Enlace Judío – Un grupo de activistas progresistas presentó este miércoles una petición a la Corte Suprema de Justicia de Israel exigiendo medidas disciplinarias contra el Gran Rabino de Jerusalén, Shlomo Amar, por incitar contra los judíos reformistas, miembros de la comunidad LGBTQ local y las Mujeres del Muro, informó Haaretz.
La demanda fue presentada por el Centro de Acción Religiosa de Israel en nombre del Movimiento Reformista de Israel, la Casa Abierta de Jerusalén para el Orgullo y la Tolerancia y Mujeres del Muro. Los peticionarios puntualizaron que durante cinco años han presentado varias quejas judiciales sobre comentarios ofensivos de Amar, sin que sean atendidas. Junto con Amar, el ministro de Justicia, Gideon Sa’ar, y el fiscal general, Avijai Mendelblit, son contrapartes en la petición judicial.
Según la petición, Amar “explota su posición para apuntar e incitar contra comunidades enteras de la sociedad israelí, entre ellas la comunidad reformista, las Mujeres del Muro y la comunidad LGBTQ, a las que trata de manera hiriente, degradante y humillante”.
También puede interesarte
Los peticionarios alegan que este comportamiento viola las leyes de la administración pública de Israel y, al no procesar al rabino ni presentar ninguna denuncia formal en su contra, el Ministerio de Justicia y el fiscal general no cumplen con sus obligaciones.
Amar se ha referido a los judíos reformistas como “gente malvada que comete todas las injusticias del mundo contra la Torá”. Ha acusado a las Mujeres del Muro de “erradicar la Torá, pisotear y degradar la dignidad de la Torá”, de acuerdo a la demanda.
El rabino ha calificado la marcha anual del Orgullo en Jerusalén de “abominación”, afirmando que “ni siquiera los animales se comportan así”. La demanda incluye una lista de 20 declaraciones similares realizadas en los últimos años.
El pasado mes de septiembre, la Corte Suprema ordenó al Gran Rabino de Zfat, Shmuel Eliyahu, asistir a una audiencia disciplinaria por “insultos e incitación” contra los ciudadanos árabes y los miembros de la comunidad LGBTQ. La sentencia se produjo en respuesta a una petición del Centro de Acción Religiosa de Israel.
“Durante años, una y otra vez, el rabino Amar ha demostrado que no es digno del título de ‘rabino’, y más aún de ‘Gran Rabino de Jerusalén'”, acusó la directora del centro, rabina Noa Sattath.
“Sus comentarios, que solo pueden calificarse de odio infundado e impregnado de ignorancia, ofenden a los mismos israelíes y judíos que pagan su salario. Las evasivas y el retraso de los anteriores ministros de Justicia y del fiscal general son aún más exasperantes; al fin y al cabo, saben muy bien que sus blasfemias e incitaciones no son actos judíos ni morales, y menos cuando salen de la boca de un funcionario público y acaban alejando a más y más personas del turbio judaísmo que representa”, agregó.
En respuesta a la denuncia, un representante de la oficina de Amar aseveró que durante todos sus años de servicio público, el Gran Rabino de Jerusalén, “ha honrado y respetado a cada persona por lo que es, de todas las religiones”.
“El rabino Amar también mostraría respeto a los que se hacen llamar judíos reformistas, si declararan que esta nueva religión que han inventado es una religión separada, como el cristianismo o el Islam”, señaló la oficina del rabino en un comunicado.
“El Gran Rabino de Jerusalén lamenta que los miembros del Movimiento Reformista elijan disfrazarse de una denominación judía y distorsionar el judaísmo a su antojo”.
“La gran preocupación es que con el tiempo, judíos inocentes de todo el mundo empiecen a pensar que esta es de hecho la auténtica religión judía”, añadió el comunicado. “Amar es muy consciente de las actividades del Movimiento Reformista en todo el mundo y del gran daño que ha causado al pueblo judío con los matrimonios mixtos y la asimilación”.
“El rabino Amar seguirá luchando con toda su fé, como le obliga la Torá, contra la religión reformista hasta que se declare una religión diferente en todos los aspectos”, dice el comunicado y agrega que la amenaza de una acción disciplinaria contra el rabino, o la posibilidad perder su puesto, no le haría cambiar de opinión.
Amar asume su cargo desde noviembre de 2019. Anteriormente se desempeñó como Gran Rabino Sefaradí de Israel durante 10 años.
Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico
