Enlace Judío México e Israel – El objetivo de Israel de anexar partes de Judea y Samaria es “ilegal”, dijo el lunes la jefa de derechos humanos de la ONU, Michelle Bachelet, quien advirtió que las consecuencias podrían ser “desastrosas”.

“La anexión es ilegal. Punto”, dijo este lunes la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU en un comunicado, informó The Times of Israel. Sus palabras llegan un par de días antes de la fecha en que posiblemente el gobierno de Benjamín Netanyahu vaya adelante con su aún no definido plan de anexión en Judea y Samaria.

“Cualquier anexión. Ya sea el 30 por ciento de Cisjordania, o el cinco por ciento”, dijo, e instó a Israel a “escuchar a sus propios exaltos funcionarios y generales, así como a la multitud de voces en todo el mundo, que advierten que no continúe este camino peligroso”.

Bachelet instó a Israel a cambiar de rumbo, alegando que “las ondas de choque de la anexión durarán décadas y serán extremadamente perjudiciales para Israel, así como para los palestinos”.

“Las consecuencias precisas de la anexión no se pueden predecir”, dijo. “Pero es probable que sean desastrosas para los palestinos, para el propio Israel y para la región en general“.

Advirtió que “cualquier intento de anexar cualquier parte del territorio palestino ocupado no solo dañará seriamente los esfuerzos para lograr una paz duradera en la región, sino que probablemente afianzará, perpetuará y aumentará aún más las graves violaciones de los derechos humanos que han caracterizado el conflicto por décadas”.

Su declaración advirtió que tal medida “casi seguramente” llevaría a mayores restricciones al derecho de los palestinos a la libertad de movimiento, ya que sus centros de población se convertirían en enclaves.

Además, importantes extensiones de tierras privadas probablemente serían expropiadas ilegalmente, argumentó, e incluso en los casos en que esto no ocurra, muchos palestinos podrían perder el acceso para cultivar sus propias tierras.

La oficina de Bachelet afirmó que los palestinos dentro del área anexa sufrirían una fuerte presión para mudarse, señalando que comunidades enteras actualmente no reconocidas bajo la planificación israelí estarían en alto riesgo de “transferencia forzosa”.

Y los asentamientos, que ya son reconocidos por muchos como una clara violación del derecho internacional, seguramente se expandirían.

“Esta es una mezcla altamente combustible”, dijo Bachelet. “Estoy profundamente preocupada de que incluso la forma más minimalista de anexión conduzca a una mayor violencia y pérdida de vidas, a medida que se erigen muros, se despliegan las fuerzas de seguridad y las dos poblaciones se acercan más”.

Señaló que “el sistema legal existente de dos niveles en el mismo territorio se integrará, con impactos devastadores en la vida de los palestinos que tienen poco o ningún acceso a recursos legales”.

Bachelet dijo que la anexión no cambiaría las obligaciones de Israel bajo el derecho internacional como una “potencia de ocupación hacia la población ocupada”.

“En cambio, perjudicará gravemente la posibilidad de una solución de dos Estados, socavará las posibilidades de una renovación de las negociaciones y perpetuará las graves violaciones existentes de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario que presenciamos hoy”.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel respondió a las declaraciones de Bachelet, a quien acusó de politizar su cargo en el organismo internacional.

“Esta no es la primera vez que la Alta Comisionada Michelle Bachelet usa su papel para politizar el Comisionado contra Israel, mientras exhibe un enfoque unilateral. Por lo tanto, no es sorprendente que haya decidido unirse hoy a la campaña palestina contra el plan de paz estadounidense y presentar declaraciones antes de que se tome una decisión al respecto”, dijo el portavoz del Ministerio, Lior Haiat, en un comunicado.

Haiat indicó que Israel hace mucho tiempo “perdió la fe en la capacidad del Comisionado para promover los derechos humanos en nuestra región de manera justa” y señaló la decisión de congelar los lazos con Bachelet a principios de este año por publicar una lista de empresas que mantienen negocios en los asentamientos en Judea y Samaria.

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