Enlace Judío – El toque de queda nocturno en todo el país con motivo de Purim entró en vigor este jueves y continuará hasta el domingo por la mañana, en un intento por evitar congregaciones que puedan impulsar rebrotes de coronavirus.

Según lo establecido por el toque de queda, los israelíes tienen prohibido viajar a más de un kilómetro de su domicilio entre las 8:30 p. m. y las 5 a. m. y solo los negocios esenciales pueden abrir durante ese horario, de acuerdo con The Times of Israel.

Las prohibiciones de celebrar fiestas y recibir invitados en casa también estarán vigentes durante el toque de queda.

Se emitirán multas de 150 dólares a cualquier persona que sea sorprendida infringiendo el toque de queda, que según una declaración conjunta de la Oficina del Primer Ministro y el Ministerio de Salud no se aplicará a las áreas con una mayoría de residentes no judíos o de Jerusalén Este.

Se espera que los ministros del gobierno detengan el transporte público a Jerusalén el sábado por la noche y el domingo para evitar que los ciudadanos viajen a la ciudad para las celebraciones de Shushan Purim, según reportes.

Imágenes transmitidas el Canal 12 israelí mostraron lo que parecían ser los preparativos para una reunión masiva de Purim en la ciudad ultraortodoxa de Bnei Brak. La cadena dijo que no estaba claro si el evento había sido cancelado ante la entrada en vigor del toque de queda.

El ministro de Salud de Israel, Yuli Edelstein, advirtió sobre posibles restricciones durante Pésaj si se llevan a cabo reuniones de celebración durante Purim.

“Si hay infracciones masivas, entonces en Pésaj nos quedaremos todos en casa”, dijo a la cadena pública israelí Kan.

Después de las reuniones festivas durante Purim el año pasado, que se produjeron al comienzo de la pandemia de COVID-19 en Israel, hubo un aumento en los casos de coronavirus en el país.

Purim suele estar marcado con fiestas de disfraces, así como grandes comidas y reuniones de familiares y amigos. Desde el comienzo del brote de coronavirus en el país el año pasado, el gobierno ha ordenado ocasionalmente toques de queda, específicamente durante las principales festividades.

La Policía de Israel dijo que se desplegarán puestos de control en 24 lugares de todo el país para hacer cumplir el toque de queda. Cientos de patrullas de policía también vigilarán las carreteras durante el toque de queda.

El comisionado del gobierno para coronavirus, Najman Ash, dijo el martes que a los funcionarios les preocupa que las violaciones durante Purim puedan aumentar las tasas de infección, lo que obligaría al país a volver a un confinamiento.

Si bien el toque de queda nocturno probablemente evitará las fiestas, muchas de las tradiciones de Purim, desde la lectura del rollo de Esther en las sinagogas por la noche y la mañana, o la comida tradicional, tienen lugar durante el día.

Para esas reuniones están vigentes las restricciones sanitarias actuales, que limitan los grupos a 10 en el interior y 20 al aire libre.

El toque de queda llega cuando Israel ha aliviado su tercer confinamiento a nivel nacional después de una exitosa campaña de vacunación que hasta ahora ha visto a un tercio de su población recibir ambas dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech.

Sin embargo, las tasas de contagio siguen siendo altas, superando las 4,000 por día.

Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío