Enlace Judío México e Israel – Los líderes palestinos son “fracasados” que han perdido sistemáticamente oportunidades para un acuerdo con Israel y ahora se alinean con los enemigos de Arabia Saudita, manifestó el ex-jefe de Inteligencia de Arabia Saudita, Bandar bin Sultan en una entrevista con el Canal saudí al-Arabiya, informó The Times of Israel.

“La causa palestina es una causa justa, pero sus defensores son fracasos. La causa israelí es injusta, pero sus defensores son exitosos. Eso resume los acontecimientos de los últimos 70 o 75 años”, enfatizó bin Sultan.

Bin Sultan fue embajador de Arabia Saudita en Washington durante más de 30 años. Tras su regreso a Riad, desempeñó varias funciones de inteligencia. Dirigió los servicios de seguridad de Arabia Saudita de 2012 a 2014, así como el Consejo de Seguridad Nacional Saudita durante más de una década.

Durante la entrevista, el príncipe saudí habló de la historia de las relaciones de su país con los palestinos. Criticó duramente al liderazgo palestino por lo que consideró repetidas oportunidades perdidas para alcanzar un acuerdo con Israel, y por aceptar ayuda mientras ignoraba el consejo político saudí.

“Creo que nosotros en Arabia Saudita, actuando de buena voluntad, siempre hemos estado ahí para ellos. Cuando pidieron algún consejo o asistencia les ayudamos sin esperar nada a cambio, pero ellos aceptaban la ayuda e ignoraban el consejo. Luego fallaban y volvían a nosotros, y nosotros los apoyábamos de nuevo, independientemente de sus errores”, dijo bin Sultan.

“Incluso justificamos ante todo el mundo las acciones de los palestinos, aunque sabíamos que, en efecto, no estaban justificadas, pero no queríamos apoyar a nadie en su contra”, continuó.

Sus observaciones reflejan el creciente descontento público con el liderazgo palestino en Arabia Saudita, así como el acercamiento del reino a Israel. En 2017 el príncipe heredero Mohammad bin Salman dijo a la revista mensual The Atlantic que creía que tanto palestinos como israelíes tenían derecho “a su propia tierra”.

Arabia Saudita ha disfrutado durante mucho tiempo de lazos encubiertos con Israel. En las últimas semanas se ha especulado sobre el posible papel de Riad en los llamados Acuerdos de Abraham, mediados por Estados Unidos para la normalización de relaciones de Baréin y los Emiratos Árabes Unidos con Israel.

Bin Sultan analizó el plan de partición de 1948 y los Acuerdos de Camp David de 1979 con Egipto, que podrían haber llevado al establecimiento de un Estado palestino o de una autonomía palestina. Calificó a ambos planes de preferibles al statu quo, observando el continuo crecimiento de los asentamientos israelíes en Judea y Samaria. Sostuvo que la negativa palestina para lograr un acuerdo y los boicots a los países que hicieron la paz con Israel, empujaron al mundo árabe a la división.

“Israel trabaja para aumentar su influencia, mientras que los árabes están ocupados unos con otros. Los palestinos y sus líderes lideran estas disputas entre los árabes”, manifestó.

Acusó al difunto líder palestino Yasser Arafat de carecer de coraje político para aceptar los Acuerdos de Camp David, diciendo que incluso Arafat reconoció que sus disposiciones eran mejores que los Acuerdos de Oslo, que finalmente firmó con Israel en 1995.

“Pensé que podría haber sido un mártir y dar su vida para salvar a millones de palestinos”, continuó el ex alto funcionario saudí.

Bin Sultan describió las conversaciones que había presidido entre las facciones palestinas rivales, Fatah y Hamás. Comentó que se requirió una diplomacia compleja para llegar a un acuerdo que satisficiera a ambos movimientos, que han estado en desacuerdo desde 2007 por el control de la Franja de Gaza.

“Pero tan pronto como Fatah y Hamás firmaron su acuerdo recibimos la noticia de que ya se habían retractado y habían empezado a conspirar entre ellos una vez más”, comentó.

Las relaciones entre los palestinos y las monarquías conservadoras del Golfo han deteriorado a través de los años. La Autoridad Palestina no ha recibido ayuda de los Emiratos Árabes Unidos desde 2014, mientras que Arabia Saudita comenzó a encarcelar y procesar agresivamente a miembros de Hamás en su suelo desde 2017.

Tras el anuncio de los Acuerdos de Abraham a mediados de agosto, los palestinos salieron a las calles y quemaron imágenes del príncipe heredero de los Emiratos Árabes Unidos Mohammad bin Zayed. El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas describió la normalización de relaciones entre Israel y los Emiratos como “una puñalada en la espalda”.

Bin Sultan describió la retórica empleada por los palestinos ante los acuerdos de normalización como una “transgresión contra el liderazgo de los países del Golfo” y un “discurso reprobable”.

“Este bajo nivel de discurso no es lo que esperamos de funcionarios que buscan ganar el apoyo mundial para su causa”, dijo.

“Creo que [nuestro apoyo] creó una sensación de indiferencia por su parte, y se han convencido de que no hay precio que pagar por los errores que cometen hacia el liderazgo saudí o el estado saudí, o los líderes y países del Golfo”, apuntó.

El ex-jefe de Inteligencia saudí acusó a los dirigentes palestinos de alinearse con Irán y Turquía contra las monarquías conservadoras del Golfo.

“¿Quiénes son los aliados de los palestinos ahora? ¿Irán, que está usando la causa palestina como pretexto a expensas del pueblo palestino?… ¿O Turquía, a la que los líderes de Hamás han agradecido su postura en apoyo de Hamás y la causa palestina?” preguntó bin Sultan retóricamente.

Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico