Enlace Judío.- Catar ha ejercido una fuerte presión sobre el grupo terrorista Hamás, que gobierna Gaza, para que se mantenga en calma mientras el estado del Golfo alberga la Copa del Mundo, según un informe del viernes.
El enviado de Catar a Gaza, Mohammad al-Emadi, le dijo a Hamás que mantuviera la calma en la Franja hasta el final del torneo, informó la emisora pública Kan.
Al-Emadi fue enviado a Gaza al comienzo de la Copa del Mundo y ha regresado a Catar, según el informe. Catar es un partidario financiero de la Franja y tiene fuertes lazos con Hamás, publicó The Times of Israel.
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Los cataríes también intentaron comunicar el mensaje a la Jihad Islámica Palestina, un grupo terrorista rival en Gaza.
Los funcionarios israelíes temían que los grupos de Gaza lanzaran proyectiles a principios de esta semana tras la muerte de dos terroristas de alto rango en enfrentamientos en Judea y Samaria, incluido un alto comandante de campo de la Jihad Islámica Palestina.
Las tensiones entre Israel y los palestinos han sido altas después de una serie de ataques terroristas mortales contra Israel en el último año y operaciones semi nocturnas de las FDI en Judea y Samaria para acabar con las amenazas.
Catar ha tratado de mostrar su mejor cara en el escenario mundial al albergar la Copa del Mundo, que se complicaría por la violencia de sus socios en Gaza.
El estado del Golfo rico en petróleo tiene influencia en Gaza debido a su apoyo financiero y su relación con Hamás.
Doha también tiene vínculos de bajo nivel con Israel, si bien no comparten relaciones diplomáticas formales.
Con aprobación de Israel, Catar ha proporcionado periódicamente desde 2018 millones de dólares en efectivo a Hamás para pagar el combustible de la planta de energía de la Franja, financiar proyectos de infraestructura, pagar salarios del gobierno y brindar ayuda a decenas de miles de familias de Gaza.
Catar también ha desempeñado un papel en la negociación de altos el fuego entre Israel y Hamás que han restablecido la calma después de varios conflictos importantes e innumerables escaramuzas menores.
La participación israelí en la Copa del Mundo de Catar también ha sido tensa y marcada por complicaciones.
Después de largas negociaciones, Israel y Catar llegaron a un acuerdo para que los seguidores volaran desde Israel al estado del Golfo en los primeros vuelos directos entre los dos países.
Miles de seguidores israelíes asistieron a los juegos, pero siguió la controversia cuando los aficionados árabes hostigaron repetidamente a los periodistas israelíes y los espectadores realizaron protestas a favor de los palestinos.
Funcionarios israelíes advirtieron a los ciudadanos que mantuvieran un perfil bajo, algunos dijeron que habían sido abordados, acosados o algo peor. “La atmósfera hacia nosotros es hostil”, dijo un espectador israelí.
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