Enlace Judío – Israel se está aprovechando del temor de los árabes a Irán para desviar la atención de sus acciones sobre el terreno y “liquidar” la cuestión palestina, dijo este domingo la Autoridad Palestina en una referencia implícita a la Cumbre del Néguev, informó The Jerusalem Post.
La Autoridad Palestina y otros grupos palestinos expresaron su preocupación por la aparente aparición de una alianza militar árabe-israelí en Oriente Medio.
Pero mientras la AP se abstuvo de criticar a los cuatro países árabes que participaron en la cumbre, Emiratos Árabes Unidos, Baréin, Marruecos y Egipto, varios grupos, entre ellos Hamás y la Yihad Islámica Palestina, condenaron enérgicamente la reunión y la calificaron de “cumbre de la vergüenza”.
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Israel está “fingiendo que centra su política exterior en Irán y en las repercusiones del acuerdo nuclear que se está cristalizando entre Irán, Estados Unidos y otras potencias occidentales”, señaló el Ministerio de Asuntos Exteriores de la Autoridad Palestina en un comunicado. “Pero su verdadero objetivo es liquidar la causa palestina y apartarla de la atención del mundo”.
Según la cancillería palestina, Israel, con el pleno respaldo de EE.UU., está “aprovechando la ansiedad y el temor de los árabes para formar una nueva alianza de seguridad que pasa por alto la causa palestina. Esta maniobra israelí pretende encubrir lo que está haciendo sobre el terreno, incluida la expansión de los asentamientos y la judaización de Jerusalén. Este es el principal proyecto que el gobierno israelí pretende implementar como parte de sus intentos de reordenar las prioridades en la región lejos de la cuestión palestina”.
Desde la Franja de Gaza, representantes de las Fuerzas Nacionales e Islámicas, una alianza de varios grupos radicales, condenaron la cumbre como una “puñalada al pueblo palestino y a su causa”.
Los grupos dijeron que la “cumbre de la vergüenza” fue organizada por “el ministro de Asuntos Exteriores del gobierno de ocupación de extrema derecha de colonos y sobre las ruinas de los hogares del pueblo palestino”.
La cumbre se realizó en vísperas del Día de la Tierra, celebrado por los palestinos el 30 de marzo para conmemorar la muerte de seis árabes-israelíes en 1976 durante las protestas contra la decisión del gobierno israelí de confiscar miles de hectáreas para fines estatales en la Galilea, dijeron los grupos.
Israel y Estados Unidos están “engañando” a los países árabes haciéndoles creer que el objetivo de la cumbre es proteger su seguridad contra una amenaza que no existe, según los grupos palestinos.
“La verdadera amenaza para los países árabes es la amenaza israelí”, continuaron. “Cualquier otra amenaza es fabricada por EE.UU. e Israel y solo pretende justificar el establecimiento de una alianza árabe-israelí como una extensión de la OTAN, que fracasó en su primera prueba en Ucrania”.
La Cumbre del Néguev “refleja la pérdida de la identidad árabe para todos los que aceptaron formar parte del proyecto de normalización con el enemigo”, dijo el alto funcionario de la Yihad Islámica Palestina, Daoud Shehab, y añadió: “Todos los árabes tienen derecho a preguntarse: ¿Son los cancilleres árabes tan ignorantes de la realidad y el conflicto en el Néguev ocupado, amenazado de judaización?”
Shehab condenó enérgicamente la participación de los diplomáticos árabes, diciendo que es “uno de los aspectos de la normalización y la cooperación que sirve a la ocupación y a sus políticas agresivas contra el pueblo palestino y su tierra”.
Hamás condenó a los ministros árabes por aceptar la invitación para reunirse con “funcionarios sionistas en la tierra ocupada de Palestina”.
El grupo terrorista reiteró su rechazo a toda forma de normalización con Israel y dijo que tales reuniones “sólo sirven al enemigo para perpetuar su continua agresión contra nuestra tierra, nuestro pueblo y nuestros lugares sagrados”.
Pidió a los países árabes que firmaron acuerdos de normalización con Israel reconsiderar sus acciones “de acuerdo con los intereses de sus pueblos y de acuerdo con sus responsabilidades históricas de proteger a Jerusalén y Palestina de la ocupación sionista”.
El Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) de la OLP dijo que la cumbre refleja la “decadencia actual de los regímenes árabes”.
Señaló que considera estas reuniones en el contexto de los intentos de eludir la cuestión palestina y negar a los palestinos sus derechos.
El grupo advirtió contra la formación de una “alianza árabe-israelí de la OTAN que confrontaría a los países árabes con naciones y fuerzas opositoras a los planes hostiles que apuntan a los pueblos de la región y a sus intereses”, una referencia a Irán y a sus apoderados, incluidos Hamás, la Yihad Islámica Palestina, Hezbolá y los rebeldes Hutíes en Yemen.
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