(JTA) — Durante el primer día de la visita de Joe Biden a Israel, el rumor sobre los apretones de manos fue que, a pesar de un plan relacionado con la pandemia, él aún así los estaba haciendo.

Eso cambió el jueves por la tarde. Fue entonces cuando Yuval Dayan, una estrella del pop israelí, dejó al presidente de los Estados Unidos con la mano en el aire.

Dayan y otro cantante llamado Ran Danker acababan de interpretar la canción clásica Lu Yehi o Let it Be, en una ceremonia que marcó la recepción de Biden del más alto honor civil de Israel.

Posteriormente, Biden y el presidente israelí, Yitzhak Herzog, se acercaron a los artistas para agradecerles.

Danker tomó la mano extendida de Biden, pero Dayan se inclinó en su lugar, juntó las manos y sonrió.

Lo que Biden no sabía era que Dayan se comprometió a abstenerse de tocar a miembros del sexo opuesto.

Es famosa en Israel en parte por volverse más observante religiosamente, adoptando el principio del Shomer Neguiá, una prohibición de tocar a personas del sexo opuesto que algunos judíos ortodoxos creen que es obligatoria, además de no actuar en Shabat o en las festividades judías.

La prohibición tiene sus raíces en la idea de que cualquier toque puede conducir a una conducta sexual inapropiada.

La negativa a estrechar la mano de las mujeres de un candidato ortodoxo al Parlamento Europeo en 2014 provocó una crisis política menor.

Mientras tanto, cuando Tzipi Hotovely, una legisladora ortodoxa, obtuvo autoridad sobre el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel en 2015, dijo que le daría la mano a los hombres que le ofrecieran la suya a pesar de que normalmente se abstenía de tocarla.

Señaló que la ley judía tradicional hace concesiones para honrar a los dignatarios.

“No es un problema en absoluto”, dijo Hotovely a los medios israelíes en ese momento. “Cuando alguien se reúne con representantes extranjeros, la Halajá [ley] judía reconoce el respeto, la etiqueta y la cortesía”.

El incidente con Biden se volvió viral en Israel el jueves.

Dayan, que saltó a la fama como concursante de la versión israelí de La Voz, dijo que había tratado de evitar parecer menospreciado a Biden y había comunicado sus necesidades al personal de Herzog.

“Me aseguré de notificar a todos en la oficina del presidente que soy Shomeret Neguiá”, dijo, según los medios israelíes. “Dios no quiera que no haya sido mi intención ofender”.

De la traducción (c)Enlace Judío México
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