Enlace Judío – Hamás advirtió este viernes que Israel está “jugando con fuego” al permitir que judíos visiten el Monte del Templo y marchen alrededor de los muros de la Ciudad Vieja de Jerusalén en Tishá B’Av, que marca el día en que los Templos fueron destruidos, informó The Jerusalem Post.
El grupo terrorista palestino también se pronunció contra las demoliciones y los desalojos planificados de palestinos en los barrios de Silwan y Sheikh Jarrah en Jerusalén Este.
Hamás afirmó que continuará el enfrentamiento contra Israel y pidió a la juventud de Jerusalén que se movilice a las puertas de la Ciudad Vieja de Jerusalén y en toda la ciudad para enfrentar a los israelíes, a partir del sábado.
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El grupo terrorista pidió a los palestinos de Judea y Samaria (Cisjordania) y árabes israelíes que visiten la mezquita de al-Aqsa en Eid al-Adha, que comienza el domingo por la noche.
Hamás también pidió a los residentes de Gaza que “mantengan el dedo en el gatillo” para defender Jerusalén.
En mayo, las tensiones en torno a los desalojos en Sheikh Jarrah, así como los enfrentamientos entre las fuerzas israelíes y los palestinos en el Monte del Templo, llegaron a un punto crítico en Yom Yerushalayim, cuando Hamás disparó cohetes hacia Jerusalén, lo que provocó un conflicto de 11 días llamado Operación Guardián de los Muros.
Este año, Tishá B’Av coincide con Eid al-Adha, conocido como el “festival del sacrificio”, que marca el fin de la peregrinación del Hajj a La Meca y conmemora la disposición de Abraham a sacrificar a su hijo para demostrar su dedicación a Dios. En los últimos años, se han producido enfrentamientos en el Monte del Templo en Tishá B’Av.
En 2019, cuando coincidieron las 2 festividades, estallaron violentas protestas en el Monte del Templo, en las que palestinos hirieron a 4 agentes de policía y 40 palestinos resultaron heridos en los enfrentamientos.
Ese año, a los judíos se les prohibió inicialmente la entrada al Monte del Templo en Tishá B’Av, pero finalmente se les permitió entrar después de un alboroto de los líderes religiosos sionistas.
Las visitas de judíos religiosos al Monte del Templo son monitoreadas por guardias del Waqf jordano y la Policía israelí, y toda oración judía, incluida la oración en silencio, está prohibida, según el Centro de Asuntos Públicos de Jerusalén.
No se pueden llevar al monte objetos sagrados judíos, como libros de oraciones o mantos de oración, según el sitio web de turismo Tourist Israel.
A pesar de la prohibición de la oración, los visitantes judíos han podido realizar algunas oraciones en el sitio sin ser molestados por la Policía desde diciembre de 2019.
La organización de derecha israelí Im Tirzu, junto con otras organizaciones de derecha, está planeando una marcha alrededor de los muros de la Ciudad Vieja de Jerusalén el sábado por la noche, cuando comience Tishá B’Av.
El año pasado, la Sede Conjunta de las Organizaciones del Monte del Templo publicó un panfleto con una serie de fallos relacionados con la ley judía para quienes visiten el Monte del Templo en Tishá B’Av el miércoles.
También se espera que este año las temperaturas sean excepcionalmente altas en Tisha B’Av.
El rabino Yehuda Kroizer, rabino del asentamiento de Mitzpé Yerijó en Judea y Samaria, dictaminó el año pasado que si alguien que visita el sitio comienza a sentirse muy débil, se le debe permitir beber agua.
Si pueden arreglárselas con beber una cantidad menor de agua, solo deben beber 40 ml cada nueve minutos.
En Tishá B’Av, que cae el sábado por la noche, los judíos marcan el día en que los dos templos de Jerusalén fueron destruidos y ocurrieron otras calamidades al ayunar durante 25 horas y cumplir con otras prácticas de duelo, como sentarse en el suelo o sillas bajas, sin zapatos de cuero y recitando el Libro de las Lamentaciones, en el que el profeta Jeremías lamenta la destrucción de Jerusalén y el posterior exilio.
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