Enlace Judío – La derechista israelí y simpatizante del Likud Ilana Sporta Hania fue acusada este viernes de enviar cartas amenazadoras que contenían balas al primer ministro Naftali Bennett y su familia, informó The Times of Israel.
Fue acusada formalmente ante un tribunal de los delitos de extorsión y posesión ilegal de un arma de fuego.
Según la acusación presentada en el Tribunal de Magistrados de Petah Tikva, Hania, una enfermera jubilada de Ashkelón de 65 años, envió 2 cartas con balas dirigidas a Bennett, su esposa y su hijo adolescente, amenazando su seguridad si el primer ministro no renunciaba.
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La primera carta, recibida el 25 de abril, decía: “Esta es la bala que golpeará y neutralizará a tu impostora Gilat, o a ti impostor Naftali Bennett. Le aconsejo que renuncie.
La carta estaba dirigida a Bennett y su esposa, Gilat, y fue entregada, con una bala, en un edificio adyacente a la casa familiar donde se encuentra la oficina de Gilat.
Dos días después, una carta dirigida directamente a Yoni Bennett, el hijo de 15 años de la pareja, también con una bala, fue enviada a la casa familiar en Ra’anana.
“Esta es la bala que golpeará su vientre blando Naftali Bennett y golpeará directamente a Yoni Bennett si no renuncia”, advirtió la carta.
La acusación decía que ambas cartas se prepararon del 3 al 11 de abril en el negocio de Ashkelón de Hania.
Hania niega los cargos.
La fiscalía solicitó que la mantuvieran bajo custodia hasta el final del proceso judicial en su contra, diciendo que seguía siendo una amenaza.
“A la luz de la seriedad, la naturaleza de sus acciones y el fervor político-ideológico por el que se llevaron a cabo, existe una base razonable para temer que ella pondrá en peligro la seguridad del público, del primer ministro y de quienes lo rodean”, expuso la petición de la fiscalía.
Según la investigación, Hania trató de obtener la ayuda de otros activistas políticos, sin su conocimiento, principalmente para obtener la dirección del lugar de trabajo de Gilat Bennett, la esposa del primer ministro. Finalmente, la policía concluyó que Hania era la única responsable de las amenazas.
Si bien los laboratorios han encontrado coincidencias entre la letra de Hania y las cartas amenazantes, la policía aún no sabe de dónde sacó las balas.
Los analistas descubrieron que Hania había enviado previamente una carta amenazante al entonces fiscal general Avijai Mandelblit por su decisión de presentar cargos contra Benjamín Netanyahu, el primer ministro en ese momento.
Una fuente en la investigación le dijo a la cadena Kan que si bien Hania cometió errores, también “tomó precauciones de las que los criminales sofisticados no se avergonzarían”.
La semana pasada surgieron detalles de la historia de activismo de Hania en apoyo del Likud y Netanyahu y contra el gobierno actual. Ha sido investigada en el pasado por amenazar a políticos con los que no está de acuerdo. En septiembre, se filmó a Hania pidiendo al diputado Benny Begin, un exmiembro del Likud, que se ahogara en el océano.
La semana pasada, la policía le dijo al tribunal que en las redes sociales, Hania había llamado al primer ministro “asesino”, “traidor” y “estafador”.
En su página de Facebook, Hania llamó a Bennett y al ministro de Justicia, Gideon Sa’ar, “traidores con esteroides” y pidió que arrestaran a Bennett, además de decir que el gobierno era ilegítimo y que la fiscalía estatal era una organización criminal.
Sugirió que el Yair Lapid, “registra más millas que una caja negra, pero ¿cuándo quedará solo la caja negra?”. Hania también escribió que el ministro de Seguridad Pública, Omer Barlev, debería “beber agua del Kishon”, el río tóxico que enfermó a los soldados de las FDI. También subió una publicación que decía que el ministro de Transporte, Merav Michaeli, usaba botas como las que “los nazis usaban en los campos de concentración”.
Netanyahu ha condenado las amenazas de Hania. En una publicación en su canal en la aplicación Telegram, el líder de la oposición se pronunció en contra de “todo tipo de violencia contra el primer ministro o cualquier otra persona”, y agregó que si se prueba que Hania es culpable, sería expulsada del Likud.
La policía ha investigado varias amenazas contra el primer ministro en el pasado, generalmente realizadas a través de las redes sociales. A raíz de las cartas, reforzaron la seguridad en torno al primer ministro y su familia.
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