 hasta finales de 2014. Durante este tiempo se graduó de la Universidad Hebrea de Jerusalén con una maestría en estudios del Medio Oriente, y aprendió hebreo y árabe, pero también tuvo su primera oportunidad en política.

Fue en 2013 cuando trabajó como subgerente de campaña para Naomi Tsur, ecologista israelí, política y ex teniente de alcalde de Jerusalén, que se postuló para el consejo municipal. “No funcionó, pero ser extranjero trabajando 16 horas al día en unas elecciones israelíes te enseña qué es hacer campaña”, señaló Guido Weiss. Durante su etapa en Israel, también trabajó en el Centro de Asuntos Públicos de Jerusalén con el embajador Dore Gold.

Después de regresar a los Estados Unidos, se alistó de inmediato en la Marina, donde actualmente sirve en la reserva. “Israel me expuso al servicio nacional, y tan pronto como llegué a casa, me uní a la Marina”, dice.

Su primer trabajo en los Estados Unidos fue como miembro del personal de Brad Sherman, el segundo demócrata de más alto rango en el Comité de Asuntos Exteriores de la Casa Blanca. “Tuve la suerte de obtener una beca, que se convirtió en un trabajo durante más de un año”, dice. “Es un demócrata muy pro-israelí y se enfoca en la política de Hezbolá y Hamás. Me encontré como un joven empleado [para el congresista Sherman] sentado en una reunión con Yair Lapid y con Avigdor Lieberman. Fue una experiencia única en la vida”.

Más tarde, trabajó para otro demócrata de alto perfil, Tulsi Gabbard, durante dos años. “Trabajé mucho en el Comité de Servicios de Armas y aprendí sobre el mundo de la seguridad nacional del Pacífico”.

Después de tres años en [el periódico estadounidense] The Hill, decidió postularse para el Congreso con una agenda progresista que enfatiza la lucha contra el antisemitismo. Promete que si es elegido, presionará por un aumento de los recursos federales para proteger las sinagogas y otras instituciones religiosas en todo el país.

Le preguntaron por qué publica anuncios de campaña en los que habla en hebreo, a lo que respondió:

“La comunidad israelí es grande y está creciendo. En Aventura, puedes ir a un supermercado kosher y oír más hebreo que inglés. Entonces, quiero que sepan que entiendo muchas de las cosas que les conciernen. Quiero ofrecer credibilidad cuando se trata de Israel. Quiero poder testificar frente a un comité y hablar sobre la cúpula de hierro desde mi propia experiencia”.

Hablando del considerable grupo progresista en el Partido Demócrata que a menudo expresa críticas vocales sobre Israel, dijo:

“Mis compañeros progresistas a veces olvidan que Israel es el país más progresista de la región, desde Marruecos e Irán y desde Turquía hasta Yemen. En el campo progresista, se necesitan más personas como yo, que apoyan el salario mínimo de $ 15, la atención médica universal e Israel al mismo tiempo”.

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