Enlace Judío.- El 30 de julio de 1980, la Knéset de Israel aprobó la Ley Básica: Jerusalén, reconociendo la soberanía del país sobre Jerusalén oriental, que, hasta la Guerra de los Seis Días de 1967, había estado bajo control jordano, publicó The Jerusalem Post.

La ley estableció a Jerusalén como la capital unida de Israel, así como la sede del gobierno.

UNA bandera ISRAELÍ con un Magen David encima aparece en el primer plano de la Cúpula de la Roca en la Ciudad Vieja de Jerusalén. (Crédito de la foto: AMMAR AWAD/REUTERS)

La nueva ley determinó que el presidente, el primer ministro, la Knéset y la Corte Suprema serían reubicados de Tel Aviv a Jerusalén.

 

Estado de los lugares sagrados
Además, la nueva ley hizo que los lugares sagrados, muchos de los cuales son sagrados para múltiples religiones, fueran accesibles para personas de todas las religiones.

Finalmente, la ley establecía dar prioridad a Jerusalén en ciertos asuntos, como el desarrollo económico, debido a su nuevo estatus como capital de Israel.

Fieles musulmanes palestinos asisten a las oraciones de los viernes de Ramadán cerca de la mezquita de la Cúpula de la Roca en el recinto de la mezquita de al-Aqsa en la Ciudad Vieja de Jerusalen el 8 de abril de 2022. (Foto de AHMAD GHARABLI / AFP) (archivo

Controversia
La Ley de Jerusalén ha sido rechazada por las Naciones Unidas y numerosos países como ilegal, y muchos críticos la ven como un medio para anexar unilateralmente el este de Jerusalén.

En su discurso en la Asamblea General de la ONU, previo a la vergonzosa resolución aprobada ese día, el 21 de diciembre, Nikki Haley, exembajadora de Estados Unidos en la ONU, dijo:

 

“Para su vergüenza, Naciones Unidas ha sido durante mucho tiempo un lugar hostil para el Estado de Israel. Tanto el Secretario General actual como los anteriores han objetado el enfoque desproporcionado de las Naciones Unidas hacia Israel. Es un error que socava la credibilidad de esta institución, y que a su vez es perjudicial para todo el mundo.

A menudo me he preguntado por qué, ante tanta hostilidad, Israel ha elegido permanecer como miembro de esta organización. Y luego recuerdo que Israel ha elegido permanecer en esta institución porque es importante defenderse. Israel debe defender su propia supervivencia como nación; pero también defiende los ideales de libertad y dignidad humana que se supone que representan las Naciones Unidas.

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