Enlace Judío – Las Fuerzas de Defensa de Israel se están preparando para el doble de violencia dentro de las ciudades árabes israelíes que la vista durante la confrontación militar del año pasado en la Franja de Gaza en caso de un nuevo conflicto, informó The Jerusalem Post.
Durante los 11 días de combates del año pasado, hubo fuertes disturbios en esas áreas, así como en ciudades mixtas árabe-israelíes como Lod y Yafo. Dos personas murieron y varios civiles resultaron heridos.
Como parte de un ejercicio en curso de las FDI, el ejército simulará escenarios donde hay disturbios aún más intensos, dos veces el nivel de violencia visto el año pasado.
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El ejército quiere poder enviar tropas antes de que estalle la violencia y no en respuesta a la violencia, y trabajará para mantener abiertas las carreteras en áreas del Néguev y en el área de Wadi Ara en el norte de Israel.
Además, con las tensiones altas en Judea y Samaria (Cisjordania) y Jerusalén, el ejército israelí continúa considerando su represión contra el terrorismo en los seis frentes, incluso dentro del país, como su principal prioridad a pesar de estar en medio del ejercicio más grande de su historia.
Israel ha estado llevando a cabo una amplia operación contraterrorista durante los últimos dos meses en un intento de evitar nuevos ataques contra ciudadanos israelíes después de que una serie de atentados cobrara la vida de 19 personas.
Durante una visita a la Brigada Efraim en Judea y Samaria el martes por la mañana, el primer ministro Naftali Bennett dijo que las FDI tienen una directiva clara para erradicar a los terroristas.
“La directiva es clara”, dijo Bennett, “las FDI deben atacar a los terroristas dondequiera que estén, con cualquier tipo de arma. Los que levantan la mano contra un ciudadano israelí o un soldado de las FDI, su sangre está en sus propias cabezas”.
El ejército cree que la incitación religiosa en torno al Monte del Templo y motivos personales están impulsando a los palestinos a atacar a los israelíes y, aunque Hamás no está detrás de la ola actual de ataques llevados a cabo por lobos solitarios, el grupo se aprovecha del éxito de los terroristas.
Se cree que Hamás es responsable del 25% de la incitación, otro 25% del Movimiento Islámico, 10% de Hezbolá y el resto de bots originarios de Malasia e India.
“Nos enfrentamos a una ola de terrorismo basada en una serie de ataques que se aprovechan de la delicada situación en Jerusalén y el Monte del Templo, donde Israel mantiene la libertad de culto”, dijo el ministro de Defensa, Benny Gantz.
Al pedir a la comunidad internacional que condene la incitación, Gantz dijo que los ataques “están conectados entre sí, ya que se basan en la incitación que propagan las organizaciones terroristas en la región. Esta incitación no es suficientemente condenada por los líderes mundiales y regionales, quienes también deberían priorizar la estabilidad en la región”.
De cara al mes de Ramadán, las FDI aumentaron su recopilación de inteligencia y redadas en las que arrestaron a unos 900 palestinos para reducir el número de posibles ataques, algo que no logró del todo.
Desde el comienzo de la Operación Rompiendo la Ola, unos 300 palestinos han sido arrestados. Durante las redadas, las fuerzas de seguridad israelíes han abatido a cerca de 30 palestinos, ya sea mientras cometían ataques o durante enfrentamientos.
Con el fin de poner fin a la actual ola de violencia sin más ataques, las autoridades de seguridad israelíes han centrado su atención en el norte de Judea y Samaria y han aumentado la presencia de tropas en la barrera de seguridad donde existen brechas aprovechadas por los palestinos para cruzar a Israel.
Se espera que el despliegue de tropas, así como el llamado a las fuerzas de reserva, duren hasta el próximo año.
Las FDI creen que, a pesar de los discursos del líder de Hamás, Yayha Sinwar, en los que pedía ataques adicionales, la inteligencia muestra que el grupo no planeó ni apoyó a los terroristas que llevaron a cabo los ataques.
El ejército cree que Hamás todavía está disuadido y recuperándose de las afectaciones que sufrió en la Operación Guardián de los Muros y no quiere otra ronda de combates en la Franja de Gaza con las FDI.
Pero entienden que puede haber una línea roja para el grupo que podría llevarlos a disparar cohetes hacia Israel.
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