Enlace Judío- Altas dosis de óxido nítrico inhalado (iNO) podrían usarse para tratar a mujeres embarazadas hospitalizadas con neumonía grave por COVID-19, según reveló un nuevo estudio, informó The Jerusalem Post.
El estudio, publicado en la revista Obstetrics & Gynecology, encontró que si un paciente está muy monitoreado durante el tratamiento, el iNO es un tratamiento efectivo para destetar a las mujeres embarazadas del oxígeno suplementario más rápido y, por lo tanto, reducir la duración de su estadía en el hospital.
Esto, a su vez, puede despejar las camas más rápido. Algo importante en Israel, ya que se enfrenta a la sexta ola de la pandemia y las camas de los hospitales se llenan rápidamente.
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También reduce significativamente el alto riesgo que corren las mujeres embarazadas, que tienen cuatro veces más probabilidades de morir por coronavirus que las no embarazadas, según el autor principal Carlo Valsecchi, MD. “También enfrentan un mayor riesgo de complicaciones obstétricas como preeclampsia, parto prematuro y muerte fetal”, dijo.
Los números
De las 71 pacientes embarazadas monitoreadas entre marzo de 2020 y diciembre de 2021, unas 51 se trataron solo con el estándar de atención (suplemento de oxígeno, etc.). Por otro lado, 20 fueron tratadas con el estándar de atención más sesiones de 30 minutos dos veces al día de ONi.
Según los investigadores que realizaron el estudio en cuatro hospitales de Boston y dirigidos por el Hospital General de Massachusetts, el tratamiento con iNO hace que los pacientes salgan más rápido sin causar efectos secundarios.
Los pacientes que recibieron iNO necesitaron aproximadamente 63 por ciento menos de suplementos de oxígeno. Asimismo, tuvieron una estadía aproximadamente 60 por ciento más corta en la Unidad de Cuidados Intensivos. Entretanto, tuvieron una hospitalización 64 por ciento más corta en total.
“Hasta la fecha, se han probado muy pocos tratamientos respiratorios para complementar la oxigenación suplementaria en pacientes embarazadas con COVID-19″, según el autor principal, Lorenzo Berra.
Las investigaciones de los cuatro centros “coincidieron en que la administración de dosis altas de óxido nítrico a través de una máscara ajustada tiene un enorme potencial como nueva estrategia terapéutica para pacientes embarazadas con COVID-19”, dijo.
Los análisis de datos dentro del estudio “tomaron en cuenta la edad, el índice de masa corporal, la edad gestacional. Así como el uso de esteroides, remdesivir y el centro de estudio”.
Tratamiento con iNO
El óxido nítrico se aprobó inicialmente por la FDA en 1999 como un tratamiento de gas terapéutico para “recién nacidos ventilados mecánicamente con insuficiencia respiratoria hipóxica“, según el General de Massachusetts.
“Sobre todo, nuestro estudio respalda la seguridad de las dosis altas de óxido nítrico en la población embarazada, y esperamos que más médicos consideren incorporarlo en regímenes de tratamiento cuidadosamente monitoreados”, dijo Berra.
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