Enlace Judío México e Israel- El domingo 8 de mayo en la impresionante sede el Instituto Cultural México-Israel, A.C., hoy día un estético y formativo museo –reflejo de la cultura judeo-mexicana– bajo la dirección de doña Jenny Serur y de Nina S. de Sackal, se presentó, tras la forzada tregua a razón de la pandemia, Las botas de Zicia, sobre Zicia Schwaycer, novela atractiva por su contexto, la época de la Shoá.

Zicia, descendiente de joyeros, desde pequeño en el Jeider –en la escuela donde los pequeños judíos aprenden las primeras letras del alfabeto hebreo– se aislaba del mundo de realidad, mientras se enfrascaba en el mundo enriquecedor del arte.

Artista fue, quien, gracias a unas botas, salvó su vida, al ser enviado castigado a Siberia, donde sobrevive gracias al paquete de cigarrillos que cambiaba por un pan…

…Y de ahí escapa a Uzbequistan donde casa con Leye Wolojviansky, con quien procrea a Bela. Transcribimos: “En Uzbekistan vivimos momentos no tan buenos, al parecer la suerte, siempre estuvo conmigo y con la familia de mi esposa”.

A Zicia, gracias a sus dotes artísticas, le toca por destino ayudar a quienes deseaban salir sin perjuicio alguno. Falsificó el documento que salvó a los deseosos de buscar otro derrotero, asimismo, a raíz de la prohibición de sacar oro, cambio remaches simples de petacas, o bien ahuecó muelas y sustituyó la dentina por oro…

Zicia vivió muchos años, casi una centena

La portada del libro Las botas de Zicia  –de gran impacto, realizada magistralmente por Ivonne Podoswa: las  botas, digamos “traqueteadas” de Zicia, nos recuerdan la inverosímil cantidad de botas que los nazis aglomeraron en los campos –símbolo de sus dueños a quienes, prematuramente les fue robada su existencia y su razón de vivir…

Federico Corral Vallejo, editor de Tintanueva Ediciones –con 25 años en el mundo editorial—comenta acerca de Las botas de Zicia: “Estamos frente a un aporte a la historia universal del mundo de los judíos, con sus penas y alegrías…esta novela viene a sumar el milagro de la vida…”

Corral Vallejo, el moderador del magno evento, habló largo y tendido sobre los ponentes de lujo de aquella mañana: Orli Guzik, poeta ganadora del premio de Poesía Gilberto Owen, además de excelente escritora; Herlinda Dabbah, editora con luz propia y siempre magnánima, y Vivianne Thirion, narradora con gran experiencia y prestigio.

En síntesis Corral Vallejo  alabó el talento  poético incluso cuando narran, de Dabbah y Rubinstein. Rememoró el libro sobre judeo-conversos de la ciudad de México, libro apasionante de notable éxito, de Becky. Recordó Entre la piel de una manzana y Caballero de polvosa azul/ El vientre de Pandora, libro bifronte acerca de lo femenino/ masculino; de Bella. Comentó su memoria y su deseo de “cavar y excavar” en pos de información fidedigna que la llevó, incluso, a encontrar familiares; de Vivianne comentó sus años entregados a llevar la palabra a todos por igual.

La Dra. Dabbah, quien analizó el libro per se, observó la portada y sus diferentes elementos, además de las botas a punto de sucumbir, el amenazante alambrado, además de la irónica y engañosa leyenda de “Arbeit macht frei”  –“”El trabajo libera”. Luego, comentó en breve su experiencia durante el evento: “ Becky, te felicito por el evento. Me gustó mucho y lo disfruté. Me encantó ver a tanta gente interesada; los temas que se trataron y todos en la mesa estuvieron geniales”·.

Por su parte Vivianne Thirion escribió: “Felicito a Becky; fue un lindo evento, afectuoso y enriquecedor. Me cayó muy bien Bella, que resultó amiga de mi marido, Johny Laboriel…”.

Irma Calvo –notable escritora–una de las asistentes comentó a su vez: “Día completo: presentación del libro de mi querida Becky Rubinstein en el centro de la CDMX, seguido de visitar al Instituto Cultural México-Israel, y comida deliciosa en la antigua casa de los Condes de Miravalle, la cual aloja al Azul Histórico. Tamalito de chocolate de postre, any one vale la pena.”

Judy Goldman, escritora y traductora comentó: “La pasé muy bien. Me encantó ver que el lugar se llenó y hasta hubo gente de pie”.

Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío