Enlace Judío.- El presidente de Otzma Yehudit, Itamar Ben-Gvir, se reunió con el presidente Isaac Herzog el miércoles por la mañana, quien aprovechó la oportunidad para expresar las preocupaciones del público y el mundo judío en general respecto a sus intenciones como Ministro de Seguridad Nacional.
Herzog pidió a Ben-Gvir que calmara la tormenta que se avecinaba y que estuviera atento a las críticas del público israelí con respecto a la cláusula de racismo, el trato a los grupos minoritarios en la sociedad y, en particular, el trato a la población árabe y a las personas LGBTQ+.
En respuesta, el presidente de Otzma Yehudit aseguró al presidente que tiene la intención de servir a toda la población de Israel en su papel de ministro de seguridad nacional.
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Agregó que en los últimos días había hablado con sus amigos y socios en el Partido Sionista Religioso y recibió garantías de ellos de que no tenían la intención de señalar o dañar a ninguna población minoritaria en el país.
En noviembre, durante una reunión con representantes de Shas, Herzog advirtió que Ben-Gvir es “temido en todo el mundo”, durante una conversación en la que pensó que su micrófono estaba apagado.
Si bien la Casa Blanca ha intentado ser más sutil y callada sobre su incomodidad con el ascenso del Sionismo Religioso y los líderes del partido Otzma Yehudit, el demócrata Chris Van Hollen, quien tiene una relación cercana con el presidente estadounidense Joe Biden, describió las preocupaciones de Washington de forma más directa, publicó The Times of Israel.
Van Hollen reveló que la administración no está esperando que el gobierno del primer ministro designado Benjamin Netanyahu preste juramento para comenzar a actuar.
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