Enlace Judío – La Policía de Israel dijo este viernes que las fuerzas permanecerán desplegadas en Jerusalén mientras continúa la persecución de una presunta célula terrorista que llevó a cabo un doble atentado con bomba en Jerusalén el miércoles, matando a un adolescente e hiriendo a más de 20 personas, informó The Times of Israel.

La Policía dijo en un comunicado que sus oficiales, junto con el Shin Bet, están buscando a “cualquier persona involucrada” en el ataque terrorista.

Inmediatamente después del atentado mortal, se ordenó que se aumentara el número de oficiales en Jerusalén, especialmente en áreas concurridas.

La Policía dijo el viernes que su objetivo era aumentar la presencia policial en toda la ciudad para dar “una sensación de seguridad a todos los residentes y visitantes de la ciudad”.

Debía haber un énfasis particular en los lugares de culto, centros comerciales y sitios de recreación que se esperaba que estuvieran ocupados durante el fin de semana.

La Policía dijo que si bien el público no debe entrar en pánico, debe permanecer alerta e informar cualquier actividad o persona sospechosa.

El jefe de la Policía de Israel, Kobi Shabtai, visitó el centro de Jerusalén, acompañado por el jefe de policía local Doron Turgeman.

Shabtai fue informado sobre el “despliegue extenso y la mayor preparación” de la fuerza para el próximo fin de semana, dijo la policía.

Un estudiante de Yeshivá de 16 años, Aryeh Schupak, murió y 22 personas resultaron heridas en los dos ataques, incluida una persona en estado crítico y otras tres en estado grave a moderado, según funcionarios médicos.

La primera explosión ocurrió cerca de la entrada principal de Jerusalén en Givat Shaul, poco después de las 7 a.m., una hora pico de tránsito.

La segunda explosión ocurrió poco después de las 7:30 a.m., en el área de Ramot, donde se encuentran avenidas con mucho tráfico, en el noroeste de la capital.

Schupak, quien murió en el primer atentado, tenía doble ciudadanía israelí-canadiense.

Desde la Policía dijeron que los “dos artefactos explosivos potentes y de alta calidad [capaces de] un alto nivel de daño” estaban escondidos detrás de la parada de autobús y en un arbusto. Los dispositivos detonados remotamente estaban llenos de clavos y cojinetes de bolas para maximizar las bajas, según los oficiales de policía.

Ningún grupo terrorista se ha atribuido la responsabilidad de los ataques.

El jueves, un grupo de hackers iraníes publicó un video del ataque en Telegram diciendo que provenía de una cámara de vigilancia utilizada por una importante organización de seguridad israelí.

Los detalles de la investigación sobre el atentado fueron puestos bajo clasificación por un tribunal a petición de la policía.

Debido a la naturaleza de los ataques, con dos bombas casi idénticas que explotaron con media hora de diferencia en dos paradas de autobús, el vicejefe de la policía Sigal Bar Zvi dijo el miércoles que sospechaba que había una célula organizada detrás, en lugar de una sola persona.

Los atentados se produjeron durante un momento de alta tensión, luego de una serie de ataques palestinos que dejaron 30 muertos en Israel y Judea y Samaria (Cisjordania) desde principios de año, incluido el ataque del miércoles.

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