Conversando con el enemigo es el libro más reciente de Henrique Cymerman y en este, encontramos el relato en primera persona de un hombre que se ha estado arriesgando a morir en nombre del deber de informar. El autor nos habla de su infancia, su decisión de hacer aliyá (emigrar) a Israel, el conflicto árabe-israelí, las conspiraciones internacionales y las sorprendentes conversaciones con el Papa Francisco, que en 2013 lo nombró Ángel de la Paz.

En las páginas de su nuevo libro, Cymerman, un profesional al que los portugueses están acostumbrados a ver como corresponsal de la SIC en Israel, nos lleva a un emocionante viaje hasta el ojo del huracán. Radicado en Israel desde finales de la década de 1970, éste, es un retrato único de quien vive en una región en conflicto. No nos oculta nada: ni los misteriosos amaneceres en los que se cruzó con los jefes árabes, ni las entrevistas que le concedieron figuras como Yasser Arafat, Yitzhak Shamir y Osama Bin Laden, ni los momentos en que llegó a temer por su vida.
Sin embargo, este no es solo un libro en el que el autor se arriesga a la muerte y en el que se insinúan “secretos de Estado” y las más intrincadas conspiraciones internacionales, sino que nos muestra cómo el diálogo puede derribar las barreras del odio entre naciones. En una lección de diplomacia para la memoria futura, el autor nos habla de historia, política, humanidad y esperanza.
Todavía hay espacio para curiosidades sobre personalidades temidas y adoradas, desde los líderes del Estado Islámico (o Daesh) hasta Lionel Messi, desde Al Gore hasta Jorge Sampaio, y para reflejar, una vez más, su amistad con el Papa Francisco, que le concedió la primera entrevista de un sumo pontífice a un medio no perteneciente a la Iglesia Católica.
En entrevista para Enlace Judío,  Cymerman nos habla sobre sus más increíbles experiencias como periodista.
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