Enlace Judío – Hubo una caída en el número de personas recientemente definidas como gravemente enfermas con COVID-19 en Israel, según mostraron datos de su Ministerio de Salud este domingo, pero el comisionado para coronavirus del gobierno instó a la precaución a pesar de la caída de los números, informó The Times of Israel.

Unos 99 pacientes fueron clasificados recientemente en estado grave el sábado, el número más bajo desde el 15 de enero, cuando se diagnosticaron 96 pacientes en estado grave.

El número total de pacientes en estado grave es de 1,057 hasta este domingo, 269 de ellos intubados a ventilación mecánica.

El sábado se diagnosticaron unos 18,020 nuevos casos de COVID en Israel, informó el Ministerio de Salud, con una tasa de prueba positiva del 26.12%.

Si bien es inferior a los 22,375 nuevos casos diagnosticados el viernes, el número refleja una caída en la cantidad de pruebas que generalmente se realizan los sábados. Se tomaron poco más de 76,000 muestras, frente a las 100,000 del día anterior.

El número de muertos se situó en 9,466.

A pesar de la disminución de nuevos casos y una sensación de optimismo compartida por algunos expertos en salud en los últimos días, el comisionado del coronavirus, Salman Zarka, expresó el domingo por la mañana un enfoque más cauteloso.

“Todavía es pronto para decir que la quinta ola ha quedado atrás”, dijo a la cadena israelí Kan.

Al abordar los informes de que el Ministerio de Salud estaba considerando una serie de pasos para aliviar las restricciones de COVID-19, incluido el levantamiento del requisito de usar cubrebocas en interiores, Zarka dijo que tales decisiones aún no deberían tomarse.

“Vemos una disminución, pero los números [de casos] siguen siendo altos”, dijo. “Pasará tiempo antes de que podamos decir que la quinta ola ha quedado atrás”.

Zarka señaló que la subvariante BA.2 de Ómicron ha “creado una ola dentro de una ola” y ha ralentizado la tasa decreciente de nuevos casos, lo que aumenta la incertidumbre sobre el futuro, incluso cuando la quinta ola ha terminado.

“El virus nos ha enseñado que puede crear rápidamente nuevas variantes”, dijo. “Incluso cuando termine la quinta ola, nunca podremos volver a la vida que alguna vez tuvimos”.

El profesor Eran Segal, un destacado asesor del gobierno sobre política de COVID-19, dijo el sábado que Israel probablemente vería menos de 1,000 pacientes hospitalizados con coronavirus en estado grave en algún momento de esta semana.

“Estimamos que las infecciones continuarán con una tendencia a la baja… y para la próxima semana podemos tener 10,000 o 20,000 casos por día… y para fines de la próxima semana estaremos por debajo de los 1,000 casos graves en los hospitales, posiblemente llegando a 800”, dijo Segal al Canal 12 israelí.

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