Juntos venceremos
viernes 26 de julio de 2024

¿Qué nos enseña el ‘pánico de 1938’ sobre las libertades de prensa occidentales hoy?

¿Cómo modelar, para efectos de análisis, a los grandes medios operando en el Occidente democrático?

Dicen unos: con el modelo de libre mercado. La mayoría concederá que no empata perfectamente. Reconocen defectos, sesgos, e intereses. Pero aun así consideran que las varias compañías compiten genuinamente, actuando con independencia unas de otras, y autónomas del gobierno.

Quienes lo ven así opinan que las noticias son razonablemente confiables, pues el incentivo de competidores libres e independientes es exhibirse unos a otros si caen en irrelevancias, exageraciones, errores, y mentiras, de tal suerte que las narrativas falsas tendrán una estabilidad pobre.

Luego hay otros—en números crecientes a la postre de Donald Trump y la pandemia de COVID—quejándose de fake news, censura, y desinformación. Posverdad, lo llaman. Ven con harta desconfianza las narrativas mainstream de los grandes medios, a su juicio sometidos, éstos, al poder y/o a las ideologías.

Algunos creen intuir, inclusive, la existencia de un añejo monopolio clandestino gobernando a los grandes noticieros y administrando, por su conducto, nuestra realidad posverídica.

¿Puede investigarse esto? Claro. Cualquier cosa puede investigarse—siempre y cuando no rebasemos las fronteras del pensamiento crítico-científico—.

Como explicara alguna vez aquel gran maestro de pensamiento crítico, el filósofo de ciencia Karl Popper, para tener una hipótesis genuina deberás poder decir qué evidencia—de hallarse—socavaría su validez. Si no puedes o no quieres hacer esto tu hipótesis será más bien tu fe y quedará fuera del pensamiento crítico-científico.

Si, por ejemplo, sostengo que ninguna presentación de datos puede—ni siquiera en principio—jamás ser suficiente para rechazar la hipótesis de libre mercado, mi fervor es religioso. Para hacer ciencia, debo abrirme a las posibilidades y humillarme ante la evidencia, y eso me requiere estipular las condiciones bajo las cuales comenzaría a dudar de mi hipótesis.

Entonces asentaré en el extremo, para mayor claridad conceptual, la evidencia que pudiera, no ya socavar, sino destruir la hipótesis de libre mercado.

Aquí la tienes: Si puedes documentar que todos los grandes medios en Occidente, sobre algún tema de enorme relevancia e importancia, han estado diciendo la misma mentira, y por décadas, entonces la hipótesis de libre mercado deberá ser rechazada. Porque semejante comportamiento tan extremo, consciente, longitudinalmente estable, y universalmente mentiroso es imposible excepto con un cartel que lo abarca todo. Y un cartel que lo abarca todo es justo lo contrario de un mercado libre de noticias.

Pero toda vez que no hayamos documentado hechos con semejante estructura extrema, podemos modelar el mercado de noticias como gozando de una cierta libertad.

Consideremos, entonces, el ‘pánico de 1938’, cuando la famosa emisión de Orson Welles en CBS, pues lo consideran el caso más extremo de noticia falsa y peligrosa para los ciudadanos democráticos de Occidente. Será útil considerar, en el continuo de posibles modelos para el ámbito noticiero—yendo desde el mercado libre prístino, en un polo, hasta el monopolio oculto, en el otro—, con cuál nos parece más consistente tan singular evento.

¡Ahí vienen los marcianos!

¿Te acuerdas de aquel día? Te habrán contado, quizás. Es uno de esos: un episodio histórico tremendo. El 30 de octubre de 1938, nos dicen, se atropellaron en pánico, de costa a costa, masas gigantes de estadounidenses buscando escapar a los invasores marcianos que según creían (y estaban muy seguros) andaban quemando a la gente desde sus naves con poderosos láseres.

¿Te dio risa? No era broma. En las escuelas de comunicación, donde los trabajadores de medios son profesionalizados, se discute mucho este evento. Aparece en todos los libros de texto de comunicación. Y debe enseñarnos algo, se supone, sobre el impacto en la humanidad de los medios de masas.

¿Por qué? Porque dicha histeria nacional la causó, nos dicen, una radionovela—una dramatización de La Guerra de los Mundos.

La Guerra de los Mundos, de finales del siglo 19, es novela de H.G. Wells, pionero de la ciencia ficción. Narra un atentado genocida marciano contra la humanidad frenado apenas en el último instante cuando los invasores, con sistemas inmunes alienígenas, son ultimados por un patógeno terrestre (para ellos) desconocido.

Este regadero de sangre simple y sencillo fue benemérito de adeptos fieles y abundantes. Entre ellos, el polifacético actor, director, escritor, y productor Orson Welles (afamado por Citizen Kane). En 1938, Welles adaptó La Guerra de Los Mundos para radionovela de CBS, con los primeros platillos voladores tocando tierra en Nueva Jersey.

A Welles le sobraba estilo. La difusión arrancó con un boletín de prensa simulado que reportaba sobre el aterrizaje alienígena y que—detalle delicioso—interrumpía un programa de música simulado (giro: aviso de emergencia nacional). De ahí siguieron en metralla más boletines de prensa simulados, narrando durante cuarenta minutos cada nuevo golpe alienígena y los intentos fútiles de las autoridades por frenar la masacre.

El resto de la historia es famoso: los estadounidenses, tomándose en serio aquellos boletines—es decir, creyendo que oían noticias de verdad—, entraron en histeria por la presunta invasión alienígena. “ ‘Para la mañana siguiente,’ ” recordaba un documental de 2013 en PBS (estrenado para conmemorar el 75 aniversario del evento),

“‘la emisión y el pánico causado eran noticia de primera plana de costa a costa, con reportes de accidentes de tráfico, disturbios, hordas de gente apanicada en las calles, y todo por una radionovela.’ ”[1]

Mi propio padre no había nacido todavía cuando Orson Welles emitió aquel programa. Y sin embargo, como el resto del mundo, crecí escuchando de mis padres, de las personalidades en televisión, de mis maestros, de documentales y programas, y de los libros académicos e historias populares, sobre aquella vez cuando enormes masas de estadounidenses se dejaron timar por la invasión marciana de Welles y enloquecieron.

No es poca cosa. La historia de este engaño se transmite como un parteaguas de la historia occidental, como también se habla de Pearl Harbor y del hundimiento del Titanic: un impacto colosal de huella profunda sobre aquella generación, sus hijos, y sus nietos.

Y el recuerdo de esto, si bien un drama histórico, es algo más: es lección moral y advertencia de ciertas conductas humanas.

En México sacudimos la cabeza. ¿Pero cómo pudieron correr a salvarse porque hubieran aterrizado los marcianos? Nos repara un poco la autoestima: cierto, los gringos son ricos, tecnológicamente avanzados, y amos de todo; pero, híjole, vaya que son ingenuos.

Aunque si eres de Estados Unidos quizá veas en aquel momento histórico el verdadero problema: en esa generación, los estadounidenses se acostumbraban apenas a la radio.

Las tecnologías mediáticas, empero, habrán siempre de evolucionar adelante de nuestra adaptación, por lo cual aquí la moraleja cargada—y universalmente apreciada—es ésta: los medios de masas son poderosos. Los medios crean la realidad. Manejados con habilidad pueden empinar a una población al pánico. Dicha reflexión de 1938 la exigen tanto textos como profesores en las escuelas modernas de comunicación.

Pero—momento—. ¿De veras tanto apoya este caso la noción de que los medios crean nuestra realidad? Eso depende, me parece, de cómo respondamos la siguiente pregunta:

¿Qué tan importante fue el pánico?

Aquella frase tan famosamente optimista de Abraham Lincoln reza:

Puedes engañar a algunos todo el tiempo, y a todos, parte del tiempo, pero no puedes engañar a todos todo el tiempo.

Aplicándola aquí vemos que, aun en la versión más extrema, con el país entero entrando en pánico, eso duró un solo día—engañaron a todos, cierto, pero, como dice Lincoln, brevemente—.

Ninguna obligación tenemos, empero, de conceder la versión más extrema. ¿Cuánta gente realmente se apanicó? El aserto tradicional—de un pánico nacional—es una afirmación extraordinaria, y, como bien decimos, ‘las afirmaciones extraordinarias precisan evidencias extraordinarias.’

Estamos en derecho de preguntar: ¿Acaso realmente fueron engañados—así fuese por un día—? ¿Puede realmente un programa de radio apanicar a millones o siquiera a miles de estadounidenses y hacerlos correr a salvarse de invasores alienígenas? ¿De veras sucedió eso? ¿Dónde está la evidencia extraordinaria?

¡No existe!

O por lo menos eso afirman los historiadores Jefferson Pooley y Michael J. Socolow, cuyo artículo en Slate lleva por título: “El mito del pánico de La Guerra De Los Mundos: La famosa radionovela de Orson Welles de 1938 no causó una histeria nacional. ¿Por qué persiste la leyenda?” Este ensayo, de 2013, fue publicado para coincidir con el arriba mentado documental de PBS. Los historiadores acusaron a PBS de reciclar una historia tradicional pero enteramente falsa.

Me ha convencido la presentación de Pooley & Socolow. En lo sucesivo explico por qué.

Primero: La difusión de 1938 no pretendía ser real

Uno se lleva la impresión—es parte del mito popular—que Welles aventó su show sobre estadounidenses desprevenidos, todos ellos (por alguna razón inexplicable) en aquel momento sintonizando su estación. Y es común también pensar que Welles quería a todos creyendo que oían noticias de verdad.

Ambas ideas son falsas.

Welles no aventó su show sobre nadie. Su programa, Mercury Theatre on the Air, llevaba meses en el aire y se difundía siempre a la misma hora. Su versión de La Guerra de los Mundos, como otros shows, se había anunciado en cartelera, donde se ostentaba claramente cual obra de ficción: adaptación de la famosa novela de H.G. Wells. Una vez al aire, la introducción y la conclusión del programa nuevamente lo presentaron como ficción. Y lo mismo hicieron varios recordatorios durante el programa que interrumpieron la difusión para nuevamente ¡enfatizar el carácter ficticio del programa!

CBS y Orson Welles dejaron poco margen para tomarse literalmente aquel show.

Por demás, los radioescuchas de Mercury Theatre eran relativamente escasos. Según estadísticas compiladas la noche de la difusión de Welles, mismas que Pooley & Socolow han examinado, “98 por ciento de los encuestados estaban escuchando otra cosa, o escuchando nada, el 30 de octubre de 1938.”

Y sin embargo el documental estrenado por PBS en 2013 nos habla de “hordas de gente apanicada en las calles”—hordas—quienes, en su terror, perdieron todo control, causando “disturbios” en EEUU “de costa a costa,” incluyendo, según PBS, muchos “accidentes de tráfico.”

¿Ah sí? Pero entonces debió verse un brinco en las estadísticas de los hospitales. No se ve. Como explican Pooley & Socolow,

“investigadores [que] encuestaron a seis hospitales de Nueva York en las seis semanas después de la difusión [encontraron que] ‘ninguno de ellos tenía un solo registro de casos traídos específicamente a consecuencia del show.’ ”[2]

—Momento—. ¿Ningún caso? ¿Ni uno solo?

¿Y a nivel nacional? Cuando mucho, uno: el Washington Post “reportó que un radioescucha de Baltimore había muerto por ataque al corazón durante el show.” Pero esto también pudiera ser mentira; “desgraciadamente, nadie dio seguimiento a esta historia para confirmar o brindar detalles corroborativos.”[3]

¿Pero qué nadie en su momento retó las afirmaciones de los periódicos?

Sí. Por ejemplo, en los archivos del Washington Post Pooley & Socolow encontraron una carta de un lector indignado, publicada cuatro días después del ‘evento.’ Afirmaba no haber visto “ ‘cosa alguna aproximando la histeria de masas,’ ” y añadía: “ ‘en muchas tiendas había radios sonando, y sin embargo no observé nada del supuesto ‘terror de la gente.’ No hubo tal.’ ”[4]

Para las afirmaciones extraordinarias de una presunta histeria de masas en EEUU, luego entonces, falta evidencia extraordinaria. Falta evidencia, punto, extraña o llana. Ergo, concluyen Pooley & Socolow, no hubo tal pánico.

¿Y adivina quién coincide con ellos? Frank Stanton.

Cuando Welles hizo su show, Frank Stanton—quien luego sería director ejecutivo de todo CBS durante muchos años—era el encargado de medir la respuesta del auditorio. Su equipo llevó a cabo “dos mil quinientas entrevistas personales” al día siguiente de la famosa emisión de CBS. Tiempo después Stanton fue—él mismo—entrevistado en el período 1994-97 para un libro sobre su vida, y entonces reveló finalmente lo arrojado por aquellas investigaciones. Dijo:

“ ‘La investigación demostró que la mayoría lo vio como era. En primer lugar, la mayoría no escuchó [la emisión de 1938]. …Pero aquellos que sí lo escucharon lo vieron como una broma y lo aceptaron de esa manera.’ ”[5]

Según la persona mejor colocada para saberlo, no hubo pánico en masa.

¿Pero acaso esto socava realmente la noción de un gran poder mediático para crear realidades?

Irónicamente, no. Pues viene ahora un vuelco estilo M.C. Escher: si no hubo pánico en masa, entonces la mentira fue la afirmación de un pánico en masa.

Y esa mentira es bastante más grande.

No duró un día sino tres cuartos de siglo (el artículo desmitificador de Pooley & Socolow en Slate no llegó sino hasta 2013). Y no engañó a mucha gente—engañó a todos—. Pues todos—mexicanos, gringos, y el resto—hemos creído eso del pánico nacional durante décadas (la mayoría continúa creyéndolo). Más que una mentira noticiera (fake news) esto ha sido una mentira histórica. Un engaño espectacular.

El dictamen de Lincoln—tan moderado—parece ahora equivocado. Sí es posible engañar a todo mundo todo el tiempo.

¿Pero cómo pudo convertirse en ‘registro histórico’ esta afirmación sin base?

“La culpa es de los diarios estadounidenses,” escriben Pooley & Socolow. La gente confiaba en los periódicos y esos periódicos—todos, parece—‘reportaron’ un pánico en masa.

Dicha mentira periodística pudo haber sido muy inestable, explican los autores, pero pronto recibió el apoyo académico de Hadley Cantril de la Universidad de Princeton, cuyo trabajo de investigación sobre la emisión de CBS estableció al presunto pánico de masas en calidad de ‘evento histórico.’

Cantril se jactó de haber documentado un millón de almas apanicadas por la dramatización de Welles de La Guerra de los Mundos. Para obtener la cifra se apoyó en “un reporte sesgado compilado seis semanas después de la emisión”—es decir, seis semanas después de los encabezados en los diarios que hicieron a todo mundo creer en la existencia de un pánico—.

Dicho reporte, “elaborado por el American Institute of Public Opinion [AIPO],” utilizó una “base de datos seleccionados a modo” de “hogares sin teléfonos y en comunidades pequeñas,” es decir, gente pobremente representativa, sin experiencia testimonial de lo sucedido (o no sucedido) en las ciudades, y privada inclusive de buenos reportes de segunda mano.[6]

Y Cantril eligió interpretar como ‘apanicados’ a quienes dijesen haberse sentido ‘asustados’ o ‘afectados’ o ‘emocionados’ por el show de CBS.

Con semejante metodología puede ‘demostrarse’ un ‘pánico en masa’ luego de cualquier película de suspenso.

El celebrado volumen de Cantril, The Invasion from Mars: A Study in the Psychology of Panic (La Invasión de Marte: Un Estudio en la Psicología del Pánico, 1940), se convirtió en la voz acreditada para citar de ahí en adelante.

“El trabajo [de Cantril] validó la memoria popular del evento. Le dio credibilidad académica al pánico … Continúa siendo la única fuente con legitimidad académica que afirma un pánico importante. Sin esta validación, el mito probablemente no figuraría en los libros de texto de psicología y comunicación, como todavía figura hoy en día—no es mucho exagerar decir que todo alumno de bachillerato y universidad se lo encuentra tarde o temprano. … Aunque no haya uno escuchado jamás hablar de Cantril, el mito de La Guerra de los Mundos es sin lugar a duda su legado.”[7]

Ningún engaño masivo puede tener éxito sin la Ciencia

La centralidad de Cantril para con este engaño nos empina a considerar un punto interesante sobre el cuarto poder.

La prensa, dicen, es el cuarto poder, contrapeso de los otros tres: ejecutivo, legislativo, y judicial. Como dijo Thomas Carlyle en el siglo 19, cavilando sobre el alcance del cuarto poder: “la cosa es poseer una voz que otros escuchen.”[8]

Los científicos poseen dicha voz. Ellos crean nuestra realidad cuando aceptamos de los medios que ‘los científicos han dicho,’ o ‘demostrado,’ o ‘hallado’ alguna cosa y convertimos sus afirmaciones en el trasfondo para nuestra cosmovisión y discusiones democráticas. La afirmación de un consenso científico sobre la hipótesis del calentamiento global antropogénico (causado por humanos), por ejemplo, ha tenido efectos políticos y económicos profundos en todo el mundo.

En mi opinión, por tanto, la ciencia académica debe añadirse a la prensa en un cuarto poder extendido. Esto reconocerá la contribución especial que hace la investigación científica a nuestra democracia política. Pues la ciencia es la última línea de defensa de la democracia. Aun cuando la prensa falla, científicos medianamente libres, independientes, y competitivos podrán exhibir dichas fallas. Si no pueden, o no quieren, entonces un fraude mediático echará raíces ‘acreditadas,’ integrándose a nuestra comprensión de la historia.

Puede apreciarse dicha relación en el episodio de La Guerra de los Mundos. Si Hadley Cantril de Princeton no hubiera embadurnado falsamente de ‘ciencia’ las afirmaciones sobre un ‘pánico en masa’; o si otros académicos a la postre—en lugar de repetir las afirmaciones de Cantril—hubiesen hecho el trabajo que Pooley, Socolow, y otros finalmente han realizado; y si dicho trabajo apareciera en los libros de texto, la historia del ‘pánico en masa’ no habría sido creída durante tres cuartos de siglo. No estarían escuchando semejante historia los “alumno[s] de bachillerato y universidad” de profesores acreditados con textos igualmente acreditados.

Para que un engaño histórico masivo persista, luego entonces, el descalabro de los medios no basta; los académicos deberán asistir dicho descalabro o sucumbir ellos mismos al engaño. Este episodio por tanto nos enfrenta con preguntas incómodas sobre el mundo académico establecido—de menos en lo relativo a la disciplina de Cantril, la comunicación—.

¿Y si fuera yo quien te engaña?

Pudiera haberte cruzado la mente esta pregunta. ¿O quizá la historia revisionista de Pooley & Socolow me habría engañado y estaría yo cooperando inocentemente con su fraude? Es saludable interrogar. Lo exige, precisamente, el pensamiento crítico.

Lo más responsable sería examinar con cuidado todo argumento y evidencia de Pooley & Socolow. Pero eso toma tiempo. Tú estás en otras cosas. ¿Existe algún atajo? Pienso que sí.

Pooley & Socolow tienen rivales: historiadores afanados con el pasado como lo presentan ellos y no como lo describen Pooley & Socolow. Dicho interés contrario motiva a estos rivales, para bien de su carrera profesional, a buscar errores de argumentación, documentación, o ambos en el trabajo de Pooley & Socolow.

Demos entonces la bienvenida a Brad Schwartz, cuyo servició aquí será funcional y valioso.

Para su gusto, Pooley & Socolow “corrigen con enjundia excesiva la narrativa conocida y trillada.” Dicho sentir de Schwartz se apuntala de emociones fuertes, a juzgar por un libro entero donde—en respuesta explícita a la demostración de Pooley & Socolow—Schwartz trabaja en pos de rescatar lo posible del relato conocido del pánico en masa: Emisión de Histeria: La Guerra de los Mundos de Orson Welles y el Arte del Fake News.[9] Si de encontrar problemas con el trabajo de Pooley & Socolow se trata, nadie más interesado que Brad Schwartz.

¿Y qué tal? ¿Puede?

Según observa Schwartz, “al comenzar el siglo 21, algunos investigadores empezaron a cuestionar si el pánico realmente había sido tan grande como Cantril y otros decían.” ¿Y cómo opina él? Schwartz coincide con estos académicos que los diarios, en apoyo a las afirmaciones de 1938, presentaron “escasa evidencia dura.”

Schwartz hace eco, también, a las críticas de Pooley & Socolow contra La Invasión de Marte de Cantril, llamándolo “el estudio defectuoso de Cantril.”

Y—encima—Schwartz critica a quienes (por ejemplo, David Ropeik), en el 75 aniversario del show de CBS, evocaban todavía “millones” de apanicados, cuando ni siquiera Cantril—quien suprimiera datos buenos e inflara otros torcidos—afirmó jamás en exceso de un millón.[10]

Hasta aquí, si te fijas, ni una sola discrepancia con Pooley & Socolow.

Pero según Pooley & Socolow “casi nadie fue engañado por el show de Welles.” ¿Qué hay de eso? ¿Hemos aquí, finalmente, a juicio de Schwartz, una afirmación inmoderada? ¿Sería éste el botón de muestra para ilustrar como Pooley & Socolow “corrigen con enjundia excesiva la narrativa conocida y trillada”? Parece que no. “Los realmente asustados,” coincide Schwartz, fueron “relativamente pocos.”[11]

Y sin embargo Schwartz insiste—pese a todo—en querer rescatar algo de la historia tradicional del pánico en masa, y nos ruega no despreciar “historias [que] merecen análisis y solución.”[12]

Por ejemplo: la historia de John y Estelle Paultz—la aventura consentida, diríase, de Schwartz, elegida para su obertura y colmada de superlativos hilados con prosa hábilmente jadeante—. A mi gusto, empero, ni así levanta.

Los incautos Paultz, tomando por noticiero el show de Welles, corrieron a evacuarse de Manhattan por vía ferroviaria sin poder avistar, camino a la estación, a otros fugitivos del genocidio marciano. Un día cualquiera en las calles. (Debieron sentirse raros.)

Arriba ya del tren, viendo a sus compañeros de vagón plácidos e ignorantes, John y Estelle se afanaron por contagiarles su pánico. Los pasajeros se inquietaron—por la salud de John y Estelle—y disputaron con fuerza la afirmación de un aterrizaje marciano.

Uno mencionaba el nombre de Orson Welles. Entonces John “se dirigió a su esposa y, gritando para hacerse entender por encima del ruido, preguntó, ‘¿Quién es Orson Welles?’ ” Estelle sabía. Se detuvo. Prendió el foco. “Estelle gritó que le dieran un periódico” y dio con la cartelera donde anunciaban el show de CBS. Y así desinfló, ella misma, su breve alboroto.

¿Quod Erat Demonstrandum?

Si el ridículo fugaz de John y Estelle Paultz camino a Hartford no puede llamarse un ‘pánico en masa,’ entonces no hay riesgo en aceptar—como de hecho acepta el propio Schwartz—la revisión histórica de Pooley & Socolow: no hubo tal pánico en masa. Los diarios lo inventaron.

Pero ¿por qué hicieron eso los diarios?

Pooley & Socolow observan lo siguiente sobre los ‘reportes’ en periódicos de aquel ‘pánico en masa’ que nunca sucedió:

“En un editorial titulado ‘Terror por la Radio,’ el New York Times reprochó a ‘los jefes de la radio’ por haber aprobado que se entremezclara una ‘ficción estremecedora’ con boletines de prensa ‘presentados tal cual se habría hecho con las noticias de verdad.’ Advirtió Editor and Publisher, la revista de la industria del periódico: ‘La nación entera se enfrenta todavía al peligro de noticias incompletas y mal comprendidas [transmitidas] por un medio que no ha demostrado todavía … ser capaz de realizar competentemente el trabajo periodístico.’ ”[13]

Con base en esto, la hipótesis de Pooley y Socolow es que los diarios buscaban desacreditar a la radio porque “la radio había chupado de los diarios muchos ingresos de publicidad durante la [Gran] Depresión, lastimando mucho a la industria del periódico.” Querían recuperar ese mercado perdido. Entonces, cuando Welles simuló noticias en su dramatización radiofónica de La Guerra de los Mundos,

“los diarios pescaron la oportunidad … para desacreditar a la radio como fuente de noticias […] para demostrarle así a los anunciantes, y a los reguladores, que los jefes de la radio eran irresponsables y merecían poca confianza.”[14]

La frase “pescaron la oportunidad” significa que los diarios, todos juntos, solidarios, publicaron encabezados falsos para hacer creer al público que Orson Welles había dañado a la nación con su show.

Esta hipótesis de los historiadores Pooley & Socolow merece el mote de ‘teoría de conspiración,’ pues ellos afirman que todos los jefes de los periódicos conspiraron para publicar noticias falsas.

Me quedo algo pasmado. Porque en el mundo académico (y en el mediático) se considera de pésimo gusto proponer teorías de conspiración. Y sería quizá por ello que Pooley & Socolow no enfatizan esto (porque no lo hacen). Pero están en un aprieto, porque sus hechos documentados son llanamente imposibles si el mercado de diarios en 1938 era libre y competitivo.

En un mercado libre—al contrario de un monopolio oculto o cartel—tienes el incentivo de exhibir las mentiras, exageraciones, distorsiones, y errores de otros, porque así construyes tu prestigio como fuente veraz y socavas el de tus competidores, lo cual redunda en mayor participación de mercado y mayores ingresos de publicidad. Ningún diario libre puede resistir demostrarle al público que sus rivales están diseminando una historia enorme y completamente falsa—para esto vive un diario libre—.

Pero ¿no pudiera tratarse de borreguismo?, me pregunta la gente. Digamos que un periódico grande e influyente dijera la mentira, y luego los demás periódicos se treparon a la historia, repitiéndola. No sería maquiavelismo—tan solo… mediocridad, pereza—.

La gente puede ser mediocre y perezosa—sin duda—. Y muchos diarios pequeños no pueden hacer su propia investigación y repetirán simplemente lo que dijo el New York Times. Pero si los diarios grandes, por lo menos, competían unos con otros en 1938, entonces cada uno tenía el incentivo de revisar esta historia de un pánico nacional y exhibirla por lo que era: un timo.

Parece, sin embargo, que ni un periódico hizo esto.

Sin más remedio, entonces, Pooley & Socolow adoptan—contra la pared y a regañadientes—la hipótesis de un cartel de diarios, y tan disciplinado que no sufrió una sola deserción del esfuerzo colectivo por derrotar a la radio.[15]

Siendo muy franco, no me gusta esta hipótesis. Pero no porque se trate de una audaz teoría de conspiración. Me enfada, más bien, que no puede explicar la evidencia. Pues nos estorba el siguiente dato GIGANTE: ¡CBS se disculpó por el ‘pánico en masa’!

¿Por qué enviaron a Orson Welles a pedir disculpas?

A ver: ponte en los carísimos y bien boleados zapatos de William Paley. Eres ahora magnate de medios, dueño de CBS. Tu situación es la siguiente: la industria entera de los diarios te está acusando de haber causado un pánico en masa en Estados Unidos. Están pidiendo que los reguladores restrinjan tu libertad de emitir noticias.

Eres un magnate de medios—un superhombre—. ¿Te vas a agachar así nomás? ¿O mandas llamar a Frank Stanton?

Frank Stanton es tu encargado en CBS de medir e interpretar la respuesta del auditorio. Por sus datos, él sabe que no hubo tal pánico en masa (ver arriba). Y puede probarlo. Te lo dice. ¿Qué haces?

Pues usas el enorme poder de la radio, residente en tus manos, y dices la verdad: ¡No hubo tal pánico en masa! ¡Los periódicos están mintiendo! Fuerzas a los periódicos a recibir su propio búmeran en la cabeza. Y vistes delante de todos un resplandor cual nueva—y realmente confiable—fuente de noticias.

Eso es lo que haces . No es lo que hizo William Paley. Él hizo esto: mandó a Orson Welles a pedir perdón por aquel presunto pánico en masa.

“La actuación estelar de Welles aquella noche,” escribe Michael Socolow, “no fue en el estudio; fue en el pasillo, en una conferencia de prensa improvisada, cuando fingió estar asombrado y contrito.”[16]

¿Por qué piensa Socolow que Welles fingía su contrición en aquella conferencia de prensa? Consulté el pie de página. Su testigo ocular es Howard Koch, uno de los escritores de CBS trabajando con Welles. Koch “estaba presente,” escribe Paul Heyer en The Medium and the Magician,

y [Koch] sospechaba una astucia Wellesiana. Vio verificación de la misma cuando hubo terminado el trámite. Welles y [su colaborador John] Houseman salieron simultáneamente por distintas puertas, se miraron el uno al otro, y sin decir una palabra intercambiaron gestos de celebración.”[17]

Misión cumplida. Pero ¿cuál era esa misión?

Según Koch la astucia Wellesiana había sido ésta: Welles había querido desde el principio crear un pánico de masas—ésa era toda la intención—pero había que fingir asombro en la conferencia de prensa, como si jamás hubiera deseado eso, para protegerse a sí mismo y a CBS de una demanda. Así podía explicarse su actuación (Welles era un actor de talento).

¿Es razonable esta interpretación de Koch? No para quien ya sabe que no hubo tal pánico en masa. Porque si de evitarse alguna demanda se trataba, entonces tocaba más bien refutar la mentira. La contrición fingida de Welles en aquella conferencia de prensa, tan palpable para Koch, puede entonces interpretarse de otra manera: Welles colaboraba con la mentira de que CBS había causado un pánico en masa.

¿Acaso respaldan esta interpretación otros elementos del contexto? Sí, la respaldan.

Welles padre, un mago aficionado, le había enseñado a Orson el oficio, como recordó alguna vez en entrevista el hijo:

“Así como aprendían otros niños a tocar el violín y otras cosas, a mí me daban clases [de magia]. Entonces era un verdadero wunderkind [prodigio] con una baraja de naipes.”

Pero ya como adulto la carta fuerte de Orson Welles, según su propio testimonio, fue

“lo que llamamos ‘mentalismo,’ la lectura de la mente y todas esas cosas … un blof gigantesco, en otras palabras, que es bastante más fácil de hacer que mantener hábiles los dedos.”[18]

El mentalismo se vale de supuestos para nosotros tan cotidianos como invisibles. Un truco viejo es la pregunta cargada. En un coctel, pregúntale a alguien (disque en privado, pero para que otros oigan), “Oye, Juan, ¿ya no golpeas a tu esposa?” Conteste como sea, y aun si intentara negar la premisa, Juan estará en problemas, porque los escuchas pensarán, implícitamente: “¿Quién habría de preguntar eso a menos que Juan sí estuviera golpeando a su esposa?”

En la conferencia de prensa, Welles no preguntó sino afirmó: una variante de: “Siento mucho el pánico nacional; para nada fue mi intención.” Pero la estructura es la misma. La mente piensa implícitamente: hubo un pánico nacional; si no, ¿por qué pide disculpas Welles?

Un “blof gigantesco.”

Orson Welles colmó este blof gigantesco, tiempo después, ‘confesando’ que supuestamente sí había querido producir aquel pánico (el que nunca sucedió—ése—). “Sí, le dijo a Peter Bogdanovich, el efecto logrado [en 1938] había sido el anhelado, pero el tamaño de la cosa los había dejado ‘atónitos.’ ”[19]

Ajá.

Nunca tires la estafa; te mueres con la mentira, dice una frase famosa de la película Focus, donde un estafador o conman de fino talento (Will Smith) explica los principios del oficio a una aprendiz (Margot Robbie). Orson Welles entendía ese principio—no le aprendía nada a nadie—.

¿Cuál es la lección profunda? Es ésta: Si Stanton, Welles, y CBS, en lugar de defenderse de una acusación dramática y falsa escogieron cooperar con el fraude periodístico de un ‘pánico en masa,’ como hicieron también las otras radios, entonces tenemos que todos los medios grandes activos en 1938 se coludieron para vender esta mentira al público.

La teoría de conspiración de Pooley & Socolow resultó tímida.

Y nos hemos topado, parece, con aquella condición extrema, estipulada de antemano, bajo la cual dijimos habría de rechazarse la hipótesis de un libre mercado de grandes medios periodísticos—por lo menos para el año de 1938—.

¿Y la televisión?

Si bien la televisión, en 1938, estaba todavía en su infancia, pronto sería un medio noticiero importante por mérito propio. Entonces ¿por qué, en todos estos años, no vimos a la televisión desmentir el fraude de los diarios y la radio sobre aquel ‘pánico en masa’ que nunca sucedió?

Las TV-estaciones privadas no añaden misterio alguno. Porque ésas salieron de las estaciones privadas de radio—son las mismas compañías—.

Pero PBS (Public Broadcasting Service), la TV-estación de gobierno, ostenta una misión de ‘servicio al público.’ Entonces, pregunto: Cuando PBS produjo un documental en 2013 para conmemorar el 75 aniversario de la emisión de 1938 de CBS, ¿por qué no exhibieron el engaño y mito del pánico en masa?

Imagina que tú eres el productor de ese show de PBS. Te va a tocar, si eliges hacerlo, destapar un escándalo gigante que ha durado 75 años. Una tomada de pelo espectacular, corriendo todavía, contra los ciudadanos estadounidenses, y urdida por—¿por quién? ¡Por los noticieros privados—tus rivales—!

Qué divertido.

Y el escándalo no solo subirá tus ratings, sino que exaltará la estampa del gobierno como escudo de los ciudadanos contra las grandes corporaciones.

Pero no. En lugar de hacer la cosa emocionante, prestigio-efervescente, y de ratings abundante, la cosa de provecho, presumiblemente, para PBS, los productores decidieron mejor reciclar, en un documental comparativamente tibio, la historia de todos ya sabida. (NPR [National Public Radio, la radio del gobierno] hizo lo mismo.)

Y—hemos de aclarar—no se trata de ignorancia. Pues como puntualmente se han quejado Pooley y Socolow, cuando el documental de PBS estaba siendo preparado los productores hablaron con los historiadores sobre la investigación desmentidora, pero los anteriores eligieron no abordar el tema en el filme.[20]

Cabe preguntar: ¿Qué modelo de los medios noticieros en 2013 pudiera brindar un sentido natural a estos comportamientos? Precisamos de uno.

¿Acaso Pooley & Socolow han afectado las percepciones del público?

Cierto, la investigación desmentidora de Pooley & Socolow se publicó en Slate. ¿Pero a quién afectó? ¿Acaso pueden competir con PBS?

Considera esto. En mayo de 2022, a casi una década de publicado el trabajo de Pooley & Socolow en Slate, el famoso comediante estadounidense Bill Maher, en el monólogo de inicio de Real Time with Bill Maher, afirmó lo siguiente:

“En 1938 la radio era el medio emocionante del día y mucha gente se alebrestó contra ella, sobre todo cuando Orson Welles presentó lo que obviamente era un drama de ficción sobre una invasión marciana de Nueva Jersey y miles de personas pensaron que era real y se apanicaron.”

Maher nos sirve aquí de barómetro cultural porque Real Time ha venido promediando más de un millón de televidentes. Y Maher mismo se presenta, no sin algo de razón, como portavoz del sentido común y enemigo de las desinformaciones. Entonces, si Bill Maher no entiende esto, sigue que Slate—con suscritores contados en algunos miles—no cambió el conocimiento de la gente sobre el presunto pánico en masa de 1938.

Nos siguen tomando el pelo.

Queda por investigar

Aquí sobran preguntas. Por ejemplo: ¿Cómo fueron organizados los diarios y la radio en 1938 para mentirle a todo mundo de esa manera? ¿Quién estaba detrás de esto? ¿Y por qué nos querrían culpando a la radio de un pánico en masa en 1938?

Creo haber encontrado algunas pistas interesantes.

En 1928, faltando diez años para la emisión de Orson Welles en CBS, el legendario Edward Bernays—por muchos (y por sí mismo) considerado como padre fundador de las relaciones públicas y de la mercadotecnia—publicó un libro cándidamente titulado Propaganda para defender su visión peculiar de la ‘democracia.’

La propaganda, explica Bernays, es en nuestro beneficio, porque “el orden funcional de la vida grupal” es imposible sin tener primero “nuestros gustos formados y nuestras ideas sugeridas en buena medida por hombres desconocidos.” El ciudadano debe confiar en estos hombres invisibles—ciegamente, se entiende— “conocedores de los procesos mentales y los patrones sociales de las masas.” Pues son ellos, dice, “quienes jalan los hilos de la mente del público, … [y] aprovechan añejas fuerzas sociales, elucubrando métodos para unir y guiar al mundo.”[21]

En fin, gustare o no, según Bernays todo eso ya estaba sucediendo. Abría su libro, de hecho, con esto:

“La manipulación consciente e inteligente de los hábitos organizados y las opiniones de las masas es un elemento importante en la sociedad democrática. Quienes manipulan este mecanismo oculto de la sociedad constituyen un gobierno invisible, y son el verdadero poder en nuestro país.”[22]

¿Estaba loco de atar aquel Bernays? ¿O sabía algo?

Durante la Primera Guerra Mundial, el Comité de Información Pública o CPI (Committee on Public Information) del gobierno estadounidense había contratado a Eddie Bernays explícitamente para hacer guerra psicológica. Ernest Poole, quien lo reclutara, escribió: “ ‘[sus] habilidades son sin lugar a duda excepcionales.’ ”[23] Sobre sus experiencias en el CPI, Bernays luego reflexionó así:

“ ‘Aprendí una lección básica en el CPI: que esfuerzos comparables a los del CPI para afectar las actitudes de enemigos, neutrales, y gente del país podían ser aplicados con igual facilidad durante tiempos de paz. En otras palabras, que lo ensayado para una nación en guerra podía igualmente hacerse para organizaciones y gente de una nación mientras dure la paz.’ ”[24] (énfasis mío)

Para ello, empero, hacía falta investigar científicamente, en tiempos de paz, los efectos de los medios sobre la ciudadanía estadounidense—cosa que ya hacían Frank Stanton y Hadley Cantril (a quienes conocimos arriba) en los años 1930—. Escribe Michael Socolow:

“[Hadley] Cantril, un sociólogo de Princeton; [Frank] Stanton [de CBS]; y Paul Lazarsfeld habían creado una Oficina de Investigaciones Radiofónicas [Office of Radio Research], proyecto apoyado por la Fundación Rockefeller, establecido en [la Universidad de] Princeton, y considerado como el primer gran intento de analizar empíricamente los efectos de los medios de comunicación de masas.”[25]

Descrito así suena inocente—ni parecido al chisme de Bernays—. Empero, internamente, la Fundación Rockefeller comentaba sus investigaciones en los mismos términos que Bernays: buscaban perfeccionar las técnicas de la guerra psicológica para usarlas contra la población civil estadounidense. Poco después, los científicos atareados en esto—asalariados por los Rockefeller, la familia más poderosa y rica del mundo—fundarían en las universidades la disciplina de la ‘comunicación.’

Todo esto lo documenta el historiador Christopher Simpson en su libro Science of Coercion: Communication Research and Psychological Warfare, 1945-1960 (Ciencia de Coerción: La Comunicación y la Guerra Psicológica, 1945-1960).

Los teóricos principales de aquel esfuerzo, escribe Simpson, eran Harold Lasswell y Walter Lippmann (sí, ése, el ‘padre del periodismo moderno’). El primero había hecho su tesis de doctorado sobre los hallazgos manipulativos del CPI durante la guerra; el segundo desarrollaba lo aprendido personalmente en su gestión de guerra con el CPI. Haciendo eco a Bernays, estos dos teóricos escribieron que tú y yo no podremos gobernarnos; entonces, las élites de poder ‘democráticas,’ empleando ‘ciencia de comunicación,’ deberán administrarnos y guiarnos.[26]

En un cónclave organizado por los Rockefeller, Lasswell expuso que “La élite de la sociedad estadounidense (en la frase muy franca de Lasswell, ‘aquellos con dinero para apoyar investigaciones’) deberían manipular sistemáticamente el sentir del público.” Es decir que deberían administrar nuestra realidad—y su significado—y así coercer a la gente indirectamente, sin delatarse. En su sentida protesta, Donald Slesinger, disidente único de aquel cónclave, acusó que eso sería “ ‘establecer la dictadura por conducto de la manipulación.’ ”[27]

Cabe entonces preguntar: ¿Acaso estaría la Oficina de Investigaciones Radiofónicas de Princeton, financiada por los Rockefeller, realizando pruebas de campo sobre manipulación de masas?

Dicha Oficina tenía vínculo con CBS por conducto de Frank Stanton, encargado de medir la respuesta del auditorio, y por conducto de William Paley, dueño de CBS y bien cercano a los hermanos Nelson y David Rockefeller. Y había otro vínculo, con otra cosa, como documenta Christopher Simpson.

“La carrera profesional de Cantril se había ligado íntimamente con la inteligencia estadounidense y las operaciones psicológicas clandestinas desde, por lo menos, finales de los 1930. La Oficina de Investigaciones Radiofónicas, por ejemplo, tenía contratos con el gobierno de Roosevelt para estudiar la opinión pública estadounidense en vísperas de la Segunda Guerra Mundial.”[28]

A considerar, ahora, tres detalles curiosos.

Primero: Fue el propio Frank Stanton quien recabara los datos de respuesta del auditorio a la emisión de Orson Welles. Entrevistado en el periodo 1994-97 para un libro sobre su vida, Stanton, rozando entonces los noventa y quizás por ello cayendo en un descuido, confesó que su investigación de 1938 había arrojado ningún pánico en masa (ver arriba).

Segundo: Michael Socolow menciona que Frank Stanton recabó dichas estadísticas trabajando en colaboración con Paul Lazarsfeld, su colega en la Oficina de Investigaciones Radiofónicas de Princeton.

Tercero: Estos dos también colaboraron en el manuscrito de Cantril: La Invasión de Marte. En testimonio interno a funcionarios de la Fundación Rockefeller, “Stanton … y Lazarsfeld” expresaron que “ellos básicamente habían rescrito el manuscrito y habían luego permitido que se publicara bajo presunta autoría de Cantril.”[29]

Es el propio Michael Socolow quien documenta ese detalle, pero se le ha escapado, me parece, su consecuencia. Y eso nos obliga a una expresión más precisa. A saber: Frank Stanton y Paul Lazarsfeld, esos que siempre supieron que jamás hubo pánico en masa, son los verdaderos autores del libro ‘de Cantril,’ ése que afirma haber validado un pánico en masa.

Delicioso. (O escalofriante.)

Durante la guerra, escribe Christopher Simpson, Nelson y David Rockefeller pasaron a ocupar cargos de responsabilidad en inteligencia. Y fue bajo dirección de Nelson, en parte, que William Paley, y también Frank Stanton, Hadley Cantril, y otros fueron empleados por el gobierno por su oficio de guerra psicológica.[30]

En la posguerra, los hermanos Rockefeller supieron perpetuarse cual señores fuertes de la inteligencia estadounidense, con énfasis en guerra psicológica.[31]

Frank Stanton, mientras, pasó a gobernar durante muchos años a todo CBS. Y también por aquel tiempo, documenta Simpson, los otros guerreros psicológicos se acomodaron en sus sillas de profesores a liderar departamentos universitarios nuevecitos, rechinando de limpios, que—regados con hartos dineros de la CIA (Agencia Central de Inteligencia) bien lavados por la Fundación Rockefeller—brotaron de la nada para establecer, en un abrir y cerrar de ojos, la disciplina académica de la ‘comunicación.’

Ahora cátame, te ruego, el siguiente acertijo: ¿Cuál sería la herramienta más poderosa para un guerrero psicológico?

Propongo: la ‘prensa libre’ corrompida en secreto. Pues si tú puedes corromper a la prensa sin que parezca, y puedes fingir libertad hábilmente en el empaque, conseguirás preservar la confianza del público en las noticias. Y con dicha confianza podrás venderle cualquier cosa. Guerreros psicológicos astutos y comprometidos con el éxito, por ende, contando con recursos nivel Rockefeller, no sabrían desistirse hasta no haber poseído a la ‘prensa libre.’

Atraigo entonces la siguiente pregunta: ¿No sería que el engaño de un pánico nacional en 1938 no fue sino la prueba operativa de un sistema ya cabalmente corrompido? ¿No estarían probando para ver si, empuñando el nuevo sistema con dominio exquisito y conocimiento experto, podían ya crearnos eventos históricos dramáticos y bien falsos? Suponiendo que así fuera, aprobó con honores el nuevo sistema.

Trataré, en mis siguientes entregas, el contexto más amplio de esta historia.

Francisco Gil-White es antropólogo político enfocado en temas de conflicto social, con formación en teoría evolutiva y etnografía sociocultural. Su trabajo hace énfasis en los modelos cognitivos que organizan el aprendizaje social y las conductas humanas. Ha enseñado ‘Psicología Biocultural’ en el Departamento de Psicología de la Universidad de Pennsylvania, ‘Comportamiento Humano’ y ‘Negociación Integradora’ en el Departamento de Administración del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), y ‘Pensamiento Crítico’ en la Universidad del Medio Ambiente (UMA).

NOTAS AL PIE:

[1] “The Myth of the War of the Worlds Panic: Orson Welles’s infamous 1938 radio program did not touch off nationwide hysteria. Why does the legend persist?”; Slate; 28 October 2013; by Jefferson Pooley & Michael J. Socolow. https://www.slate.com/articles/arts/history/2013/10/orson_welles_war_of_the_worlds_panic_myth_the_infamous_radio_broadcast_did.html

[2] The Myth of the War of the Worlds Panic (op. cit.)

[3] The Myth of the War of the Worlds Panic (op. cit.)

[4] The Myth of the War of the Worlds Panic (op. cit.)

[5] Dunham, C. B., & Cronkite, W. (1997). Fighting for the First Amendment: Stanton of CBS Vs. Congress and the Nixon White House. Praeger. (p.33)
https://archive.org/details/fightingforfirst0000dunh/mode/2up

[6] The Myth of the War of the Worlds Panic (op. cit.)

[7] The Myth of the War of the Worlds Panic (op. cit.)

[8] Carlyle, T. (1859). On Heroes, Hero-worship, and the Heroic in History: Six Lectures: Reported with Emendations and Additions. United States: Wiley & Halsted. (p.147)
https://www.google.com/books/edition/ON_HEROES_HERO_WORSHIP_AND_THE_HEROIC_IN/mdvCzrNIkooC?hl=en&gbpv=0

[9] Schwartz, A. B. (2015). Broadcast Hysteria: Orson Welles’ss War of the Worlds and the Art of Fake News. Farrar, Straus and Giroux. (p.9)
https://archive.org/details/broadcasthysteri0000schw/

[10] Broadcast Hysteria (op.cit). pp.8-9.

[11] Broadcast Hysteria (op.cit). p.9.

[12] Broadcast Hysteria (op.cit). pp.4-7

[13] The Myth of the War of the Worlds Panic (op. cit.)

[14] The Myth of the War of the Worlds Panic (op. cit.)

[15] Como si se avergonzara de haber propuesto una teoría de conspiración (si bien no tiene remedio), Socolow trabaja duro para ‘concluir’ que su investigación ha demostrado ¡la debilidad de los medios! Es decir, porque los medios en realidad no convencieron a la gente de que los marcianos los invadían. Pero…, sí convencieron a todo mundo, por más de 70 años, de un pánico en masa que nunca sucedió, según sus propias investigaciones, Profesor Socolow.

[16] “The Hyped Panic Over ‘War of the Worlds’”; The Chronicle of Higher Education; 24 October 2008; By Michael J. Socolow.
https://www.chronicle.com/article/the-hyped-panic-over-war-of-the-worlds/

[17] Heyer, Paul. The Medium and the Magician: Orson Welles, the Radio Years, 1934-1952. United States, Rowman & Littlefield Publishers, 2005. (p.98)

[18] https://www.youtube.com/watch?v=jMh7pbYr8DQ&t=1352s

[19] The Medium and the Magician (op. cit.) p.98.

[20] The Myth of the War of the Worlds Panic (op. cit.)

[21] Bernays, E. L. (1928). Propaganda. New York: Horace Liveright. (pp.1-2)

[22] Ibid.

[23] Tye, Larry. The Father of Spin. Picador. Kindle Edition. (p. 18)

[24] Cutlip, Scott M. The Unseen Power: Public Relations. A History. Hove, UK: Lawrence Erlbaum, 1994. (p.168)

[25] The Hyped Panic Over ‘War of the Worlds’” (op. cit.)

[26] Simpson, Christopher. Science of Coercion: Communication Research & Psychological Warfare, 1945–1960 (Forbidden Bookshelf Book 13). Open Road Media. Kindle Edition. (pp.13, 15-17)

[27] Science of Coercion (op. cit) p.23

[28] Science of Coercion (op. cit) p.80

[29] The Hyped Panic Over ‘War of the Worlds’ (op. cit.)

[30] Durante la guerra, Nelson Rockefeller fue subsecretario de relaciones exteriores (assistant secretary of state) bajo Roosevelt y Truman. Además, dirigió la Oficina del Coordinador de Asuntos Interamericanos (CIAA), “una agencia embrionaria de inteligencia estadounidense … enfocada en América Latina,” a la cual William Paley—él mismo “empleado prominentemente” en la División de Guerra Psicológica del ejército—brindó la colaboración enérgica de su compañía CBS.(a) Hadley Cantril fue el “especialista en jefe sobre opinión pública” en la CIAA y además en la Oficina de Información de Guerra (Office of War Information – OWI), otra unidad de inteligencia estadounidense enfocada en propaganda. Naturalmente que “OWI … firmó contratos para investigaciones de comunicación y consultoría con Paul Lazarsfeld, Hadley Cantril, [y] Frank Stanton.”(b) David Sarnoff de RCA, otro compinche de los Rockefeller, fue “consultor especial para el General Eisenhower en materia de comunicaciones,” llegando a General de Brigada.(c) En su RCA Building en Rockefeller Center, Sarnoff hizo de anfitrión al despacho operativo de la OSS (Office of Strategic Services) de Allen Dulles, el futuro director de la CIA, que trabajaba de la mano con el británico MI6, que también tenía su oficina neoyorquina en el RCA Building de Rockefeller Center. Mientras tanto, “David [Rockefeller] … trabajó en la inteligencia del ejército en África Norte.”

FUENTES:

(a) Science of Coercion (op. cit) p.80

(b) Science of Coercion (op. cit) p.26

(c) https://archive.org/stream/radioageresearch194245newyrich#page/n381/mode/2up

(d) Reich, Cary (1996) The life of Nelson A. Rockefeller : worlds to conquer, 1908-1958. New York : Doubleday. (p.559)

[31] Reich, Cary (1996) The life of Nelson A. Rockefeller : worlds to conquer, 1908-1958. New York : Doubleday. (p.559)


 

Las opiniones, creencias y puntos de vista expresados por el autor o la autora en los artículos de opinión, y los comentarios en los mismos, no reflejan necesariamente la postura o línea editorial de Enlace Judío. Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío

Enlace Judío – La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, sufrió un aparente fallido intento de magnicidio este jueves en el que un hombre le apuntó con un arma a la cabeza en una vía pública.

La imagen del intento de atentado contra Cristina Kirchner. pic.twitter.com/P08PhWXLWy

— Sergio Villone (@sergioVillone) September 2, 2022

El video del arma contra @CFKArgentina pic.twitter.com/8j1xpMnPoe

— Lautaro Maislin (@LautaroMaislin) September 2, 2022

De acuerdo con medios argentinos, Kirchner se encontraba cerca de su domicilio en el barrio de Recoleta en Buenos Aires cuando se presentó el incidente.

Mientras saludaba a simpatizantes a las puertas de un vehículo, un sujeto se acercó y le apuntó con un arma a la cabeza. El hombre fue inmediatamente detenido en los momentos posteriores.

La exmandataria resultó ilesa.

El momento fue captado por una transmisión televisiva y por algunos de los simpatizantes que se encontraban en el lugar de los hechos.

Los medios locales indican que el sujeto se trataría de un hombre de nacionalidad brasileña de 35 años de nombre Fernando Andrés Sabag Montiel.

La situación política actual de Kirchner

Kirchner actualmente está siendo acusada por la fiscalía argentina de encabezar una asociación para defraudar al Estado cuando era presidenta, entre 2007 y 2015, mediante el supuesto direccionamiento de contratos millonarios de obras viales en la provincia de Santa Cruz.

El fiscal Diego Luciani, al frente de esta causa que se conoce como “Vialidad“, pide 12 años de cárcel para Kirchner y su inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.

Esta acusación ha desencadenado en días recientes numerosas manifestaciones de los simpatizantes de la exmandataria, quien niega la acusación en su contra.

Los simpatizantes de Kirchner empezaron a reunirse en los alrededores de su casa en Recoleta y las autoridades han instalado un dispositivo de seguridad en las cercanías del domicilio.

En días recientes, el caso de “Vialidad” llevó a un momento polémico protagonizado por el presidente Alberto Fernández que llevó a críticas de la DAIA, el organismo representativo de la comunidad judía argentina.

El mandatario argentino comparó al fiscal Luciani con el fallecido fiscal judío Alberto Nisman, quien en vida presentó una denuncia contra Kirchner ligada al atentado contra la AMIA en 1994.

”Realmente, alentar que le pueda pasar al fiscal Luciani lo que le pasó a Nisman… miren hasta acá, lo que le pasó al fiscal Nisman es que se suicidó. Hasta acá no se probó otra cosa. Yo espero que no… que no haga algo así el fiscal Luciani”, expresó Fernández.

La DAIA difundió un comunicado oficial mediante el cual condenó la expresión realizada por el presidente argentino.

“La analogía caprichosa entre un fiscal muerto y un fiscal vivo, ambos cuestionados desde el Poder Ejecutivo, traza un límite que debe ser cuestionado por la sociedad civil. En una de sus visitas a nuestra institución, el actual presidente manifestó que el fiscal Nisman fue asesinado. Hoy sostiene lo contrario. No sólo a sus convicciones, sino también a lo determinado por la JusticiaAlberto Nisman fue asesinado. No es una cuestión de fe”, dijo el comunicado de la DAIA.

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Enlace Judío – El escritor húngaro judío György Sági presentará el 4 de septiembre su obra Gilgul en la 35 Feria Universitaria del Libro en Hidalgo.

El evento podrá ser seguido en vivo a través de la siguiente liga: https://www.uaeh.edu.mx/ful/2022/eventos/474

El libro, basado en hechos reales, cuenta una misteriosa historia que toma como punto de partida unas fotografías olvidadas por una mujer tras su muerte.

Unas fotos que son investigadas por su hijo y en las que aparece un hombre cuya figura se repite. En todas ellas, un nombre escrito a mano figura en el reverso: György Weisz.

La palabra clave del libro, Gilgul, es la metempsicosis, que no forma parte de las creencias judías, siendo rechazada por la mayoría de los judíos.

Sin embargo, la novela trata de una metempsicosis especial cuyo protagonista, Gyuri se considera a sí mismo como rencarnación de György Weisz, el gran amor de su madre, Lili. ¿Quién es György Weisz y por qué es tan importante para su madre? La pregunta que plantea el libro es el eterno dilema de los judíos: quedarse o salir. Encontrar la felicidad en el lugar donde vivimos, o buscarla en otra parte.

A finales de agosto de 2022 dará inicio el programa Semanas de la Cultura Húngara en México, con el principal objetivo de acercar al país europeo al público mexicano. Dicho programa consistirá en una serie de eventos que versarán sobre la diplomacia cultural, deportiva, turística, y educativa.

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Enlace Judío- México estuvo presente en el aniversario 125 del Congreso Sionista, realizado en Basilea; la gala de clausura fue celebrada en el mismo salón en el cual Teodoro Herzl convocara al histórico evento que creó el Israel que conocemos hoy.

Estas son las palabras de Moy Mitrani, presidente del Consejo Sionista de México:

“Haber participado en los actos conmemorativos por el 125 aniversario del Primer Congreso Sionista en la ciudad de Basilea, Suiza, fue una experiencia inolvidable para todos aquellos que tuvimos la oportunidad de asistir. Un congreso que curiosamente coincidió con el día exacto en que se celebró el primer Consejo Sionista, tanto en el calendario judío como en el gregoriano. Tener contacto personal (después de la pandemia), con los personajes más relevantes del mundo judío sionista- incluido Zeev Benjamin Herzl -fue muy inspirador. 

Las reuniones fueron sumamente interesantes. Quiero destacar la admirable organización y planeación por parte de la Organización Sionista Mundial, ponencias de excelencia con las metas bien puestas en lo que será la próxima reunión de trabajo en abril del 2023. Siempre viendo hacia adelante con un objetivo claro; el futuro del sionismo. 

Al llegar al centro de convenciones de Basilea y después de pasar por un meticuloso chequeo de seguridad, nos dimos la bienvenida a todas las delegaciones de la OSM. Después de una muy emotiva bienvenida. comenzamos a trabajar con nuestras respectivas agrupaciones en diversos temas.

Tuvimos varias reuniones con jefes del departamento de la OSM, miembros del ejecutivo y representantes del espectro político israelí con el objetivo de desarrollar interés no solo en México y los trabajos que hemos llevado a cabo, sino también en la importancia de posicionar a las comunidades del norte y centro América, que denominamos como la CONCACAF del mundo sionista. 

Gracias al apoyo de la Sra. Silvia Kleinberg Nahmad tuvimos una reunión privada con el titular de la OSM, Yaakob Hagoel. Con él, revisamos algunos temas puntuales y aprovechamos para hacerle especial hincapié en la importancia de visitar comunidades tan fuertes como lo es la de México y de algunos lugares de Centroamérica. Nos reunimos con presidentes de más de treinta federaciones sionistas del mundo para desarrollar una serie de ideas y crear un networking de presidentes a nivel mundial y así lograr consensos y aprobación a propuestas por parte del Comité de Acción Sionista. 

Fuimos muy bien representados por importantes colaboradores del Consejo, que son parte de FESELA, WIZO, Naamat y otras.

Quisiera agradecer a Alberto Levy, Isaac Aspani, Gaston Maya, Enrique Levy, Rachel Aspani, Emma Adler, Sara Nates, Lucy Drijansky, Ellen Berenstein y  Silvia Kleinberg por haber representado con excelencia a su institución y haberse destacado en su labor.

Quiero a su vez, hacer una mención especial a nuestra quería Emma, cuya actitud y ganas se notó en todo momento. 

Paralelamente a la reunión del Comité de Acción Sionista, se desarrolló un congreso de emprendimiento con los más renombrados y destacados conferencistas, emprendedores y dueños de empresas, que nos abrieron los ojos a un mundo que no vemos todos los días. 

Fue invitado también uno de nuestros destacados Premio Herzl,el director del CDIJUM, Enrique Chmelnik.

Tuvimos reuniones con representantes de la Knesset, que también asistieron a esta celebración del pueblo judío, desde la izquierda a la derecha, fuimos una delegación plural inclusiva y sobre todo que empieza a tomar relevancia dentro del mundo judío y en el ámbito sionista.

Tenemos muy buenas perspectivas para el futuro como comunidad y como Consejo. La relevancia de nuestras acciones y proyectos están permeando a diferentes comunidades. Pronto, les tendremos más noticias sobre los proyectos que se están por cerrar para el beneficio de toda nuestra comunidad y sobre todo de nuestro futuro que son los jóvenes”.

 

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Auspiciado por la Cámara de Comercio México-Israel

Enlace Judío – Yair Lapid tuvo una llamada telefónica con el presidente ucraniano Volodimir Zelensky. Durante su conversación, Lapid envió sus condolencias por las personas que han perdido la vida en Ucrania desde que comenzó la invasión rusa e hizo un llamado por una solución diplomática para la guerra. Tras la comunicación, Zelensky dijo esperar que Israel se una a las sanciones en contra de Moscú y provea asistencia práctica a su país frente a la campaña militar rusa.

La compañía Boeing firmó un contrato con el Departamento de Defensa de Estados Unidos para suministrar a Israel 4 aviones de reabastecimiento de combustible KC-46. El acuerdo está valuado en 927 millones de dólares y se espera que las aeronaves lleguen a Israel en 2025. Se estima que estos aviones podrían ayudar a Israel en un potencial ataque contra el programa nuclear de Irán.

Lapid recibió en su oficina al jefe del Mossad, David Barnea, en vísperas de su viaje a Estados Unidos donde se reunirá con altos funcionarios de Washington. El encuentro se centró en el tema de la potencial reactivación del acuerdo nuclear con Irán.

Fuerzas de seguridad israelíes realizaron operativos para detener a un sospechoso y confiscar dinero destinado a fines terroristas en Judea y Samaria, ante lo que alborotadores palestinos respondieron con lanzamientos de bombas molotov y rocas. Como parte de los enfrentamientos, 2 palestinos fueron abatidos, uno de ellos aparentemente por fuego disparado por otro palestino. En el marco de los operativos en curso, las autoridades de defensa israelíes se estarían preparando para una posible escalada de violencia en Judea y Samaria, reportó la cadena israelí Kan.

Si las elecciones en Israel se celebraran hoy, el bloque de partidos alineado a Benjamín Netanyahu obtendría 59 escaños en la Knéset y el bloque de partidos afín a Lapid obtendría 56 escaños, según una encuesta electoral del Canal 13.

El presidente israelí Yitzhak Herzog visitará Alemania la próxima semana para asistir a la ceremonia conmemorativa por el 50 aniversario de la Masacre de Múnich, anunció su oficina. Durante su estancia, Herzog también se reunirá con su homólogo alemán, con el canciller alemán, dará un mensaje en el Bundestag y visitará el campo de concentración de Bergen-Belsen.

La cancillería israelí hizo un llamado a los devotos judíos a que no hagan la peregrinación en Rosh Hashaná a la ciudad de Umán, debido a los peligros que existen ante la invasión rusa en Ucrania. La dependencia advirtió que recientemente un ataque con cohetes mató a una persona e hirió a otros en el área de Umán, una situación que podría presentarse en cualquier momento y poner en riesgo a los peregrinos judíos.

 

Información sobre la Cámara de Comercio México-Israel en: [email protected]


Selección de noticias y guion: Germán Gómez

Locución y realización: David Crespo Neira

Enlace Judío – La guerra en Ucrania se ha estado librando durante más de seis meses y las hostilidades se han cobrado la vida de al menos 70 judíos del país europeo.

Esto según una estimación de la Federación de Comunidades Judías de Ucrania, de acuerdo con Yeshiva World News.

Alrededor de un tercio de las bajas murieron en Mariupol y el resto en Kiev, Járkov y Bucha, así como soldados judíos en el campo de batalla.

400 judíos han resultado heridos desde que comenzó la guerra y unos 50,000 judíos han tenido que salir de sus hogares.

Al menos 150 familias judías perdieron sus hogares en los ataques rusos. Además, de las 180 comunidades judías de Ucrania, 27 de ellas viven ahora bajo la ocupación rusa.

Desde el comienzo de la guerra, la Federación, junto con otros organismos y organizaciones judíos e israelíes, ha estado involucrada en el rescate de judíos de las ciudades del frente hacia el interior del país ya través de las fronteras hacia los países vecinos.

“Rescatamos a 35,198 residentes, la mayoría judíos, de 322 lugares en toda Ucrania, en estrecha coordinación con el ejército ucraniano”, dijo Alina Teplitsky, directora de la Federación.

“La mayoría de las personas que rescatamos son judías, pero ayudamos a todos los que preguntaron, también a los no judíos: salvamos tantas vidas como pudimos.

Las operaciones de rescate, algunas de las cuales fueron muy complejas y con riesgo de vida, se llevaron a cabo utilizando trenes, en los que pagamos todos los asientos, autobuses y taxis”.

El rabino Rafael Rotman de la Federación dijo: “Cada mes entregamos paquetes de alimentos a 36.000 familias a través de 180 centros de distribución en toda Ucrania.

Las familias no judías que nos contactan también reciben asistencia. El coste de cada paquete es de unos 100 euros e incluye 4 cajas con agua, productos de higiene como jabón, champú e incluso detergente, pescado, aceite, harina, conservas, azúcar, sal, miel, café, té y otros básicos. productos

“Nuestros cientos de voluntarios y empleados empacan unas 900 toneladas de productos y las envían en camiones a todo el país”.

El costo de la operación ha alcanzado hasta el momento los 21 millones de dólares, la mayor parte de los cuales se han gastado en ayuda humanitaria, una cantidad considerable en operaciones de rescate, así como en el mantenimiento de campos de refugiados.

El rabino Meir Stambler agregó: “Este no es un momento en el que nos preocupemos por los costos y los cálculos financieros, sino en salvar vidas, y cada minuto es crítico.

Rabinos, Shlijim de Jabad y empleados de la Federación están ocupados las 24 horas del día, los 7 días de la semana, y la situación humanitaria está empeorando.

“La peor parte en este momento es que el mundo está empezando a olvidar gradualmente por lo que estamos pasando aquí y las noticias de Ucrania se están dejando de lado.

“Anunciamos que la paz llegará pronto y que el Nevuá se cumplirá ‘y convertirán sus espadas en rejas de arado y sus lanzas en podaderas’”.

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Enlace Judío- Las Damas Amit de Bet El abrieron el salón Columnas- y sus corazones- para recibir a Josías Carmón, un joven voluntario del grupo CADENA, una asociación civil sin fines de lucro dedicada a la prevención y asistencia en emergencias y desastres, entregando la ayuda mano a mano directamente a los más necesitados.

Funciona como brazo humanitario de las comunidades judías del mundo y trabaja inspirando y accionando personas a ser humanitarias con el objetivo de construir un mundo resiliente, justo y equitativo para todos.

Siendo originario de Guatemala, Carmónno conocía a nadie a su llagada a México. Gracias a Enlace Judío, conoció y contactó al grupo CADENA, y más adelante pudo unirse a sus filas y contribuir a su loable labor.

Explicó su experiencia vivida en el reciente conflicto entre Ucrania y la Unión Soviética, donde CADENA intervino del lado ucraniano, dando apoyó a las personas que, de manera trágica, lo perdieron todo de un día a otro. A temperaturas extremas,  se ocupó de  resguardar a adultos y niños que sufrían el frío, el hambre  y el terror.

 

Josias Carmon habla de CADENA con damas de Bet El

Josías Carmón habló de su labor en las filas de CADENA con damas de Bet El

A su corta edad, Josías es un ejemplo, de que los seres humanos podemos ayudar unos a otros sin esperar nada a cambio. Te recomendamos ver el video de su conferencia para conocer a fondo su historia y el relato de cómo D-os lo puso en este camino.

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Enlace Judío – Descubrir que existe algo llamado “tiempo” no fue cualquier cosa, porque la humanidad no llegó a este planeta con un reloj en la mano.

Tuvimos que aprender a contar y a medir los ciclos astronómicos para desarrollar la noción de que hay cosas que cambian y que, por lo tanto, existe algo a lo que ahora llamamos “tiempo”.

No fue un proceso sencillo, por supuesto. Irving Gatell nos explica cómo en la antigua Mesopotamia culturas como la sumeria o la acadia fueron construyendo, paso a paso, los conceptos fundamentales para que la humanidad desarrollara sistemas de medición del tiempo.

Sin embargo, su esfuerzo tuvo muchas limitaciones. Era lógico: había muchas cosas que desconocían.

Por ello, el resultado concreto se tradujo en ese corpus de historias y relatos fantasiosos a los que llamamos mitología. No son sino el modo en el que esa gente antigua se planteó una explicación de por qué el universo es como es. Explicación imprecisa y errónea, porque surgió de una percepción fragmentada de la realidad.

Ahí es donde brilla lo que nos enseña la Torá y lo que el judaísmo entendió sobre el tiempo desde hace milenios. La sorprendente genialidad de los textos sagrados judíos nos demuestra que, aun en esa antigüedad y con todos los límites que eso podía implicar, los israelitas de antaño entendieron las nociones básicas de la historia.

Con ello, sentaron las bases para distanciarse de la mitología y, sobre todo, para entender que la realidad es una sola, porque tiene una sola coherencia que se sustenta en que hay un solo D-os.

En las nociones israelitas sobre el tiempo fue donde la humanidad dejó de pensar en mitos, y comenzó a hablar de historia.

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Enlace Judío –¿Qué está haciendo la Universidad Hebraica para solucionar la crisis de maestros de hebreo en México? ¿Qué tan bien se enseña el hebreo en América Latina? ¿Qué diferencia hay entre el proceso de una lengua materna y el de un segundo idioma?

Nos responde Dafna Saslavsky, directora del Departamento de Hebreo de la Universidad Hebraica de México, quien ha dedicado su vida a la educación, la educación judía y al aprendizaje del hebreo.

En una entrevista exclusiva a Enlace Judío, realizada con motivo del II Coloquio Internacional de Hebreo, Saslavsky refleja su pasión por el hebreo, su lengua madre. Aborda su importancia como segundo idioma, así como los diversos desafíos en la enseñanza del hebreo en los colegios de la red judía en México.

El idioma es un elemento fundamental en la formación de una identidad. Como tal, el hebreo es parte de la esencia de la cultura, la historia y la religión judía, la conexión con Israel y con el mundo judío”, subraya.

“El hebreo es especial porque es un idioma milenario en constante transformación. Actualmente, el hebreo hablado con sus modismos no tiene nada que ver con el de cientos o miles de años”, asegura Saslavsky.

¿Qué diferencia hay entre el proceso de una lengua materna y el de un segundo idioma?

El factor principal para entender las diferencias tiene que ver con la cantidad de exposición al idioma. Mientras más estás expuesto a un idioma más se puede convertir en tu primera o segunda lengua que se comporta como lengua principal. Por el contrario, ante una menor exposición, la persona se aleja del idioma y este se vuelve una lengua extranjera, explica.

Una persona bilingüe se expone a dos idiomas con la misma calidad y cantidad. En este caso, la segunda lengua se vuelve como la primera. Tiene que ver con cuánto escuchas el idioma en un ambiente natural para que un idioma se convierta en primera lengua.

El idioma se aprende de manera “desordenada” o “caótica”. Sin embargo, cuando se aprende en el marco escolar muy ordenado, tiende a perderse la naturalidad del mismo, señala.

Si el objetivo es que el hebreo se comporte como segunda lengua y no como lengua extranjera, Saslavsky destaca la importancia de exponer a los estudiantes al idioma.

Para ello, los programas de aprendizaje deben tener un enfoque funcional y fomentar el uso del idioma. Los materiales deben ser auténticos y ricos en información de manera que conecten a los alumnos con Israel y con el judaísmo.

“Los docentes deben promover el aprendizaje de manera amena y dinámica”, sugiere Saslavsky.

Sostiene que el liderazgo de los colegios o institutos tiene un importante papel en la exposición al idioma: la toma de decisiones de directores y coordinadores, revisión de las políticas de lengua y el lugar que se le da al hebreo.

En este sentido, el Departamento de Hebreo de la Universidad Hebraica lidera una campaña con los colegios de la red judía en México con el apoyo de las diversas organizaciones activas en la comunidad para introducir cambios en el aprendizaje del hebreo.

¿Qué tan bien se enseña el hebreo en América Latina?

En el pasado, América Latina era líder en la enseñanza del hebreo, especialmente en Argentina y México. Posteriormente el nivel de enseñanza deterioró y, como resultado, actualmente existe una escasez de maestros de hebreo capacitados con un buen conocimiento del idioma. Es un círculo vicioso, dice.

Señala que en los últimos 8 años la Universidad Hebraica, aunada a la Organización Sionista Mundial, el Ministerio de la Diáspora de Israel y Keren Hayesod entre otras organizaciones se han enfocado en el empoderamiento del hebreo y eso se verá reflejado en los colegios.

Recientemente, el Departamento de Hebreo evaluó el nivel del idioma de 1,200 alumnos de quinto y sexto de primaria de los colegios judíos en base a una escala estadounidense de niveles estandarizados creada por American Council on the Teaching of Foreign Languages (ACTFL) que se centra en la evaluación de maestros, alumnos y programas de estudio.

El objetivo es que alumnos de quinto y sexto de primaria logren completar el nivel de principiantes y puedan ingresar a la secundaria con un nivel intermedio para seguir avanzando.

“Tenemos buenos recursos, mucha motivación y buenas alianzas”, expresa Saslavsky. “Enfrentamos varios desafíos tras un retroceso de dos años marcado por la pandemia de COVID que se ve reflejado en las evaluaciones de lectura y escritura del hebreo a diferencia de la expresión oral, en la que se registró una mejoría debido a la exposición al Zoom porque lo que hacían los alumnos era escuchar y hablar”.

¿Qué está haciendo la Universidad Hebraica para solucionar la crisis de maestros de hebreo en México?

Además de una contante revisión de estrategias y programas para la enseñanza del hebreo, la Hebraica ha lanzado el programa Ofek (Horizonte) para la formación de educadores judíos a fin de solucionar a largo plazo la escasez de docentes en los colegios de la red judía.

Un segundo programa de un año y medio de formación como maestro del idioma es Hebrew Fellows, destinado a personas que dominan el hebreo y subsidiado por la Fundación Pincus, la Organización Sionista Mundial y Keren Hayesod, entre otras organizaciones.

El programa está subsidiado al 100 por ciento y pagado como sueldo adicional a los integrantes a fin de atraer a maestros de hebreo.

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Enlace Judío – Un empleado de una tienda de conveniencia en una gasolinera en Rishon Lezion, en el centro de Israel, fue acusado de apuñalar a una mujer después de que ella se quejó de que el café que le había preparado estaba frío, informó The Times of Israel.

בגלל ויכוח על קפה חם: כתב אישום הוגש נגד העובד בחנות בתחנת דלק שדקר לקוחה | תיעוד האירוע@daniel_elazar
(צילום: דוברות המשטרה) pic.twitter.com/3aD2w4saYh

— כאן חדשות (@kann_news) September 1, 2022

El incidente ocurrió el lunes y la Policía de Israel presentó cargos penales contra el sujeto el jueves.

Las imágenes de la cámara de seguridad del incidente mostraron a la mujer quejándose con el comerciante de que el café que le había preparado estaba frío.

Los dos comenzaron a discutir cuando la mujer le exigió que calentara el café o le diera uno nuevo mientras que el empleado se negó.

Cuando la mujer comenzó a preguntarle su nombre y detalles, él le arrojó la taza y la persiguió fuera de la tienda.

Según los cargos, luego atacó a la mujer con una botella rota y la apuñaló.

La mujer fue llevada al Centro Médico Wolfson en Holon poco después del incidente en condición moderada.

El sospechoso fue arrestado e identificado por la Policía de Israel como un residente de Holon de unos 20 años.

La policía ha solicitado que permanezca bajo custodia hasta el final de los procedimientos judiciales.

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Enlace Judío México e Israel – En una carta especial enviada al Congreso Judío Latinoamericano, el primer ministro del Estado de Israel, Yair Lapid, celebró la realización del Foro Latinoamericano de Combate al Antisemitismo, que tuvo lugar en Buenos Aires el pasado mes de julio.

En la misiva el premier israelí agradeció la posibilidad de trabajar desde el el Ministerio de Relaciones Exteriores de su país junto al CJL para llevar adelante el evento: “Fue un verdadero ejemplo de cómo podemos unirnos para llevar el compromiso de la lucha contra el antisemitismo a la práctica, y estamos enormemente agradecidos por esta sociedad”.

El mes pasado más de 300 de funcionarios, legisladores, magistrados y líderes latinoamericanos se reunieron en la capital argentina para trabajar sobre los discursos de odio y desarrollar de manera conjunta estrategias para combatirlos.

Deborah Lipstadt, enviada especial para el monitoreo y la lucha contra el antisemitismo del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Dani Dayan, presidente de Yad Vashem, Fernando Lottenberg, comisionado para el monitoreo y la lucha contra el antisemitismo de la OEA, fueron algunos de los referentes internacionales que estuvieron presentes. Además, como parte del evento, los presidentes de Boca Juniors y River Plate, Jorge Ameal y Jorge Brito, firmaron en conjunto un compromiso para combatir el odio en el fútbol y adhirieron a la definición de antisemitismo de la IHRA.

“Gracias en gran parte a sus esfuerzos, el Foro logró reunir a importantes líderes de toda América Latina y promover la adopción de la definición de antisemitismo de la IHRA: dos pasos que tendrán un impacto continuo en la lucha continua contra una de las más antiguas expresiones de odio”, finalizó el premier israelí en la sentida carta.


 

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Enlace Judío México e Israel – El judío de origen ruso Kirill Petrenko tiene el puesto más prestigioso de la música. Es el director de la mejor orquesta del mundo, la Filarmónica de Berlín. Petrenko dirige a la legendaria agrupación desde 2019. Nació en Omsk (Rusia), de padre y madre judíos y se siente muy vinculado a Israel donde residen muchos de sus familiares.

Kirill Petrenko nació en febrero de 1972 por lo que acaba de cumplir 50 años. Su localidad natal fue Omsk en Siberia a 2.700 kilómetros al este de Moscú. Omsk es la séptima ciudad más poblada de Rusia. Su padre, judío de ucrania, era violinista de la Sinfónica de Omsk con la que tocaba con frecuencia obras de Shostakovich. Su madre, judía rusa, era musicóloga. Kirill desarrolló su pasión por la música asistiendo a los conciertos desde niño.

En 1990 con 18 años de edad se trasladó a Austria a Feldkirch, cerca de Bregenz, al ser contratado su padre como violinista en la Sinfónica de Vorarlberg. Desde entonces ha vivido en Austria y Alemania. Estudio piano en el Conservatorio de Feldkirch y dirección de orquesta en la Universidad de Viena. Sus profesores fueron Myung-Whun Chung, Edward Downes, Péter Eötvös, Ferdinand Leitner y Semyon Bychkov.

Hizo su debut en 1995 dirigiendo una ópera de Britten en Vorarlberg. De 1999 a 2002 fue director de la ópera de Meiningen, una pequeña población de Alemania en Thuringia. Curiosamente el primer director de la Filarmónica de Berlin, Bulow, también fue director en Meiningen. Con la misma orquesta de Petrenko, Bulow estrenó la Cuarta de Brahms.

En 2002 con 30 años de edad, Petrenko fue nombrado director de la Komische Oper de Berlín, la tercera ópera de Berlín. Petrenko se enamoró de Berlín y de su ambiente musical como capital mundial de la música.

En 2013, 2014 y 2015 dirigió el ciclo de “El Anillo del Nibelungo” en Bayreuth, el templo sagrado wagneriano. En 2015 inició su andadura como director de la ópera de Munich, un puesto de enorme importancia en uno de los teatros más prestigiosos.

En Junio de 2015 saltó la bomba. La Filarmónica de Berlín anunció su nombramiento como director titular a partir de 2019. Petrenko no estaba entre la lista de favoritos. Los preferidos eran el alemán Thielemann, por el sector de más edad de la orquesta y el letón Andris Nelsons por los más jóvenes. También se barajaban los nombres del eterno perdedor el israelí Daniel Barenboim y el venezolano Dudamel.

Ganó Petrenko como candidato de consenso. Fue una elección rara. Todos los directores anteriores de la Filarmónica de Berlín habían sido personas muy carismáticas: Bulow, Nikisch, Furtwangler Karajan, Abbado y Rattle. Petrenko era muy poco o nada conocido fuera de Alemania. Quizás lo más sorprendente de todo fue que era su primer puesto como director de una orquesta sinfónica. Es nombrado por primera vez para una orquesta y el nombramiento es para la mejor del mundo.

A lo anterior se añade que era y es tímido. No tiene dotes de comunicador ni para las relaciones sociales. Odia dar entrevistas, permanece alejado de los focos mediáticos y no se sabe absolutamente nada de su vida privada ni siquiera si está casado o tiene hijos. Tampoco tiene perfiles en las redes sociales.

Otra singularidad es que a Petrenko no le gusta grabar discos y apenas hay grabaciones suyas. Es todo lo contrario que su antecesor, Karajan, que adoraba los yates, aviones privados, y coches de lujo. Karajan era una máquina de hacer dinero. Para Petrenko el dinero no tiene importancia.

A Petrenko sólo le importa la música. Ha declarado que su verdadera patria es la música. En lo personal lo único que le interesa son las relaciones con sus músicos a los que trata como compañeros iguales.

Sus conocimientos musicales son impresionantes. Ha leído muchísimo sobre música y escucha siempre música. Le gusta oír las versiones de otros directores y conocer obras nuevas aunque no las vaya a dirigir. Durante la pandemia se dedicó a profundizar en los últimos cuartetos de Beethoven.

Petrenko es un romántico, un enamorado total de la música, al que sólo le cautiva la música emocional y pasional. Apenas dirige música anterior a Mozart y no parece sentirse a gusto con Mozart, Haydn o el primer Beethoven. Tampoco le interesa la música del siglo XXI. Su repertorio es parecido al de Karajan y no tiene nada que ver con el de Rattle.

Petrenko, al igual que Barenboim, ha apoyado la carrera del joven director israelí Lahav Shani (Tel Aviv 1989), titular de la Filarmónica de Israel desde 2018. Cuando Petrenko no pudo dirigir el concierto de Nochevieja de la Filarmónica de Israel, el 31 de Diciembre de 2021, fue Shani quien le sustituyo.

En su rueda de prensa de anuncio del nombramiento, Petrenko dijo que no daría entrevistas pero que sería entrevistado en el Digital Konzert Hall de la Filarmónica de Berlín. Lo ha cumplido y la paradoja es que ha pasado a ser el director del que hay más entrevistas disponibles en Internet. Hay 33 entrevistas en la plataforma de la orquesta berlinesa. Son una absoluta joya. A Petrenko le entrevistan sus propios músicos, los componentes de la orquesta. Explica los programas que va a ofrecer y nos enamora con su enorme sabiduría, su entusiasmo y su pasión. Pero todo está dicho con modestia sin alardear de nada.

Es una Wikipedia andante de música y se nota todo lo que ha leído sobre música y lo mucho que ha escuchado. Ningún director pretérito ni presente muestra una erudición tal. Es un verdadero sabio.

Transmitir emoción a la música es algo consustancial a Kirill Petrenko. Dirige con pasión, con emoción pero a la vez con una técnica perfecta. Cuida los detalles, ensaya sin límites y logra siempre la perfección. Mientras dirige, su cuerpo y su cara son profundamente expresivos.

El primer judío de la historia en dirigir la mejor orquesta del mundo. Y parece que será para muchos años. Un regalo de sabiduría, amor y pasión por la humanidad. Escuchar a Petrenko nos llena por dentro, nos hace mejores personas.

Petrenko dirige un fragmento de la Sexta Sinfonía de Tchaikovsky con la Filarmónica de Berlín:

El autor es Presidente de la Asociación Europea de Abogados.


 

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Enlace Judío – Pues llega septiembre y con este mes, los habitantes de la Ciudad de México no sólo nos preparamos para celebrar —junto a todo el país— las fiestas nacionales, sino también para enfrentar la temporada de temblores. Porque —todos aquí lo sabemos bien— los temblores no se pueden predecir, pero en septiembre siempre tiembla. Y de qué manera.

La Ciudad de México tiene una relación interesante con los temblores. Generalmente, los de magnitud considerable ocurren en las costas de Guerrero, Oaxaca o Chiapas, y llegan a la zona del Valle de México (donde está la capital) muy debilitados. Sin embargo, se intensifican justo en la ciudad porque nuestro subsuelo es acuoso, así que si en las montañas aledañas son de apenas 3 o 4 grados Richter, en la zona centro de la urbe se sienten de 6 o 7 grados. A veces más.

Pero esos temblores son rutina. Ningún capitalino diría que fue un terremoto.

Terremotos, lo que se dice “terremotos”, los de 1985 y 2017. El de hace 37 años fue de 8.1 grados Richter; el de hace cinco años, de 7.1. Sin embargo, este último fue más intenso porque el epicentro fue demasiado cerca (apenas en la zona de Cuernavaca, a menos de una hora de la CDMX) y a poca profundidad. Así que esos 7.1 grados llegaron directo a la capital, y resultaron terriblemente devastadores.

Tengo el extraño privilegio de decir que estuve presente en los dos. Ya sé de qué se trata esa sensación de que el suelo se mueve bajo tus pies de un modo que te pone el corazón en la garganta y el Shemá en la boca.

Es una impresión muy rara. Durante los primeros segundos, no sabes qué está pasando. Sí, sabes que está temblando, pero tu cerebro se tarda unos segundos extras en poder decir “esto es un terremoto”. Y para cuando lo logras articular, es porque —naturalmente— estás colapsando de miedo.

Pero bueno. Uno que está entrenado en estos avatares puede tomarse las cosas con cierta frialdad. Por ejemplo, yo sé que la zona en la que vivo es muy segura si se trata de terremotos. Ni en 1985 ni en 2017 se cayó nada en mi barrio. Todo resistió sorprendentemente, porque —se sabe— está muy bien construido. Es un lugar seguro para vivir un episodio de estos.

Saberlo me sirvió en 2017, cuando el temblor me sorprendió profundamente dormido. Había trabajado hasta altas horas de la madrugada, y ese día podía dormir toda la mañana, más bien hasta la hora de la comida. El temblor comenzó a eso de la 1 pm, y no sentí su inicio. Desperté hasta que vino el golpe trepidatorio que lanzó a uno de mis gatos hacia el piso, y a mí me puso a brincar en la cama mientras escuchaba cómo los libreros de un cuarto y de la sala se desparramaban por todo el piso.

Lo primero que cruzó por mi cabeza fue el obligado “¿y esto qué es?”; lo segundo fue un incrédulo “no puede ser, esto es una broma”. Y es que el terremoto de 2017 cayó justo en el mismo día que el de 1985: 19 de septiembre. De hecho, a las 11 de la mañana se había hecho un simulacro nacional (protocolo obligado cada que se repite esa fecha). Escuché la alarma sísmica y a los vecinos muy obedientes comenzando a desalojar el edificio, pero pues ese era mi horario para descansar así que ni me paré de la cama. Desperté dos horas después todo desconcertado mientras sentía cómo todo el edificio brincaba de arriba abajo sin control alguno.

Y lo tercero que pensé fue “rayos, este está peor que el del 85”. Porque es cierto: estuvo peor. Palabra de testigo presencial de los dos temblores.

Lo demás fue lo lógico: esperar a que parara, ver los destrozos en mi casa —libreros y libros en el piso nada más, afortunadamente—, visitar a mi mamá para ver que estuviera bien, y luego empezar a recibir noticias de los destrozos en la zona aledaña a mi entrañable barrio. Allí sí hubo problemas. El famoso Colegio Rebsamen colapsó dejando un saldo mortal de varios niños fallecidos, y eso fue a unas 8 cuadras de mi casa. Centros comerciales, edificios, casas, negocios, también se contaron entre las estructuras colapsadas, muchas de ellas con gente dentro y dejando trágicos saldos fatales.

En fin. Un terremoto, con todas sus cosas trágicas inevitables.

Hubo otro detalle que me llamó la atención en esa difícil experiencia de hace cinco años: me llevé un sustazo, pero algo de mí se mantuvo tranquilo todo el tiempo. ¿Por qué? Porque, para bien o para mal, sabía lo que estaba pasando. Es decir, sabía que era un terremoto. O sea, un reacomodo de placas tectónicas, algo que sucede porque pues la naturaleza así es y ni modo.

Y eso es lo que me empuja hacia la reflexión: ¿Te imaginas lo que podía sentir un ser humano en la antigüedad? Hace miles de años, la gente simplemente no tenía idea de por qué ocurrían los temblores de tierra. Menos aún, los terremotos.

Eso significa que la experiencia era infinitamente más terrorífica para ellos, porque no sabían qué era lo que estaba pasando.

El judaísmo lo resolvió de un modo muy elegante, a partir de una reflexión que a primera vista parece lógica, pero que cobra una dimensión muy especial cuando te ha tocado vivir este tipo de momentos.

Dice el Salmo 29: “Voz del Señor que quebranta los cedros; quebrantó el Señor los cedros del Líbano. Los hizo saltar como becerros; al Líbano y al Sirión como hijos de búfalos. Voz del Señor que derrama llamas de fuego; voz del Señor que hace temblar el desierto. Hace temblar el Señor el desierto de Kadesh. Voz del Señor que desgaja las encinas y desnuda los bosques. En su templo todo proclama su gloria” (versículos 5-9).

Los antiguos israelitas vieron en los temblores una poderosa manifestación del poder de la naturaleza que, en última instancia, no es sino la expresión física del poder de D-os. Dicho de otro modo, un recordatorio de la pequeñez y la insignificancia de nuestra fuerza, imposible de comparar a la de cualquier fenómeno natural.

Lo que puede hacer el planeta Tierra nos abruma, nos oblitera. ¿Cuánto más lo que puede hacer D-os, el Creador de la tierra en la que vivimos?

Esta idea está directamente emparentada con las durísimas preguntas que le hace D-os a Job, cuando debate con él acerca del destino del ser humano: “Ahora ciñe como varón tus lomos; yo te preguntaré y tú me contestarás. ¿Dónde estabas tú cuando yo fundaba la tierra? Házmelo saber, si tienes inteligencia. ¿Quién ordenó sus medidas, si lo sabes? ¿O quién extendió sobre ella el cordel? ¿Sobre qué están fundadas sus bases? ¿O quién puso su piedra angular cuando alababan todas las estrellas del alba y se regocijaban todos los hijos de D-os? ¿Quién encerró con puertas el mar cuando se derramaba saliéndose de su seno, cuando puse yo nubes por vestidura suya, y por su faja oscuridad, y establecí sobre él mi decreto? Le puse puertas y cerrojo, y dije: Hast6a aquí llegarás, y no pasarás adelante, y ahí parará el orgullo de tus olas” (Job 38:3-11).

Este pasaje —tan hermoso como intenso— refleja algo que parece muy lógico, pero también algo francamente sorprendente. Lo lógico es la forma en la que se expone la ignorancia del ser humano. La naturaleza, el universo, la realidad misma, está llena de cosas que no entendemos.

Pero en medio de esa aceptación tácita de nuestra ignorancia, hay una sorprendente lucidez que nos puede dejar sorprendidos una vez que la percibimos: el autor de este impactante pasaje sabe que la naturaleza tiene una mecánica, que funciona bajo reglas bien definidas. Algo que, en sus términos generales, la humanidad apenas empezó a entender cabalmente gracias a Nicolás Copérnico y a Galileo Galilei. Ellos fueron los que sentaron las bases para la comprensión mecanicista de la naturaleza. Luego Kepler remató el asunto.

Bueno, pues resulta que 25 siglos antes que esos astrónomos, un autor judío ya tiene perfectamente clara la idea de que la naturaleza no es un cúmulo de arbitrariedades. Que ni siquiera D-os (diría Einstein) juega a los dados, encomendando las cosas al puro azar, sino que todo tiene una razón de ser.

Aún las cosas que más nos pueden desconcertar y espantar, como los terremotos.

Las implicaciones de esta noción son tremendas, porque superan por mucho la clásica idea del “D-os sabe por qué hace las cosas”.

En esa frase —que sin duda ha calmado y consolado a mucha gente a lo largo de la historia—, lo que hay es una aceptación de que existe un sentido en las cosas que para nosotros carecen de lógica. Como el miedo o el sufrimiento que puede traer un cataclismo. Pero eso expresión —por otro lado— también es una aceptación de que los seres humanos simplemente no entendemos qué es lo que está pasando.

En cambio, la lucidez con la que el libro de Job nos dice que la tierra, el cielo y los maros se comportan bajo reglas bien definidas por D-os, nos llevan a la conclusión obligada de que existe una realidad consistente más allá de nuestras percepciones.

Bajo esa lógica, el creyente sincero confía en D-os no porque reconozca que “hay un plan” detrás de todas las cosas que no entiende, sino porque entiende que hay algo más complejo, profundo, importante e indestructible: la realidad misma.

¿Por qué es tan importante esa diferencia? ¿Qué ventaja hay en saber que detrás de cada duda nuestra hay no nada más un plan, sino una realidad?

Sencillo: que la realidad sí la podemos estudiar, justo porque funciona con reglas inamovibles.

Los planes de D-os sólo podríamos estudiarlos sí Él, en su infinita bondad, se place en revelárnoslos. Pero la propia Torá dice que las cosas secretas pertenecen sólo a Él, dando por sentado con ello que hay conocimientos a los que nosotros nunca tendremos acceso.

En cambio, la realidad está allí, frente a nosotros, funcionando como el Creador decidió que debía funcionar, y lista para que armados de paciencia y dedicación, la estudiemos.

Y sí: los terremotos también son parte de esa realidad. También se pueden estudiar. Dan miedo, espantan, nos ponen con los nervios de punta, pero hoy por hoy sabemos de qué se tratan, y gracias a ello sabemos que no son la furia de ninguna deidad telúrica —como lo explicaría un griego de hace 28 siglos— y que, por lo tanto, no hay necesidad de que sacrifiquemos cientos de vacas para que no vuelva a temblar. Sólo hay que continuar con nuestra investigación de la naturaleza para aprender a construir casas y edificios que no se caigan, o para aprender a no construir nuestras ciudades en los lugares por donde pasa alguna falla.

Cuando somos capaces de descifrar esos arcanos de la naturaleza, es justo cuando con mayor sinceridad podemos repasar las palabras del salmista y recordar la inconmensurable grandeza de D-os, y nuestra pequeñez absoluta en este universo.

Y una vez más, al igual que nuestros ancestros, temblar ante su Voz.

Sobre todo cuando esta hace temblar la tierra.

En septiembre, por ejemplo.


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Enlace Judío México e Israel – Los casos de viruela del mono están aumentando en los EE. UU., lo que genera miedo y confusión sobre la forma en que se propaga el virus, quién está en riesgo y dónde buscar tratamiento.

“Después de vivir una pandemia que alteró la vida durante los últimos años, es comprensible que las personas estén nerviosas por las enfermedades infecciosas poco comunes que aparecen en la comunidad”, comentó el Dr. Michael Ben-Aderet, director asociado de Epidemiología del Hospital en Cedars-Sinai.

Sin embargo, a diferencia del COVID-19, el virus de la viruela del simio no es nuevo. Los científicos lo han estudiado durante décadas. La viruela del mono también tiene muchas menos probabilidades que el COVID-19 de causar una enfermedad grave o la muerte, aunque las lesiones características pueden ser dolorosas y las dos o tres semanas de aislamiento requeridas son perjudiciales para los pacientes.

“Es importante prestar atención a las guías de salud pública y lo que realmente se está presentando durante este brote”, dijo Ben-Aderet, especialista en enfermedades infecciosas en la primera línea de COVID-19 y la viruela del mono. “Hay muchos rumores, verdades a medias e ideas equivocadas, por lo que es importante que las personas conozcan los hechos y cómo protegerse”.

Ben-Aderet se reunió con el Newsroom de Cedars-Sinai para definir algunos de los mitos de la viruela del simio:

MITO #1: Puedo contraer la viruela del mono en los asientos de los baños públicos o al probarme ropa en las tiendas

Estudios científicos han demostrado que el virus de la viruela símica puede permanecer en las superficies y esto podría haber sido una fuente de transmisión en brotes anteriores. Pero en su mayor parte, la viruela del simio no se ha propagado de esta manera en este momento y no en un entorno público.

“La realidad es que con el brote actual, casi el 100 % de los casos provienen del contacto sostenido de piel con piel con alguien que tiene lesiones de viruela del simio”, dijo Ben-Aderet. “No hay datos en este momento que muestren que cualquier otra vía de transmisión sea una preocupación para el público en general”.

Contraer el virus del asiento del inodoro o la ropa de cama es un problema solo para quienes están en contacto cercano y constante con alguien que está activamente infectado, como un miembro del hogar, dijo Ben-Aderet.

MITO #2: Con el regreso a la escuela, los niños corren un alto riesgo de contraer la viruela del mono

Durante el brote actual, ha habido pocos casos pediátricos de viruela del simio y ningún informe sobre la propagación del virus entre niños, dijo Ben-Aderet. Por el momento, el riesgo para los niños sigue siendo bajo.

En teoría, esto podría cambiar si un número significativo de niños contrae el virus.

“El temor es que la viruela del simio se propague entre los niños en entornos cerrados como gimnasios, instalaciones deportivas para jóvenes o guarderías”, dijo Ben-Aderet. “En este momento, en este brote no lo hemos visto”.

MITO #3: Solo los hombres homosexuales pueden contraer la viruela del mono

La gran mayoría de los casos en el brote actual han ocurrido entre hombres homosexuales, pero eso se debe a que el virus se propaga a través del contacto íntimo y prolongado de piel con piel, y los hombres homosexuales tienden a tener un contacto físico cercano con otros hombres homosexuales.

“Hemos visto viruela del simio en todo tipo de poblaciones en el pasado. El hecho de que lo estemos viendo en una comunidad en particular ahora no significa que se quedará allí”, dijo Ben-Aderet. “Todos los demás son igual de susceptibles”.

MITO #4: La viruela del mono es una infección de transmisión sexual (ITS)

La actividad sexual puede propagar el virus, pero no es la única vía de transmisión. La viruela del mono se puede propagar a través de cualquier tipo de contacto prolongado, incluso entre niños o animales, a diferencia de la sífilis y otras ITS, que se propagan principalmente a través del sexo.

“Aunque la viruela del simio actúa como una ITS, no lo es”, dijo Ben-Aderet. “Los condones y otras formas tradicionales de prevenir las ITS no evitarán que las personas se contagien del virus. Eso hace que sea aún más difícil de controlar”.

La mejor manera de detener la propagación de la viruela del simio es evitar el contacto cercano con alguien que tenga síntomas o con objetos que tengan rastros de los fluidos corporales de una persona infectada y mantener una buena higiene de manos con agua y jabón o desinfectante para manos.

La Organización Mundial de la Salud también recomienda que los hombres que tienen sexo con hombres deben limitar su número de parejas sexuales por el momento.

MITO #5: Si contraigo la viruela del mono, debo ir al departamento de emergencias de inmediato

La mayoría de los casos de viruela del mono son leves y se resuelven solos sin ninguna intervención.

“La viruela del mono rara vez es una emergencia, y los departamentos de emergencia deben reservarse para las personas que experimentan condiciones que amenacen su vida”, explicó Ben-Aderet.

Cualquier persona que piense que podría tener viruela del simio debe comunicarse con su médico para realizar una prueba y un diagnóstico. Muchos centros de atención de urgencia también pueden diagnosticar la viruela del simio, pero es mejor llamar con anticipación antes de visitar el lugar.

Para las personas que experimentan síntomas graves de viruela del simio, como una erupción muy dolorosa, o aquellos con alto riesgo de desarrollar síntomas graves (incluidos los pacientes inmunocomprometidos), su médico de atención primaria o un profesional de atención de urgencias puede recetar un medicamento en investigación llamado tecovirimat. Debido a que esta terapia experimental no ha sido aprobada por la Administración de Drogas y Alimentos de los EE. UU. (FDA) para su uso en la viruela símica, los proveedores que recetan este medicamento deben completar una documentación especial que se enviará a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) y programar dos citas de seguimiento con el paciente.

MITO #6: La vacuna contra la viruela del simio es peligrosa para las personas con eczema

La vacuna, que escasea y está disponible bajo una autorización de uso de emergencia de la FDA para prevenir la viruela del simio, existe desde hace años y ha pasado por muchas iteraciones. Las generaciones anteriores de la vacuna presentaban muchos efectos secundarios.

La vacuna que ahora se usa principalmente para prevenir la viruela del simio, a menudo llamada JYNNEOS, tiene menos probabilidades de causar efectos adversos, incluso en personas con eczema (dermatitis atópica). Ben-Aderet aconsejó que cualquier persona que tenga inquietudes acerca de la vacuna debe hablar con su médico.


 

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Enlace Judío – El fabricante de aviones Boeing firmó este jueves un contrato con el Departamento de Defensa de EE. UU. para suministrar a Israel cuatro aviones de reabastecimiento de combustible KC-46, informó The Times of Israel.

El avión polivalente hace posible el reabastecimiento de combustible en el aire para aviones de combate y otros aviones, pero también se puede utilizar para el transporte militar.

Para Israel, los aviones se consideran necesarios para realizar posibles ataques importantes contra objetivos en Irán, a unos 2,000 kilómetros de Israel y muy lejos del rango de vuelo normal de los aviones israelíes.

Los aviones KC-45 reemplazarán la flota actual de viejos aviones de reabastecimiento de combustible de la Fuerza Aérea de Israel, que incluye KC-130 Hercules y Boeing 707 convertidos.

Los nuevos aviones están programados para llegar en 2025 como muy pronto. Israel ha pedido que se adelante esta fecha, lo que requeriría que EE. UU. renuncie a su lugar en la fila para recibir aviones de Boeing, pero hasta ahora Washington ha rechazado la solicitud.

El acuerdo le costará a Israel 927 millones de dólares, según el contrato, y el dinero proviene de los 3.8 mil millones que Israel recibe anualmente de Washington como parte del memorando de entendimiento de 10 años entre los dos países.

Según el acuerdo, Israel también tiene la opción de comprar cuatro aviones KC-46 más en el futuro.

El ministro de Defensa, Benny Gantz, elogió la firma del contrato y dijo que era “una prueba más de la alianza y las relaciones estratégicas” entre los sistemas de defensa israelíes y estadounidenses.

“Los aviones de reabastecimiento que estamos comprando, junto con la adquisición de un nuevo escuadrón F-35, helicópteros de transporte pesado, submarinos y armamento avanzado, servirán a las FDI en medio de los enormes desafíos, cercanos y lejanos, que están a punto de enfrentar”, dijo Gantz en un comunicado.

El primer KC-46 se entregó a la Fuerza Aérea de EE. UU. en 2019 y el servicio ordenó 179 de los aviones, que se entregarán en 2027.

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Enlace Judío – Es época electoral en Israel. Al igual que en el resto del mundo, cuando se aproxima el tiempo de votar, las promesas aparecen por todos lados. “Haremos esto”, “haremos lo otro”, exclaman los políticos sin considerar las limitaciones presupuestarias o la viabilidad de los proyectos.

Cualquier cosa que digan debe de tomarse con reservas en cuanto a su implementación. Sin embargo, el discurso que se maneja vale la pena ser analizado. Los políticos hablan sobre lo que le interesa a la población. Las promesas son, hasta cierto punto, un termómetro social. ¿De qué temas se hablan? ¿Qué temas se omiten?

Tendencias

Para la mayoría del mundo internacional, cuando se habla de política israelí, se piensa inmediatamente sobre el conflicto con los palestinos. No obstante, al interior del país, el tema cada vez pierde más fuerza sobre el electorado.

Mientras hace veinte años era el tema que dominaba la agenda política, en las votaciones de 2019 el 22% de los israelíes consideraron que los temas principales alrededor de la misma eran el conflicto con los palestinos” o “las amenazas a la seguridad y cómo manejarlas. Dos años después, en la pasada ronda de elecciones, sólo 4% de la ciudadanía juzgó que la elección se trataba de esos temas.

Las cinco rondas de elecciones que han dominado la agenda política israelí desde hace tres años han sido caracterizadas como un referendo de Benjamín Netanyahu. Bibi, que gobernó de 1996 a 1999 y de 2009 a 2021, es sin duda la figura política más importante en Israel.

Entre todos los temas que lo rodean — su línea dura de liderazgo, su preferencia por el statu quo y sus incendiarios discursos — el más determinante para su polarización ante el electorado es su figura como expresión de la identidad judía en el Estado. Según una investigación de los académicos Michal Shamir y Gideon Rahat, la tensión entre judaísmo y democracia es la fuerza impulsora detrás de los votantes.

Discursos

En su larga campaña electoral, el discurso de Netanyahu se ha centrado en dividir. Según él, aquellos que votan por sus partidos son los representantes verdaderos del judaísmo ante el Estado, mientras quienes se oponen son “traidores” o “amantes de los árabes”.

En 2019, su chauvinismo llegó hasta un punto en el que dijo que Israel no era un país de todos sus ciudadanos, sino que sólo del pueblo judío. Con las tensiones étnicas creciendo en Israel, manifestándose con violencia y cobrando vidas, el discurso divisivo es agudamente peligroso.

Además de la narrativa divisoria entre judíos y árabes, las elecciones han indicado una fractura dentro del mismo judaísmo israelí. El bloque de Netanyahu, aliado con los partidos más religiosos, ha luchado por una homogeneidad judía en dónde la ortodoxia gobierna sobre las ramas conservadoras y reformistas.

Las controversias por la propuesta sección mixta del Kotel, en la que hombres y mujeres podrían rezar juntos, y la operación de autobuses en el día santo de Shabat, han controlado la lista de preocupaciones de los partidos ultraortodoxos.

Promesas

Con ganas de animar al bloque secular, la ministra de Transporte Merav Michaeli prometió examinar la posibilidad de que la nueva línea de tren ligero que va del norte de Israel a Tel Aviv pueda operar en Shabat.

En caso de implementarse, sería una de las rupturas más radicales al statu quo secular-ortodoxo en la historia del país. Yair Lapid y su gobierno se han mantenido relativamente pasivos ante sus promesas de secularización en la vida pública.

La posible aprobación del tren ligero en Shabat solidificaría al gobierno actual como uno que cambió la cara de la identidad judía en el Estado, priorizando la libertad de transporte todos sus ciudadanos sobre el statu quo ultraortodoxo. Asimismo, incrementaría su popularidad entre un público secular que podría salir motivado a las casillas. A ver si cumplen la promesa.

 


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Enlace Judío – Un hombre judío asesinado en Francia en un presunto ataque antisemita fue enterrado este jueves en la ciudad de Be’er Sheba, en el sur de Israel, y los dolientes pidieron al gobierno francés que tome medidas, informó The Times of Israel.

Varias docenas de personas, incluidos familiares y miembros de la comunidad judía francesa, asistieron al funeral de Eyal Haddad, de 34 años, asesinado en Longperrier, al noreste de París, el 20 de agosto.

“Compartimos el dolor de la familia y el dolor de la comunidad judía en Francia”, dijo Yehuda Deri, rabino principal de Be’er Sheba.

Aunque Haddad era originario de Djerba, Túnez, tiene familia en Be’er Sheba. Haddad también tenía ciudadanía israelí.

“Esto no es solo una tragedia para la familia Haddad, sino para toda la comunidad. El antisemitismo en Francia no perdona a ningún judío allí. Eyal era un hombre compasivo y amable”, dijo Deri en su elogio. “Hago un llamado al gobierno francés para que detenga estos horribles crímenes de odio”.

“Era un alma pura, siempre dando caridad”, dijo su hermana Hannah al Canal 12. “Toda la casa estaba llena de felicidad, ahora lo han matado, ¿qué puedo decir?”

“Quiero que la verdad salga a la luz en el juicio”, dijo.

El vecino de Haddad, un hombre musulmán identificado como Mohamed Dridi, confesó haberlo matado con un hacha e intentado quemar y enterrar el cuerpo, según un comunicado de esta semana de la Oficina Nacional de Vigilancia contra el Antisemitismo (BNVCA) de Francia.

BNVCA dijo que el sospechoso se entregó a la policía y les dijo a los agentes que Haddad, que vivía al lado de él, le debía 100 euros y no se los había devuelto. Más tarde también confesó que había matado a Haddad porque era judío.

A pesar de la confesión de Dridi de haber matado a Haddad porque era judío, los investigadores también estaban investigando la posibilidad de que el ataque no fuera fundamentalmente de naturaleza antisemita sino el resultado de una discusión entre los dos hombres, que aparentemente se conocían bien.

El hermano de Haddad, Elior, insistió en que el asesinato fue antisemita.

“Lo mataron porque era judío. No debía dinero ni nada”, dijo Elior al Canal 12. “El asesino trabajaba para él”.

El ministro de Asuntos de la Diáspora, Najman Shai, en un tuit el miércoles, pidió a Francia que tome medidas enérgicas contra el creciente antisemitismo tras el “impactante” asesinato.

“Este probable asesinato impulsado por el antisemitismo se une a una serie de horribles incidentes antisemitas que recientemente han golpeado a la comunidad judía en Francia”, dijo Shai.

“Pido a las autoridades de Francia que lleven al asesino ante la justicia e impongan la sentencia más severa”, agregó, compartiendo sus condolencias con los familiares de Haddad en Israel y en Francia.

A pesar de las protestas de la comunidad judía por la brutalidad del asesinato y la aparente motivación antisemita, las autoridades francesas han guardado silencio sobre el caso, lo que provocó la ira de los grupos judíos y del rabino principal de Túnez.

Las autoridades francesas han sido objeto de un importante escrutinio y críticas en los últimos años por no reconocer la naturaleza antisemita de los crímenes contra los judíos en el país y no procesarlos adecuadamente.

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Enlace Judío – La cancillería de Israel ha intensificado sus llamados a los israelíes para que eviten viajar a la ciudad ucraniana de Umán este Rosh Hashaná, advirtiendo a los fieles que visitarla representaría un “riesgo real e inmediato para la vida” a la luz de la guerra en curso entre Rusia y Ucrania, informó The Times of Israel.

Una declaración de la Oficina del Primer Ministro también instó a los ciudadanos a “no ir a la ciudad de Umán durante las próximas festividades judías debido al peligro mortal que representa ingresar al área de combate”.

La ciudad de Umán, que es el lugar de entierro del fundador del movimiento jasídico de Breslev en el siglo XVIII, el rabino Najman, normalmente atrae a unos 30,000 visitantes, la mayoría de ellos de Israel, durante la festividad de Rosh Hashaná.

El Ministerio de Relaciones Exteriores advirtió a los peregrinos que “eviten por completo viajar al territorio ucraniano, incluida la ciudad de Umán y sus alrededores”.

“Hace unos días se dispararon cohetes en el área de Umán, matando a una persona, hiriendo a otras y causando daños”, señaló.

La declaración agregó que “la volátil situación de seguridad incluye el peligro de bombardeos aéreos o ataques con misiles contra pueblos y territorios civiles, incluso en el oeste y el centro del país”.

El ministerio también dijo que la embajada de Israel en Kiev “no tiene una presencia constante” en Ucrania y que, en caso de emergencia, puede haber muy poca asistencia para los ciudadanos.

El lunes, el destacado rabino Moshe Azman, con sede en Kiev, aconsejó a los fieles judíos que no viajaran a la ciudad ucraniana para la peregrinación anual debido a los peligros que representa la invasión rusa.

“Tengo miedo de que pueda haber provocaciones. ¿Quién se responsabilizará de la vida de las personas?”, dijo Azmán.

En julio, la Embajada de Ucrania en Israel emitió una advertencia contra los viajes para la peregrinación.

El embajador de Ucrania en Israel, Yevgen Korniychuk, dijo a los medios de comunicación religiosos que el país “no puede garantizar la seguridad de los peregrinos” debido a la ofensiva rusa, y pidió a los fieles que “recen por la victoria de Ucrania”.

La alcaldesa de Umán, Iryna Pletnyova, también trató de disuadir a los peregrinos de llegar, enfatizando que la ciudad no tenía la capacidad de brindar protección a las decenas de miles de visitantes potenciales.

Además de las preocupaciones de seguridad, viajar a Ucrania es logísticamente difícil ya que las aerolíneas no operan vuelos comerciales al país.

La única forma de ingresar al país es a través de una frontera terrestre, en tren o autobús. La frontera con Moldavia presenta la ruta más rápida a Umán.

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