Enlace Judío.- Austria rompió filas con la Unión Europea el martes y dijo que trabajaría junto con Israel y Dinamarca para producir vacunas de segunda generación contra mutaciones del coronavirus.

El canciller Sebastian Kurz viajará a Israel esta semana con la primera ministra danesa Mette Frederiksen para ver de cerca el rápido despliegue de la vacuna en el país.

El canciller Sebastian Kurz dijo que Austria y Dinamarca, como miembros del First Mover Group fundado por Kurz, trabajarían con Israel en la producción de vacunas contra las mutaciones del coronavirus e investigarían conjuntamente opciones de tratamiento.

El anuncio es una reprimenda al programa conjunto de adquisición de vacunas de la UE para los estados miembros, que ha sido criticado por ser demasiado lento para acordar acuerdos con los fabricantes.

Los problemas de producción y los cuellos de botella de la cadena de suministro también han ralentizado las entregas al bloque, retrasando el lanzamiento de vacunas, publicó Haaretz.

Si bien la decisión de acordar que la UE adquiere vacunas para los estados miembros fue correcta en principio, Kurz dijo que la Agencia Europea de Medicamentos había sido demasiado lenta para aprobar las vacunas y atacó los cuellos de botella de suministro de las compañías farmacéuticas.

“Por lo tanto, debemos prepararnos para más mutaciones y ya no debemos depender únicamente de la UE para la producción de vacunas de segunda generación”, dijo en un comunicado.

Renee Gallo-Daniel, directora de la asociación austriaca de fabricantes de vacunas, dijo a la emisora ​​ORF que la producción local de vacunas era importante.

Aunque llevaría meses o años establecer o renovar una unidad de producción para ese propósito, era sensato pensar tan lejos en el futuro, especialmente con respecto a futuras pandemias, dijo Gallo-Daniel.

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