Enlace Judío México e Israel – Alimento, Vestido y Satisfacción Sexual. Estas son las tres obligaciones a las que el hombre judío se compromete proveer a su mujer al casarse. De acuerdo con la ley judía, el placer sexual es realmente un derecho de la esposa – y una obligación de por vida del marido – sin importar la edad.

La Ketubah, el contrato de matrimonio que un esposo firma, afirma que las tres cosas que un esposo se obliga a dar a su esposa son “She’er” , habitación,”Keshut” ,ropa y enseres y “V’onah”, literalmente “tiempo” Lo que se entiende como un eufemismo rabínico para las relaciones conyugales

El sexo es el derecho de la mujer, no el del hombre. Un hombre tiene el deber de darle sexo a su esposa regularmente y asegurarse de que el sexo sea placentero para ella. También está obligado a vigilar las señales de que su esposa quiere sexo, y ofrecérselo sin que ella lo pida. El derecho de la mujer a las relaciones sexuales se conoce como onah, y es uno de los tres derechos básicos de la esposa (los otros son la comida y la ropa), que un esposo no puede reducir. El Talmud especifica tanto la cantidad como la calidad del sexo que un hombre debe darle a su esposa.

Sin embargo, la mujer no se obliga a proporcionar placer sexual al hombre. Esto, probablemente sea resultado de la idea de que el hombre obtiene lo obtiene más fácilmente.

Esta idea, vigente por siglos, se ve reflejada en la actualidad. Actualmente hay mucha más información acerca de la satisfacción sexual (o falta de ella) de la mujer que del hombre. Persiste la idea de que el hombre es la parte activa de la pareja sexual, que es quien tiene la iniciativa y sabe – o debe saber – que hacer y como proporcionar placer a la mujer. Y por eso, se presta más atención, por lo menos en el último medio siglo, a la respuesta sexual de la mujer que a la del hombre. Entró a la escena pública el clítoris, su ubicación, su función y sus placeres, mientras que, de no ser por el tema de la disfunción eréctil, y esto, por la mercadotecnia de productos y tratamientos, no se presta casi atención al lado masculino de la ecuación.

En internet hay una proporción muchas veces mayor de páginas relativas al orgasmo femenino que la que hay acerca del orgasmo de los hombres.

Popularmente, se cree que el orgasmo masculino es totalmente diferente al de las mujeres, pero en realidad, su mecanismo es muy similar. La diferencia se da por la diferencia misma de los órganos sexuales que intervienen.

El orgasmo, tanto para el hombre, como para la mujer, es el punto más alto del placer sexual. Generalmente se acompaña de la eyaculación, que es la descarga de semen. Ésta última tiene la finalidad de lanzar el esperma para la fecundación del óvulo en la mujer.

El orgasmo masculino puede dividirse en dos etapas:

1.- Acumulación del esperma. En esta etapa, se acumulan en la próstata los diversos integrantes del esperma.

2.- Descarga o de expulsión. Esta segunda etapa, que generalmente es visible, es la eyaculación propiamente dicha. Por la contracción de los músculos que rodean la base del pene, se expulsa rítmicamente el esperma. Durante la expulsión espasmódica del esperma, el hombre siente un placer intenso; el orgasmo.

Para llegar a este final feliz, según los famosos investigadores de la sexualidad humana,  William Masters y Virginia Johnson, el hombre pasa por cinco fases:

Deseo

La fase de deseo o estimulación se da de muchas maneras; una mirada, un olor, un roce… esto y más, despierta el deseo

Excitación
Al ser estimulado física o psicológicamente, el hombre experimenta una erección. La sangre fluye hacia el pene haciendo que crezca en tamaño y se vuelva rígido. Los testículos se estiran y el escroto se tensa.

Meseta

Conforme los vasos sanguíneos dentro y alrededor del pene se llenan de sangre, el glande y los testículos aumentan de tamaño. Los músculos de los muslos y los glúteos se tensan, la presión sanguínea aumenta, el pulso se acelera y la frecuencia respiratoria aumenta.

Orgasmo
El semen, que es una mezcla de esperma (5%) y líquido (95%), forzado por una serie de contracciones es expulsado del pene en un proceso llamado eyaculación. El orgasmo masculino promedio dura de 10 a 30 segundos.

Resolución

El hombre entra en una fase de recuperación temporal durante la que no le es posible tener más orgasmos, a diferencia de la mujer, que puede tener orgasmos múltiples, uno inmediatamente después el otro. Esto se conoce como período refractario, y su duración varía de persona a persona, desde pocos minutos hasta unos días, dependiendo de la edad, la condición física y el estado de ánimo.

Este período generalmente se prolonga a medida que el hombre envejece. Durante esta fase, el pene y los testículos vuelven a su tamaño original. La frecuencia respiratoria y el pulso son rápido.

Un experimento llevado a cabo durante 2006 demostró que los orgasmos durante el sexo son significativamente mejores que los experimentados en soledad mediante la masturbación. La trascendencia de los orgasmos mediante relaciones sexuales se debe a que el cuerpo del hombre libera 400 veces más prolactina que cuando se masturba, por la que diversos estudios han atestiguado que tener bajos niveles de prolactina afecta a la salud sexual de los hombres y puede conducir a la disfunción eréctil.

El orgasmo como protección contra el cáncer.

Un estudio de 2015 de la American Urological Association, descubrió que los hombres que eyaculan con mayor frecuencia (alrededor de 21 veces al mes) reducen el riesgo de cáncer de próstata en un 20% ya que durante el orgasmo se liberan distintas hormonas como la oxitocina que disminuye la tensión arterial.

TRASTORNOS ORGÁSMICOS MASCULINOS

La testosterona es el factor principal que impulsa el deseo sexual que es clave para iniciar el proceso que conducirá al orgasmo. Un hombre puede no tener deseo sexual si tiene un nivel de testosterona bajo, depresión, alguna enfermedad cardíaca o utiliza medicamentos antidepresivos. En estos casos, es posible que su cuerpo no responda a los estímulos sexuales y no pueda experimentar el orgasmo.

Eyaculación precoz

La eyaculación en los hombres está asociada con el orgasmo. La eyaculación precoz es un problema sexual común. Es cuando el hombre alcanza el orgasmo y eyacula poco minutos, y a veces, segundos, después de la penetración. Puede ser causada por varios factores; psicológicos como la culpa o la ansiedad, o fisiológicos, como niveles hormonales bajos o algún daño nervioso.

 DIFERENCIAS ENTRE EL ORGASMO MÀSCULINO Y EL FEMENINO:
  • Ellas tienen más facilidad que ellos para tener orgasmos múltiples en un breve periodo de tiempo.
  • Los hombres alcanzan el orgasmo tras pocos minutos de estimulación, ellas requieren de un poco más de tiempo de estimulación para alcanzarlo.
  • El placer es más efímero en los hombres, el clímax dura aproximadamente de 3 a 10 segundos, mientras que los orgasmos femeninos pueden durar hasta un minuto.

Orgasmo y eyaculación no son lo mismo. Aunque en la mayoría de las veces la eyaculación se produce al alcanzar el orgasmo, el hombre puede eyacular sin haber tenido orgasmo y también puede tenerlo sin eyacular

Hombre multiorgásmico.

El multiorgasmo femenino es mucho más común que el masculino, pero los hombres también pueden tenerlos. Es cosa de práctica y esfuerzo. Una técnica es llegar al clímax sin eyacular. Mediante el entrenamiento adecuado y mucha práctica es posible ir disminuyendo el periodo refractario, el lapso necesario para volver a excitarse y tener una erección.

RECOMENDACIÒNES PARA LAS MUJERES. COMO HACER QUE TU PAREJA TENGA ORGASMOS SENSACIONALES.

Se habla mucho de lo que los hombres pueden y deben hacer para proporcionar placer sexual a las mujeres, pero poco en el sentido inverso, dándose por sentado que el hombre solo piensa en sexo y no necesita nada más que tener a una mujer cerca, para estar en posibilidad de actuar y satisfacerse.

Esto no es así, También las mujeres pueden hacer muchas cosas para aumentar el placer de su pareja.

El hombre es muy visual, más durante el acto sexual. Le excita mucho ver a la mujer, antes y durante, por lo que es muy recomendable que ella no le niegue el placer de verla. Esto es más intenso en algunas posiciones sexuales, como cuando ella está hincada arriba de él.

El pene no es la única parte erógena del hombre. Hay muchas otras partes del cuerpo que responden intensamente al ser tocadas y acariciadas por los dedos y por la lengua. Cada hombre es diferente por lo que la exploración y el descubrimiento son una práctica muy erotizante.

El sexo oral es muy placentero para el hombre, igual que para la mujer, pero este no se limita solamente a las áreas genitales. Todo el cuerpo es muy receptivo a besos, lamida y chupadas. Y uno de los mejores tipos de sexo oral es el que consiste en hablar y oír; en compartir con la pareja fantasías y deseos. Esto es muy excitante, tanto para el que lo dice tanto como para el que lo oye, porque, además, añade el ingrediente de la intimidad, la confianza y el conocimiento mutuo, contrariamente a lo que dijo Woody Allen: “No sé por qué lo llaman Sexo Oral si es cuando menos se puede hablar”.

Otra práctica muy placentera para el hombre es ser estimulado simultáneamente en dos o más partes del cuerpo. Así, mientras la mujer le acaricia los genitales con una mano, con la otra acaricia la espalda y al mismo tiempo, lo besa o le muerde suavemente la oreja.

Y cuando ya va a llegar el final, un instante antes de la explosión, detenerse, aguantar, retrasar cuanto se pueda el salto al abismo.

Todo esto, no solo da placer intenso al hombre. La pareja también experimenta una fuerte excitación que hará que su orgasmo sea más intenso. Es un juego de espejos en que las sensaciones se reflejan de uno hacia el otro en sucesión infinita hasta la pequeña muerte…Y la vuelta a la vida con más ganas y entusiasmo.


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