(JTA) – Un oficial de policía del Capitolio fue suspendido luego de que se encontrara cerca de su área de trabajo una copia de “Los Protocolos de los Sabios de Sión”, un documento antisemita infame.

BEN SALES

Zach Fisch, jefe de gabinete del representante Mondaire Jones, dice “horrorizado” después de descubrir en su zona de trabajo en el Capitolio un ejemplar del libro virulentamente antisemita que alega que la camarilla judía controla el mundo.

Ilustrativo: El frontispicio de una edicion de 1912 de los ‘Protocolos de los Ancianos de Sion’. (Wikipedia / dominio publico)

El oficial, parte de la fuerza que fue abrumada durante la insurrección del 6 de enero en el Capitolio de Estados Unidos, está bajo investigación “luego de que el domingo se descubriera material de lectura antisemita cerca de su área de trabajo”, según el Washington Post.

Zach Fisch, jefe de gabinete del representante Mondaire Jones, un congresista demócrata de Nueva York, encontró el documento, que estaba recortado y hecho jirones, en una mesa en el puesto de control de seguridad de la Policía del Capitolio el domingo por la noche. Envió una foto del documento al Washington Post.

“Cuando salí de mi oficina en Longworth ayer, descubrí algo que, como judío, me horrorizó”, tuiteó Fisch el domingo por la noche. “En el puesto de control de seguridad de la Policía del Capitolio de los Estados Unidos, alguien había dejado a la vista una vil propaganda antisemita”.

Los Protocolos, publicados por primera vez en Rusia a principios del siglo XX, es uno de los tratados antisemitas más extendidos de todos los tiempos. Alega una conspiración judía para controlar el mundo. Ha sido publicado en todo el mundo y fue impreso por primera vez en los Estados Unidos por Henry Ford.

La Policía del Capitolio ha enfrentado escrutinio desde que una turba de alborotadores pro-Trump logró abrumar a la mayoría de sus oficiales e irrumpir en el Capitolio el 6 de enero, en un intento por evitar que el Congreso certificara los resultados de las elecciones presidenciales. Se vio a algunos oficiales siendo amigables con los alborotadores y alentándolos. Un oficial de policía, Brian Sicknick, murió debido a las heridas sufridas durante el motín. Decenas más resultaron heridas.

“Este es tanto un problema de seguridad nacional como un problema de seguridad en el lugar de trabajo”, tuiteó Fisch. “Nuestra oficina está llena de personas – negras, morenas, judías, queer – que tienen buenas razones para temer a los supremacistas blancos. Si el USCP (Policía del Capitolio de los Estados Unidos, por sus siglas en inglés) es todo lo que se interpone entre nosotros y la mafia que vimos el 6 de enero, ¿cómo podemos sentirnos seguros?”

De la traducción (c) Enlace Judío México
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