Enlace Judío México e Israel / rab Shlomo Katz – La perasha de esta semana dice: “Él volverá y te reunirá de todos los pueblos a los que Hashem, tu D-os, te ha dispersado”. Jazal (rabinos del Talmud) observa que la Torá no dice, “Él te devolverá”. Más bien dice, “Él volverá”. Parece que el mismo D-os hará, por así decirlo, teshuvá (arrepentimiento y corrección).

Rab Yojanan Luria z “l (muerto en 1577) explica: D-os se arrepentirá de exiliarnos, aunque (obviamente) no cometió ningún pecado. La lección de ello es que nosotros tampoco debemos avergonzarnos de arrepentirnos. De hecho, si Aquel que no estaba en el camino equivocado promete cambiar sus caminos, entonces ciertamente podemos y debemos dejar un camino que está equivocado.

¿A qué se puede comparar la promesa de D-os? Pregunta rab Luria a un médico cuyo paciente tiene miedo de tomar la medicina que le ha sido prescrita. Para demostrar al paciente que las píldoras no son dañinas, el médico puede ingerir algunas. Así, también, una persona puede tener miedo de cambiar, aunque sea para mejorar, pues tal cambio es una admisión implícita de que sus viejas costumbres estaban equivocadas. Admitirlo puede ser vergonzoso y doloroso. Por lo tanto, D-os dice, “Primero cambiaré mis costumbres (es decir, reunir a tu gente dispersa), luego puedes seguirme”

Rab. Luria agrega: Solía despreciar a los tzaddikim (justos) que continuamente ayunan y afligen sus cuerpos. Pensaba: “D-os ha creado el cuerpo humano con una forma perfecta; una persona que protege ese cuerpo aumenta su capacidad de obtener conocimiento.” Sin embargo, más tarde me di cuenta de que estos tzaddikim, que ayunan para obtener la expiación aunque apenas hayan pecado, hacen posible que los que realmente han pecado se arrepientan sin sobresalir o hacerse notar. Con respecto a estos tzaddikim se dice (Daniel 12:3), “Los que traen mérito al público brillarán como las estrellas para siempre.” (Meshivat Nefesh)

Fuente: Hamaayan