Enlace Judío – Hay momentos en donde todo se cae; la fortaleza que creíamos haber construido resultó ser un castillo de naipes, y a veces pareciera que la debacle arrasará con lo poquito que nos queda: la gente se irá, expondrá nuestras debilidades y seremos incapaces de aguantar nuestra soledad. Sin embargo, la tempestad se aparece y resulta no ser tan destructiva como creíamos que sería, así como llega, se va y nosotros resultamos ser más fuertes de lo que pensábamos. Shiva Baby de Emma Seligman es un elogio a nuestra habilidad de sobrellevar situaciones incomodas, frente a un posible rechazo social.

Danielle la protagonista de la película se encuentra en una shive (funeral judío) donde por azares oscuros del destino, frente a toda su familia, se encuentra con el hombre a quien ha estado dando sexo por dinero, a la par de su exnovia quien le tiene un gran rencor y resentimiento. Entre sus padres que la tratan como una niña y exhiben frente al público sus deficiencias, las señoras inquisitivas que preguntan si tiene novio y el no poder explicar realmente de que es su programa universitario, Danielle se siente muy acorralada y en un momento de mucha vulnerabilidad, angustia y ansiedad.

Frente a sus propios ojos pareciera que es la única que ha fallado en todo, su exnovia y el hombre con el que tiene relaciones esporádicas se dedican a hacérselo sentir, con ellos en la escena se siente desnuda y desprotegida. Gran parte de la reunión trata de huir y buscar lugares donde refugiarse, pero después, frente a la gente que la agrede, descubre que ella también puede desnudar; empieza a encontrar el valor interno para hacerle frente a las cosas que teme y recuperar un lugar donde se sienta con mayor seguridad.

En el contexto de la película también existen las cosas que ella no ve, pero que son evidentes. Todos se sienten vulnerables, nadie es perfecto: la madre tiene una neurosis con su imagen y la relación que mantiene con la misma Danielle, Maya (la exnovia) aunque se presenta como una mujer sumamente exitosa y cuasi-perfecta para los estándares comunitarios, en realidad en el tema amoroso se siente débil y la presencia de Danielle también le causa momentos de vulnerabilidad a ella, esa es la verdadera razón por la que la ataca. En cuanto a Max aunque pareciera llevar la sartén por el mango de la situación Danielle también representa una amenaza para él, no sólo en los términos más evidentes, el quedar expuesto públicamente, también en lo emocional en lo que proyecta en esos momentos de intimidad que comparte con ella y ahora en la escena pública se distorsionan. En el fondo todos los personajes giran al rededor de lo que luego Danielle pone en palabras cuando Maya le pregunta ¿por qué lo hace? “Quería sentirme apreciada y querida.”

Estos momentos con los que la escritora y directora juega dentro del guion son divertidos, bellos y complejos, son una puerta para reflexionar sobre la vulnerabilidad que nos rodea a todos nosotros y las distintas formas que tenemos de responder a ella; la manera en que la presión social se construye, y la forma en que el ámbito familiar influye sobre nosotros. El tono de la película es cómico, tiene momentos que producen ansiedad y angustia, porque nos identificamos con lo que la protagonista vive, pero al final, hay una aceptación a la vida que Danielle lleva y una crítica ligera a la banalidad e hipocresía de la gente que la rodea. Al pasar la tarde, la shive acaba y cada quien regresa a su vida. Lo que se asomaba como una posible tragedia, fue un día más; de esa forma la película cierra en esta cotidianidad donde las cosas se aceptan y no se muestran como graves.

El trabajo sonoro y la cinematografía son bastante buenos. No hay música como tal, el único sonido que acompaña a las voces o los llantos de un bebé en toda la película es un instrumento de cuerdas que con pocas notas nos guía a través de los sentimientos de la protagonista, los momentos de suspenso y los eventos de la velada. Gracias a la pandemia, la película fue presentada en línea en el festival de South by West de Texas en el 2020 y en cines en abril del 2021 durante el Festival de Toronto. Es el debut de Emma Seligman como guionista y directora, fue muy bien recibida por la crítica.

La película está disponible en el siguiente link