Enlace Judío – Con el objetivo de rechazar las acusaciones de toma de decisiones opacas, el Ministerio de Salud de Israel permitió que el público escuchara durante 5 horas el debate de la aprobación de la vacuna COVID-19 de Pfizer para niños de entre 5 y 11 años, aunque una decisión final se tomará la próxima semana, informó The Times of Israel.

La audiencia se transmitió en vivo para ofrecer transparencia, y algunos miembros del público preaprobados se les permitió opinar con preguntas en tiempo real. La discusión se produjo días después de que la FDA de EE. UU. autorizara la vacuna para los menores, allanando el camino para que EE. UU. comience a inmunizarlos.

Se espera que el Ministerio de Salud siga el ejemplo de la FDA y apruebe la vacuna para niños de 5 a 11 años. Pero el ministerio está dando todos los pasos necesarios de la manera más transparente posible para aliviar los temores entre muchos padres y convencerlos de que lleven a sus hijos a vacunar.

Una decisión final sobre el asunto está prevista a principios de la próxima semana, dijo el Dr. Boaz Lev, del Ministerio de Salud que abrió la audiencia. Lev dijo que la decisión sobre si también se hará pública la audiencia final se tomará en los próximos días.

Antes de la audiencia del jueves, algunos funcionarios de salud habían expresado sus reparos por la naturaleza abierta de la reunión, temiendo que se sintieran restringidos en lo que podían decir, pero el ministerio siguió adelante con ello como un medio para combatir la información errónea en torno a la vacuna.

La Dra. Sharon Alroy-Preis, jefa de Salud Pública en la dependencia, dijo durante la audiencia que la ola más reciente de la pandemia afectó a los jóvenes que no fueron vacunados en mayor proporción que las rondas anteriores. Dijo que 136 niños padecieron síndrome inflamatorio multisistémico pediátrico (PIMS).

Además, según los datos presentados por Alroy-Preis, los niños vacunados de entre 12 y 15 años están una docena de veces más protegidos contra el contagio del virus y 20 veces más protegidos contra la infección sintomática que los de su edad que no han sido vacunados.

El experto del Ministerio de Salud, Michal Stein, señaló que 393 niños han sido hospitalizados en estado crítico y que 11 de esos pacientes sucumbieron a la enfermedad.

Liat Ashkenazi-Hoffnung, que dirige una clínica para los síntomas de COVID-19 a largo plazo, dijo que el 30% de los niños tratados allí por el llamado “COVID de larga duración” tenían entre 5 y 11 años.

Los funcionarios de salud también presentaron datos de 163 niños de entre 5 y 11 años a los que se les otorgó un permiso especial para recibir la vacuna bajo un estrecho seguimiento.

4 de los niños contrajeron COVID una semana después de ser vacunados, mientras que uno de ellos contrajo el virus 3 semanas después. Solo 4 de los niños experimentaron efectos secundarios menores, como debilidad corporal y dolor en el área de la inyección. Un niño sufrió una convulsión 8 días después de recibir la segunda dosis, pero no le causó ningún daño neurológico.

Alroy-Preis dijo a los espectadores que el Ministerio de Salud no obligará a nadie a vacunar a sus hijos.

“Lo importante es que cada padre tome la decisión por su hijo, basándose en las estadísticas que proporcionamos”, dijo Alroy-Preis. “Como hemos dicho todo el tiempo, no hay ningún intento de forzar u obligar, sino de proporcionar todos los datos para que cada padre pueda tomar la decisión correcta para su hijo”.

Al hablar sobre los ensayos de la vacuna de la firma, un representante de Pfizer que se dirigió a la audiencia dijo que la compañía también estaba considerando espaciar las 2 dosis por un período más largo que las 3 semanas actuales entre la primera y la segunda inyección.

El representante de Pfizer también les dijo a los funcionarios de salud que los datos de la empresa no encontraron casos de miocarditis por afección cardíaca entre los niños de 5 a 11 años que recibieron la vacuna en su ensayo.

La discusión se dividió en 3 secciones: una presentación de información médica sobre las vacunas que se proponen para los niños más pequeños, una presentación de diversas opiniones médicas sobre la vacunación de los niños y una sesión de preguntas y respuestas en la que los expertos del Ministerio de Salud respondieron a las consultas sobre el tema de los participantes del público.

Durante la sección de la audiencia en la que expertos externos comentaron sobre el plan para vacunar a los niños más pequeños, las opiniones se dividieron en gran medida por la mitad, y algunos argumentaron que las vacunas no son necesarias en esta etapa, mientras que otros sostuvieron que podría proteger contra la propagación en la población en general.

Antes de la audiencia, la Asociación de Pediatras de Israel emitió un documento de posición en apoyo de la vacunación de las personas entre las edades de 5 y 11, diciendo que los niños estarán expuestos al coronavirus “tarde o temprano” y la pregunta que los expertos en salud deben considerar es si querían que los jóvenes al menos estuvieran inmunizados contra el virus antes de contraerlo.

Los funcionarios del Ministerio de Salud han dicho que Israel podría comenzar a distribuir vacunas para niños de 5 a 11 años a partir de mediados de noviembre, que es cuando, según los reportes, se espera que llegue el primer lote de los biológicos de Pfizer.

En Israel, las inyecciones de Pfizer sin diluir ya se recomiendan para cualquier persona de 12 años o más, pero los pediatras y muchos padres esperan ansiosamente la protección de los niños más pequeños para detener las infecciones de la variante Delta y para ayudar a mantener a los niños en las escuelas.

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