Enlace Judío – El primer ministro de Israel, Yair Lapid denunció hoy la violencia contra las mujeres como una “mancha en el país que no puede continuar”, informó The Times of Israel.

“La semana pasada, una mujer fue asesinada por su marido, de nuevo, y una hija fue asesinada por su padre”, dijo Lapid durante la reunión del gabinete, refiriéndose al asesinato de Rabab Abu Siyam, de 30 años, presuntamente a manos de su marido, y la muerte de Liana Savenok, de 21 años, a manos de su padre.

“Se revelaron otros detalles terribles en el caso de la violación de una guardia de prisión. Se descubrió correspondencia humillante adicional de jugadores de fútbol”, agregó el mandatario en referencia a una mujer soldado, que afirmó haber sido violada repetidamente por un prisionero de seguridad palestino mientras servía en la prisión de Gilboa, así como a mensajes de texto recientemente publicados de dos jugadores de futbol israelíes que fueron sospechosos de violación en 2020, pero cuyo caso fue cerrado y ellos continuaron sus carreras.

“Aunque todos estos casos difieren entre sí, tienen un denominador común: la terrible violencia dirigida contra las mujeres. Es nuestra responsabilidad como sociedad y nuestra obligación como gobierno erradicar este fenómeno”, apuntó Lapid.

Dijo que este sábado conversó con el ministro de Seguridad Pública, Omer Barlev, y con la comisaria del Servicio Penitenciario de Israel, Katy Perry, sobre la denuncia de violación de una exsoldado por un preso de seguridad palestino, tras haber sido presuntamente “prostituida” con el conocimiento de sus comandantes.

“Me presentaron las medidas que ha tomado el Servicio Penitenciario de Israel para garantizar que un incidente así no vuelva a ocurrir”, aseguró.

“El incidente, que está siendo revisado, y que tuvo lugar durante el mandato del gobierno anterior, está bajo una orden de mordaza, pero debe ser y será investigado. Nos aseguraremos de que la soldado reciba asistencia. Trataremos al acusado con todo el peso de la ley”, subrayó Lapid.

La semana pasada, una exsoldado de las FDI declaró que fue víctima de violación y abuso sexual en repetidas ocasiones por un preso de seguridad palestino mientras servía en la prisión de Gilboa. El caso fue destapado el año pasado tras la fuga de los prisioneros palestinos de la prisión.

Identificada bajo el seudónimo de “Hila”, la exsoldado dijo que “se convirtió en una prisionera, la esclava sexual privada” de un “peligroso terrorista”.

Hace varios años surgieron informes sobre acoso y agresiones sexuales contra mujeres soldado de las FDI en prisiones israelíes. Los reportes fueron abandonados hasta el año pasado, cuando se reabrió una investigación a raíz de nuevas pruebas.

La semana pasada, el sitio de noticias Ynet informó que Mahmoud Atallah un preso palestino condenado por terrorismo, estaba siendo investigado por la policía por agresión sexual mientras estaba entre rejas.

Atallah ha estado en confinamiento solitario desde 2018, por un escándalo en el que mujeres guardias fueron presuntamente prostituidas por un oficial de inteligencia para reclusos palestinos.

Se espera que la Subcomisión de Asuntos Exteriores y Defensa de la Knéset escuche a los miembros del Servicio Penitenciario, el Shin Bet y los fiscales durante una sesión de emergencia sobre el escándalo a finales de esta semana.

Lapid anunció que celebrará un debate especial sobre la violencia contra las mujeres por petición de la ministra de Transporte Merav Mijaeli.

“Este gobierno ha hecho más que ningún otro en la cuestión de la violencia contra las mujeres. Se han asignado más de 200 millones de NIS para el programa nacional de prevención y tratamiento de violencia familiar”, dijo Lapid.

“Por supuesto, esto está lejos de ser suficiente. Debemos hacer más y haremos más. En este país, las mujeres y las niñas deben sentirse seguras en casa y cuando salen”, enfatizó.

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