Enlace Judío México e Israel / Efraim Palvanov – Neil Leslie Diamond (n 1941) nació en Brooklyn en el seno de una familia judía de origen ruso y polaco. Durante su preparatoria cantó en el coro del colegio junto a su compañera Barbra Streisand. Diamond se emocionó con una actuación de Pete Seeger en su campamento de verano judío, y en cuanto volvió a casa consiguió una guitarra y empezó a escribir canciones. Mientras tanto, formaba parte del equipo de esgrima de su instituto y consiguió una beca deportiva para ingresar a la Universidad de Nueva York. (¡Ganó un campeonato de esgrima de la NCAA en 1960!)
Eventualmente, Diamond abandonó su programa de preparación para la carrera de medicina y se puso a trabajar para Sunbeam Music escribiendo canciones por 50 dólares a la semana. Más adelante se independizó y formó un dúo de cantantes con un amigo. Al no tener éxito, decidió trabajar en solitario y consiguió un contrato de grabación con Columbia en 1962. Por desgracia, a pesar de las buenas críticas, su primer álbum fue un fracaso comercial.
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Diamond fue despedido por Columbia y vivió en la pobreza durante los siguientes años de su vida, llegando a sobrevivir con sólo 3 dólares al día. En 1965 empezó a escribir canciones de éxito para The Monkees, como “I’m a Believer”. Pronto se convirtió en un compositor popular y compuso para artistas de la talla de Elvis Presley y Deep Purple. Tuvo su primer éxito en 1966 con “Solitary Man”, seguido de “Sweet Caroline” en 1969 (posteriormente seleccionada para su conservación histórica por la Biblioteca del Congreso).
A partir de entonces, los éxitos siguieron llegando y sus espectáculos se agotaron noche tras noche. Durante un espectáculo en San Francisco en 1979, Diamond se desplomó de repente en el escenario y no pudo levantarse. Resultó que tenía un tumor en la columna vertebral y fue operado durante 12 horas para extirparlo. Su éxito de 1980, “America”, se convirtió en la canción más reconocida del país, y a veces se la compara con un segundo himno nacional. En total, Diamond tuvo diez singles número 1 y 38 llegaron al Top 10 de Billboard. Ha vendido más de 100 millones de discos, lo que le convierte en uno de los músicos más exitosos de todos los tiempos.
Diamond siempre ha hablado abiertamente de su fe judía, cantó “Kol Nidre” en una famosa escena de Yom Kippur en la película The Jazz Singer, y se le ha llamado “el Elvis judío”. Fue incluido en el Salón de la Fama del Rock and Roll, ganó un Grammy a la Trayectoria y tiene una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood. En 2018, Diamond se retiró tras ser diagnosticado con la enfermedad de Parkinson, aunque sigue dedicando gran parte de su tiempo a escribir canciones.
Fuente: Jew of the Week
