Enlace Judío- Un evento que dejará profunda huella. En su visita a Israel, el presidente Joe Biden resolvió dedicar algunos minutos a una visita a Yad Vashem, el memorioso lugar del Holocausto.
Rodeado por el presidente israelí Herzog, el primer ministro Yair Lapid y el ministro de defensa Beni Gantz, el mandatario norteamericano escuchó un coro compuesto por niños que, en breve canción, recordaron huellas de los trágicos eventos que ocurrieron en el curso de la II Guerra.
Emocionado por estas breves melodías, Biden depositó un ramo de flores. Y cuando ya se disponía a abandonar el recinto prefirió acercarse a dos señoras sobrevivientes de la matanza nazi, y entonces ocurrió algo inesperado.
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Una plática con ellas que debió durar apenas un minuto se prolongó veinte cuando el mandatario norteamericano se absorbió con las palabras de ambas mujeres.
El presidente Herzog debió entonces intervenir con fineza en la plática con el fin de abreviar el diálogo. Sin embargo, Biden persistió en él durante largos minutos, y sólo después abandonó el reciento de Yad Vashem acompañado por Herzog y Biden y una amplia comitiva tanto de diplomáticos como de agentes de seguridad.
Cabe agregar que Beni Gantz tuvo amplia presencia en esta ceremonia a solicitud del primer ministro Lapid.
Un gesto singular que acaso pone al desnudo la brújula de las negociaciones que hoy se llevan a cabo con el fin de concertar en noviembre el próximo gobierno de coalición.
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