Enlace Judío – Estamos frente al tercer invierno de la pandemia de COVID-19, además de 3 virus que circulan en esta temporada del año: coronavirus, influenza y el virus respiratorio sincitial.

Carol Perelman, divulgadora científica y colaboradora de Enlace Judío conversa sobre estos 3 virus y los cuidados necesarios con el Dr. Francisco Moreno Sánchez, jefe de Medicina Interna del Hospital ABC.

En México se ha visto un aumento de casos de influenza en adultos y del virus respiratorio sincitial principalmente en niños.

¿Cómo cuidarnos en este invierno?

Ahora que supuestamente volvemos a la normalidad tras el descenso de los casos de COVID-19, el Dr. Moreno Sánchez señala que hemos aprendido a vivir con el virus con la ayuda de las vacunas y el cuidado de cada persona.

Sin embargo, destaca la importancia de evitar contagios y proteger a personas vulnerables debido a factores como edad avanzada, obesidad, diabetes, hipertensión, problemas pulmonares, y un cuadro de COVID severo que haya dejado una secuela respiratoria. En estos casos, las medidas de cuidado deben ser mayores que las de otras personas. “Lo que debemos hacer es cuidar a los vulnerables cuidándote tú”. De igual manera, dice, “es importante conocer nuestro estado físico para decidir si podemos tomar ciertos riesgos o debemos cuidarnos más”.

Asimismo, recomienda continuar el uso de cubrebocas en espacios cerrados, mal ventilados y aglomerados. “Aquel que usa cubrebocas no solo se cuida a sí mismo, sino también a los demás. Veo el cubrebocas como un instrumento que podría ayudar a la disminución de los virus durante el periodo de invierno cuando generalmente aumenta el contagio”, afirma.

Como regla, sugiere continuar con reuniones pequeñas, al aire libre o mantener la ventilación en espacios cerrados para evitar infecciones respiratorias.

¿Qué pruebas debemos hacer para distinguir si tenemos COVID, influenza o el virus respiratorio sincitial y quién debe someterse a ellas?

El virus respiratorio sincitial, que produce tos y espasmo bronquial, es más agresivo en los niños. “Estamos viendo que probablemente debido a la falta de exposición a este virus en los últimos dos años, el sistema inmune ya no estaba acostumbrado a verlo cada año. Ahora que tenemos menores cuidados, se empieza a ver una mayor circulación del virus. Pacientes con virus respiratorio sincitial son tratados sintomáticamente”, explica.

En cuanto a la influenza, el virus causa dolor de cabeza, ojos, dolores musculares e incluso tensión muscular.

“El contagio de ambas enfermedades ocurre cuando la persona está sintomática. Si una persona tiene síntomas, sobretodo de un cuadro respiratorio, vale la pena checarse, principalmente si va a un lugar donde convivirá con muchos individuos. Tenemos que entender que contagiar a más gente no solo implica que pones en riesgo a más gente, sino que estamos perpetuando la circulación del virus“, recalca.

En el caso de COVID-19, esto es aún más preocupante, dice, porque si el virus sigue circulando podría aparecer una variante que nos vuelva a echar para atrás.

Si hay datos respiratorios, Moreno Sánchez recomienda hacerse la prueba de antígenos de COVID-19, así como una prueba rápida de influenza para un tratamiento temprano y así evitar hospitalizaciones o un cuadro de enfermedad grave.

Subraya que por el momento no parece existir una nueva variante predominante de COVID-19, aunque se ha visto un porcentaje más alto de las subvariantes de Ómicron BQ 1 y BQ 1.1, que no parecen causar mayores hospitalizaciones ni mayores fallecimientos.

Signos de alarma para buscar atención médica

Los signos de alarma para acudir al médico en el caso de la influenza y el virus respiratorio sincitial son fiebre persistente, agitación y un silbido en el pecho al expirar, que se observa principalmente en niños. Esto se debe a un espasmo bronquial. En adultos, fiebre más de 3 días, descenso de oxigenación y aumento de la frecuencia cardíaca.

Vacunación

Ya existe una vacuna bivalente para COVID-19, aunque hay estudios contradictorios sobre qué tanto esta vacuna protege contra la enfermedad ante las subvariantes de Ómicron. Sin embargo, la vacuna evita enfermar gravemente. “Está claro que a partir de cierto tiempo, la persona empieza a perder inmunidad. Hay una vacuna bivalente que no la tenemos en México por razones inexplicables”, comenta ֵMoreno Sánchez.

Recomienda aplicarse la vacuna trivalente y cuatrivalente contra la influenza, aunque la segunda se aplica en México solo en el sector privado.

Aún no hay una vacuna contra el virus respiratorio sincitial, pero estas vacunas ya se encuentran en fase 3 y probablemente estén disponibles para el público el próximo año.

“En vista de los protocolos existentes en la India y China, no me extrañaría que en 2023 tuviéramos una vacuna trivalente y una vacuna nasal que prevendría el contagio de la enfermedad”, dice.

Estima que ante la pandemia de coronavirus aparecerán grandes avances tecnológicos, nuevos antivirales y vacunas.

“COVID se está comportando cada vez más como influenza, aunque aún no se sabe si tendremos que vacunarnos una vez al año”, agrega.”Esto depende de cómo evolucione la pandemia. Estamos llegando a la fase en que tendremos que convivir con estos virus y aprender a cuidarnos porque las medidas de prevención son iguales para las tres enfermedades virales”.

Aislamiento

Por lo general, podemos contagiar durante los primeros cinco días de la enfermedad aunque los síntomas duren una semana o más. Sin embargo, en el caso de COVID-19, Moreno Sánchez aún recomienda un aislamiento de siete días.

Afirma que una persona puede tener los 3 virus al mismo tiempo. Además, es posible contraer el virus por segunda vez, como en el caso de las variantes de influenza y COVID-19.

Las secuelas

Muchos virus dejan secuelas. El síndrome de fatiga crónica, la fibromialgia o mononucleosis crónica son trastornos que ahora se comprenden mejor porque se están viendo con COVID largo. “No sabemos muchas cosas de lo que sucede con el cuerpo humano en la interacción viral. Por eso tampoco es bueno enfermarse y también es bueno cuidarse en esta época”, explica.

El mensaje es “cuídate, conócete, aliméntate bien, duerme bien, vacúnate y usa cubrebocas”.

“Si estás enfermo, no vayas a trabajar, no vayas a la fiesta. Cuídate porque puedes contagiar”, concluye Moreno Sánchez.

Recientemente se publicó su libro “Historias de una pandemia”, un relato sobre el coronavirus y sus consecuencias en diferentes partes del mundo. En el último capítulo deja unos renglones en blanco para que el lector escriba su historia porque como él lo expresa, “todos hemos vivido esta historia de diferentes formas”.

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