Enlace Judío México e Israel.- Según informes, el príncipe heredero de Abu Dabi y gobernante de facto de los Emiratos Árabes Unidos, el jeque Mohammed bin Zayed Al Nahyan, no asistió a la ceremonia de la Casa Blanca esta semana para establecer lazos diplomáticos plenos con Israel enojado por la declaración del primer ministro Benjamin Netanyahu de que la anexión de partes de Judea y Samaria (Cisjordania) seguía sobre la mesa
El sitio web saudita Elaph informó que un funcionario israelí anónimo dijo que el príncipe heredero expresó su resentimiento con el jefe del Mossad, Yossi Cohen, por la insistencia de Netanyahu en que la anexión seguía siendo una posibilidad para el futuro y, como resultado, envió al ministro de Relaciones Exteriores Abdullah bin Zayed al-Nahyan a la ceremonia en Washington, publicó The Times of Israel.
Según el informe, citado por las noticias del Canal 13, el alto funcionario dijo que el príncipe heredero convocó a Cohen para decirle que estaba molesto por la insistencia de Netanyahu de que la anexión se retrasaba en lugar de cancelarla.
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Además, el informe rechazó las afirmaciones de que los Emiratos Árabes Unidos insistieron en que se excluyera al ministro de Defensa, Benny Gantz, y al ministro de Relaciones Exteriores, Gabi Ashkenazi, de las conversaciones entre las dos naciones, y dijo que para Abu Dabi estaba claro que no habría interferencia en la política interna israelí de esta manera.
El informe decía que cualquier impresión que Netanyahu pudiera haber dado de que los Emiratos Árabes Unidos no deseaban trabajar con los ministros de Kajol Lavan no reflejaba la realidad.
Además, el informe dice que los Emiratos Árabes Unidos esperan que Netanyahu cumpla con los compromisos asumidos por él mismo, sus emisarios o la administración Trump, incluida la controvertida venta de armas y la anexión de Judea y Samaria (Cisjordania).
Los informes de los medios han indicado que Israel dio su aprobación explícita o tácita para la venta de cazas furtivos F-35 para sellar el acuerdo con Emiratos Árabes Unidos, aunque Netanyahu lo ha negado repetidamente.
Netanyahu había prometido durante meses anexar grandes partes de Judea y Samaria (Cisjordania) a partir del 1 de julio, pero ese plan se suspendió como parte del acuerdo de normalización con los Emiratos Árabes Unidos, como se especifica en la declaración conjunta de los países del 13 de agosto. Trump dijo el mes pasado que el asunto ha sido “retirado de la mesa”, aunque Netanyahu insiste en que permanece “sobre la mesa”.
Fuentes con conocimiento directo del asunto dijeron a The Times of Israel recientemente que la administración Trump había dado a Emiratos Árabes Unidos un compromiso durante las negociaciones de normalización de que Washington no reconocería una anexión israelí de los asentamientos del Valle del Jordán y Judea y Samaria (Cisjordania) hasta 2024 como muy pronto.
Netanyahu y los ministros de Relaciones Exteriores de los Emiratos Árabes Unidos y Bahrein firmaron acuerdos históricos en una ceremonia en la Casa Blanca esta semana, estableciendo lazos diplomáticos plenos (en el caso de los EAU) y declarando la intención de hacerlo (en el caso de Baréin).
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