Enlace Judío.- El Ministro de Defensa, Benny Gantz, realizó una visita histórica a Baréin la semana pasada, un hito importante para ayudar a cimentar los Acuerdos de Abraham, publicó The Jerusalem Post en su editorial.

Durante su breve viaje de dos días, Gantz se reunió con el rey de Baréin, el ministro de defensa y también visitó la 5ª Flota de la Marina de los EE. UU. que está estacionada en la isla nación

A Gantz se le unió en Baréin el comandante de la Marina israelí, el vicealmirante David Saar Salama.

Hace varios años, una visita de alto perfil como esta habría sido inimaginable. Baréin ha estado a la vanguardia de impulsar narrativas de tolerancia y estar abierto a Israel, sin embargo, fueron necesarios los Acuerdos de Abraham y los Emiratos Árabes Unidos a la cabeza, así como el apoyo tácito de Arabia Saudita para que este proceso suceda.

La visita de Gantz se produjo a raíz de la visita del presidente Isaac Herzog a principios de semana a los Emiratos Árabes Unidos y fue una continuación de su importante visita a Marruecos el año pasado. Como tal, Gantz está demostrando que el Ministerio de Defensa está revolucionando su papel en la construcción de relaciones en el exterior. Esto es absolutamente esencial en la región donde los lazos de defensa juegan un papel crucial frente a la agresión iraní.

Gantz participó en una reunión trilateral con su homólogo de Baréin y el vicealmirante Brad Cooper, comandante de la Quinta Flota. Cooper dijo: “Siempre estaremos en nuestro mejor momento cuando estemos en un esfuerzo conjunto”.

El enfoque de la visita, según el Ministerio de Defensa, fue profundizar la cooperación que permitirá a los tres países mantener la estabilidad regional y defender los intereses comunes de Israel, Estados Unidos y Baréin.

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, tras firmar los Acuerdos de Abraham. 15 de septiembre de 2020. (credito: REUTERS/TOM BRENNER)

El Comando Central de las Fuerzas Navales de EE. UU. (NAVCENT) es un componente clave del Comando Central e importante para proteger el mar y la paz marítima. Esto se desprende claramente de un ejercicio naval reciente que Israel realizó con Baréin, los Emiratos Árabes Unidos y NAVCENT en el Mar Rojo y el Ejercicio Marítimo Internacional en el que Israel participa ahora junto con otros 60 países, incluidos algunos con los que no comparte relaciones diplomáticas formales.

Con este fin, Gantz se unió en Baréin al Comandante de la Armada israelí, el Vicealmirante David Saar Salama.

Después de las reuniones, la delegación recorrió el destructor de misiles guiados USS Cole. Fue algo simbólico porque el Cole fue atacado frente a la costa de Yemen en 2000, un preludio de los ataques del 11 de septiembre.

Gantz elogió la cooperación estratégica emergente. “El vínculo entre Israel y los EE. UU. se basa en intereses comunes y, quizás, lo que es más importante, en valores compartidos. Nuestra cooperación militar es un reflejo de ello”, dijo Gantz.

La visita también se produce cuando se lanzaron más ataques con drones contra los Emiratos Árabes Unidos. Uno de los drones fue lanzado, e interceptado, mientras Herzog visitaba Abu Dabi el lunes.

Los representantes respaldados por Irán en la región se están volviendo más audaces. Esto ilustra por qué Israel y el Golfo deben trabajar en estrecha colaboración con los EE. UU. cuando se trata de compartir inteligencia, realizar simulacros conjuntos e incluso compartir tecnología como los sistemas avanzados de defensa aérea israelíes.

¿Qué podría venir después? Los representantes respaldados por Irán sienten que tienen impunidad para atacar países de la región. Sienten que pueden disparar cohetes libremente contra civiles en Israel y los Emiratos Árabes Unidos.

Irán ha traficado armas a Hezbolá y milicias en Irak y Siria, así como a los hutíes en Yemen, desde donde se lanzan los drones contra EAU. Si bien la postura actual de los EE. UU. y los Emiratos Árabes Unidos es principalmente defensiva cuando se trata de estas amenazas, se debe hacer que Irán pague un precio.

En cambio, continúa sentado con las superpotencias mundiales en Viena, donde los negociadores iraníes ni siquiera son cuestionados sobre lo que están haciendo en Yemen.

“Ni siquiera dicen ‘Nu, nu, nu’ y tienen miedo de decir que Irán está llevando a cabo los ataques de los hutíes”, dijo el ministro de Finanzas, Avigdor Lieberman, a The Jerusalem Post la semana pasada.

La visita de Gantz demuestra que todos podemos aumentar los lazos de defensa. El próximo paso se basará en eso a través de acuerdos formales y el intercambio de tecnología de defensa.

Esta cooperación también le mostrará a EE. UU. que tiene aliados y socios clave en la región y que puede trabajar y contar con ellos. La reticencia de EE. UU. a comprometer más recursos a medida que cambia para confrontar a China y Rusia es clara, pero no debe ignorar lo que está sucediendo en Oriente Medio. Irán es una amenaza y se la debe confrontar.

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