Enlace Judío – El primer ministro israelí Naftali Bennett dijo este martes que confía en el “nuevo espíritu” en la relación entre Israel y EE. UU., justo antes de partir hacia Washington, donde se reunirá el jueves con el presidente Joe Biden.

“Hay nuevos líderes en EE. UU. e Israel“, dijo Bennett a los periodistas en el Aeropuerto Ben-Gurón. “Traigo conmigo desde Jerusalén un nuevo espíritu que se basa en años de conexión especial entre los dos países. Estoy seguro de que este nuevo espíritu de cooperación ya ha llevado y seguirá conduciendo a grandes logros para Israel y su seguridad”.

Bennett agregó que Irán encabezará la agenda en su reunión del jueves con Biden, pero dijo que también discutirán la pandemia del COVID-19 y la campaña de aplicación de terceras dosis de vacuna en Israel, la crisis climática y los problemas económicos.

Durante su visita, también se espera que Bennett se reúna con el secretario de Estado Antony Blinken, el secretario de Defensa Lloyd Austin y el Asesor de Seguridad Nacional estadounidense Jake Sullivan.

“La reunión entre Bennett y Biden es una señal importante para los líderes mundiales de que el nuevo primer ministro israelí está recibiendo un fuerte respaldo y apoyo estadounidense igual al que recibió su predecesor de la Casa Blanca“, dijo una fuente diplomática citada por el periódico Haaretz. “También hay un mensaje importante para el público israelí sobre el estatus de Bennett como primer ministro en la era posterior a Netanyahu”.

La reunión ocurrirá mientras Biden afronta la crisis en Afganistán, mientras que Bennett abandona Israel en medio de una de COVID-19 y el aumento de las tensiones en la Franja de Gaza.

Se espera que ambos aborden también la crisis económica de la Autoridad Palestina, el conflicto con Hamás en Gaza y las consecuencias de la conducta de EE. UU. en Afganistán para el futuro de Medio Oriente.

Una fuente diplomática dijo el lunes que el meollo de la discusión entre los dos será el tema nuclear iraní, y condenó la forma en que el ex primer ministro Benjamín Netanyahu lo manejó.

“El legado que recibimos es muy difícil”, dijo. “No tiene ningún valor volver al acuerdo nuclear [de 2015]. Irán se encuentra ahora en el punto más avanzado de su programa nuclear, al menos en términos de enriquecimiento [de uranio]. La tasa de enriquecimiento desde 2018 es vertiginosa y preocupante”.

La fuente dijo que Bennett le presentará a Biden una “estrategia ordenada” para hacer frente a la amenaza que representa Teherán. “Para nosotros lo más importante es el [tema] nuclear, pero también es importante la agresión regional [de Irán] en el Líbano, Siria, Irak, Yemen y Gaza, por mar, aire y tierra”, dijo.

La fuente agregó que aunque hasta hace poco parecía que EE. UU. quería volver al acuerdo nuclear, “ha pasado el tiempo desde entonces, el presidente iraní ha cambiado y las cosas parecen menos claras”. Dijo que la elección de Ebrahim Raisi “señala una dirección muy particular” y que el régimen iraní “se encuentra en su punto más extremo desde 1979 [el año de la Revolución islámica]”.

La fuente agregó que aunque el momento de la visita fue un problema, EE. UU. lo considera muy importante. Su propósito, dijo, “es reflejar el nuevo mensaje proveniente de Israel, de una conexión transfronteriza con ambos lados de la política estadounidense, a través del diálogo, escuchar y la falta de dogmatismo”. Agregó: “En los últimos meses las 2 administraciones han construido lazos íntimos y muy atentos, basados ​​en el entendimiento mutuo de los desafíos y prioridades”.

Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío