Enlace Judío – Al asumir su cargo como ministro de Exteriores, el líder de Yesh Atid, Yair Lapid aseguró que “Israel trabajará para reparar las relaciones con el Partido Demócrata de Estados Unidos”, informó el sitio de noticias Ynet.

“La política hacia el Partido Demócrata fue vergonzosa y peligrosa”, destacó Lapid durante la ceremonia oficial que tuvo lugar en el Ministerio de Asuntos Exteriores en Jerusalén.

“He advertido a menudo contra esta política, pero el gobierno saliente hizo una apuesta imprudente al alinearse con los republicanos, poniendo en peligro la posición bipartidista de Israel en Estados Unidos”, continuó.

“Los republicanos son importantes para nosotros, pero no están solos, y ahora nos enfrentamos a una Casa Blanca, un Senado y una Cámara de Representantes demócratas. Debemos cambiar nuestro enfoque hacia el partido demócrata”, enfatizó.

Lapid comentó que durante su conversación con el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, este expresó su voluntad de fortalecer las relaciones bilaterales entre ambos países en base al respeto mutuo y un mejor diálogo.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, llamó para felicitar al primer ministro Naftali Bennett poco después de la asunción del nuevo gobierno en Israel el domingo por la noche, y señaló en un comunicado que “espera trabajar con el primer ministro Bennett para fortalecer todos los aspectos de la estrecha y duradera relación entre nuestras naciones”.

“Israel no tiene mejor amigo que Estados Unidos”, expresó Biden. “El vínculo que une a nuestros pueblos es una prueba de nuestros valores compartidos y estrecha cooperación de décadas, y mientras seguimos fortaleciendo nuestra colaboración, Estados Unidos sigue siendo inquebrantable en su apoyo a la seguridad de Israel”.

El presidente de EE.UU. subrayó que su administración está “plenamente comprometida a trabajar con el nuevo gobierno israelí para promover la seguridad, la estabilidad y la paz para israelíes, palestinos y los pueblos de toda la región en general”.

El nuevo canciller israelí aseveró que “Israel debe reparar sus relaciones con la comunidad judía estadounidense, que es mayoritariamente progresista y a menudo estuvo en desacuerdo con las políticas del gobierno de Netanyahu”.

Criticó los comentarios del exembajador israelí en EE.UU., Ron Dermer, quien recientemente sugirió que Israel debe enfocarse más en la comunidad cristiana evangélica que en los judíos de EE.UU.

“La gente tiene que entender que la columna vertebral del apoyo a Israel en Estados Unidos son los cristianos evangélicos. Es cierto por los números y también por su apoyo apasionado e inequívoco a Israel”, manifestó Dermer en una conferencia de prensa el mes pasado.

“El hecho de que nos apoyen grupos evangélicos y otros en Estados Unidos es importante, pero los judíos del mundo son más que aliados de Israel. Son una familia”, dijo Lapid el lunes.

“Todas las corrientes del judaísmo, reformistas, conservadores y ortodoxos, son nuestra familia, y los lazos familiares son los más importantes que hay que cultivar”, insistió.

En cuanto a Irán, sostuvo que Israel debe prepararse para el posible retorno de Estados Unidos al acuerdo nuclear con la República Islámica.

“Fue un mal acuerdo, al que me opuse entonces y ahora. Israel podría haber manejado el tema de otra manera en su oposición al acuerdo y podría haber tenido más impacto en las negociaciones”, explicó.

Lapid calificó al reino hachemita de importante socio estratégico. “El rey Abdalá II es un importante líder regional y un socio estratégico. Trabajaremos con él para fortalecer los lazos bilaterales”, aseguró.

En cuanto a la cuestión palestina, reconoció que no se espera un avance en las conversaciones para resolver el conflicto palestino-israelí, pero subrayó que Israel debe trabajar para mejorar la vida de los palestinos a través del diálogo.

El canciller francés, Jean-Yves Le Drian, dijo el lunes que su país está dispuesto a apoyar cualquier esfuerzo para facilitar la reanudación del diálogo entre israelíes y palestinos, “con vistas a una solución justa y duradera del conflicto, en el marco de una solución de dos Estados”.

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