Enlace Judío – El primer ministro Naftali Bennett y el líder de la oposición, Benjamín Netanyahu, se lanzaron acusaciones este miércoles en la Knéset previo a la esperada votación del presupuesto, informó The Times of Israel.
La coalición liderada por Bennett tiene una ajustada mayoría en la Knéset y busca aprobar el presupuesto para el viernes. Si no aprueba un presupuesto para el 14 de noviembre, la Knéset se disolverá e Israel irá a nuevas elecciones.
Bennett dijo a los legisladores que aprobar el presupuesto era “el momento más importante” desde que se formó su coalición de gobierno en junio.
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El primer ministro señaló que el presupuesto sería el primero en aprobarse en 3 años y medio, período que, dijo, estuvo marcado por “caos, gestión fallida y parálisis, años en los que el país fue una herramienta en un juego personal, años de 4 campañas electorales una tras otra en un callejón sin salida”.
“Hay quienes quieren un país estable y quienes quieren un caos constante”, acusó.
Bennett luego acusó a Netanyahu de intentar representar falsamente que el presupuesto estatal propuesto proporcionará dinero a la Franja de Gaza o a Hamás.
“Este es Bibi [el apodo de Netanyahu]. Este eres tu. Este es tu modelo de negocios, Bibi. Toda la existencia de Netanyahu es dividir… Si hay unidad, no hay Bibi… Si para dividir necesitas mentir, entonces lo dirá, incluso si no es cierto”, dijo. “No hay dinero para Hamás“.
El primer ministro también se enfureció por lo que describió como “hipocresía” del partido Likud de Netanyahu, ya que también había cortejado al islamista Ra’am después de las elecciones para intentar que apoyara su propia coalición propuesta. El Likud ha criticado a Bennett por incluir a Ra’am en el gobierno.
“Estuve allí en las salas cerradas” donde se discutió un gobierno de Netanyahu respaldado por Ra’am, dijo. “Ese fue el único trato [sobre la mesa]”.
“En el momento en que pase el presupuesto, todos entienden, comienza una nueva era en el Likud y todo está abierto”, agregó Bennett.
Hablando después de Bennett y otros representantes del gobierno, Netanyahu elogió a los manifestantes antigubernamentales que se manifestaron en la plaza Habima de Tel Aviv el martes, diciendo que habían acudido al mitin para “expulsar la oscuridad” de la actual coalición.
Netanyahu argumentó que el presupuesto elevará los costos de vida de los israelíes e incluirá medidas que perjudicarán al país, como nuevos impuestos a los refrescos y cubiertos de plástico, alegando que estos afectaran a las personas de bajos ingresos y beneficiarán a los ricos.
“Estamos recibiendo un presupuesto de impuestos. Aumentos de impuestos y fuertes recortes [de gastos]. Muchos impuestos. Es tan típico. El gobierno de la mentira siempre hace todo lo contrario de lo que promete”, dijo el ex primer ministro.
Netanyahu declaró que “este gobierno debe caer”, destacando reportes de que presuntamente los líderes palestinos han instado a los diputados árabes a que ayuden a aprobar el presupuesto para garantizar que Bennett siga siendo primer ministro.
“Los palestinos saben que de Bennett y Lapid obtendrán lo que quieran, y lo que quieren es malo para Israel“, dijo.
El jefe de la oposición también hizo un nuevo llamado a los miembros de la coalición inconformes por el presupuesto para que se opongan a él, ya que el Likud busca desertores, particularmente entre los partidos Yamina y Tikvá Jadashá.
“La historia no perdona”, dijo.
Se espera que las votaciones sobre el presupuesto se prolonguen hasta el jueves por la noche como muy pronto, con cientos de cláusulas que componen el plan de gastos propuesto de 194.000 millones de dólares para 2021 y 183.000 millones de dólares para 2022, además de las múltiples reservas presentadas por la oposición.
Habrá un total de 780 votos separados, que Bennett predijo que serán ganados por la coalición.
La coalición puede reunir en el mejor de los casos 61 votos en la Knéset de 120 escaños, pero Bennett ha dicho que está seguro de que el presupuesto se aprobará.
Los procedimientos de la Knéset sobre el presupuesto comenzaron el martes con discursos de los legisladores, a cada uno de los cuales se le concedieron 30 minutos para dirigirse al parlamento.
La votación real sobre el presupuesto se dividirá en tres: primero una votación sobre el presupuesto para 2021, luego una votación sobre el paquete de reformas que lo acompaña, que contiene los detalles de cómo se pondrá en práctica el plan financiero, y luego el presupuesto para 2022.
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