Enlace Judío – El secretario de Estado norteamericano Antony Blinken conversó este martes con el canciller israelí Yair Lapid y con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, sobre la actual tensión que se vive alrededor del Monte del Templo en Jerusalén.

Lapid, de acuerdo con un comunicado publicado por su oficina, actualizó a Blinken sobre los esfuerzos de Israel para permitir la libertad de culto a los devotos judíos, musulmanes y cristianos en Jerusalén.

En el marco de este diálogo, ambos abordaron la importancia de Pésaj, la Pascua cristiana y el mes musulmán del Ramadán.

“Enfaticé el esfuerzo israelí considerado y responsable frente a los disturbios de cientos de extremistas musulmanes en el Monte del Templo y los vacíos de información y la información falsa, que son difundidos por extremistas, que incitan al fuego y la violencia en lugar de restaurar la calma”, continúo.

Lapid concluyó: “Le dije al secretario de Estado que Israel no estará dispuesto a aceptar llamadas de apoyo a la violencia y subrayé la necesidad de apoyo internacional para el regreso de la paz a Jerusalén“.

De acuerdo con la agencia palestina de noticias Wafa, Abbas dio un énfasis en hablar de lo que llamó “los asaltos” de los “colonos israelíes extremistas” y las “fuerzas de ocupación israelíes” en el Monte del Templo, en lo que considera negativo para el statu quo del sitio sagrado.

Abbas remarcó la importancia de crear un horizonte político que lleve a una adhesión a los acuerdos pactados entre israelíes y palestinos, a detener acciones unilaterales y a poner fin a la “ocupación israelí” que permita el establecimiento de un Estado de Palestina con Jerusalén Este como su capital.

También advirtió que si continúan los “ataque brutales” de Israel en contra de palestinos, esto tendrá consecuencias terribles.

La tensión actual en Jerusalén se ha presentado después de una serie de mortales atentados perpetrados por palestinos que han dejado 14 muertos en Israel, que también ha impulsado múltiples operativos contraterroristas israelíes en Judea y Samaria (Cisjordania).

El viernes por la mañana se arrestó a casi 500 manifestantes y más de 150 personas resultaron heridas en enfrentamientos en el Monte del Templo y sus alrededores, luego de que los palestinos arrojaran piedras y se enfrentaran con la policía israelí, que ingresó a la mezquita para enfrentarlos.

El comentario de Lapid sobre el “apoyo a la violencia” se dio en el marco del abierto elogio que ayer hizo el primer ministro de Jordania, Bisher Al-Khasawneh, a los alborotadores palestinos que se han involucrado en actos de violencia en el Monte del Templo.

Los comentarios de Al-Khasawneh también fueron condenados por el primer ministro israelí Naftali Bennett.

El mandatario se pronunció en contra de aquellos que “culpan a Israel de la violencia contra nosotros, que alientan a lanzar piedras contra los ciudadanos del Estado de Israel”.

“Esto es inaceptable. Es un premio para los incitadores, el principal de los cuales es Hamás, que intenta desatar la violencia en Jerusalén“, declaró Bennett.

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