Enlace Judío.- El ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, y el asesor de seguridad nacional, Tzachi Hanegbi, se reunieron con sus homólogos estadounidenses en Washington el lunes, si bien la conversación también se centró en la violencia en curso en Judea y Samaria, según The Times of Israel.
Los altos funcionarios israelíes sostuvieron reuniones trabajabando para recuperar una situación de normalidad, incluso cuando la administración Biden estaba considerando prohibir la entrada a un ministro israelí.
La delegación israelí se reunió con el secretario de Estado Antony Blinken, y el asesor de seguridad nacional Jake Sullivan, para hablar sobre la búsqueda de energía nuclear por parte de Irán y su amenaza para la región.
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El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, dijo que Blinken, Dermer y Hanegbi discutieron los lazos entre Estados Unidos e Israel, el compromiso de evitar que Irán desarrolle un arma nuclear y el trabajo conjunto para promover la “cooperación mutua sobre las amenazas planteadas por Irán”, así como la violencia reciente en Judea y Samaria e Israel y “la necesidad de que todas las partes tomen medidas para restablecer la calma y reducir las tensiones”.
Dermer y Hanegbi y una delegación israelí de alto rango de representantes de agencias de defensa e inteligencia también se unieron a Sullivan para una reunión del Grupo Consultivo Estratégico de EE. UU. e Israel, un grupo bilateral especial establecido por primera vez en 2021 para permitir esfuerzos de colaboración entre EE.UU e Israel con el objeto de impedir que Irán obtenga armas nucleares.
Los asistentes a la reunión revisaron el progreso de Irán en su programa nuclear “con gran preocupación” y prometieron “mejorar la coordinación de las medidas para evitar que Irán adquiera un arma nuclear y disuadir aún más las actividades regionales hostiles de Irán”.
Los funcionarios también discutieron los esfuerzos de EE. UU. para agregar signatarios regionales a los Acuerdos de Abraham, los acuerdos de normalización negociados por EE. UU. entre Israel, los Emiratos Árabes Unidos, Baréin y Marruecos, firmados por primera vez en 2020, así como otros marcos diplomáticos como el Foro del Néguev.
Las reuniones se produjeron días después de que el legislador de extrema derecha Bezalel Smotrich, ministro de Finanzas de Israel, causara un gran revuelo internacional al llamar a “eliminar” la ciudad palestina de Huwara, un punto de conflicto, y aunque luego se retractó del comentario, puso en cuestión el esperado viaje del ministro a Estados Unidos esta semana.
Smotrich dijo que el comentario fue un “desliz de la lengua” hecho en una “tormenta de emociones” y se produjo después de que colonos extremistas arrasaron Huwara el 26 de febrero e incendiaron casas y automóviles, lo que resultó en la muerte de un palestino en circunstancias poco claras, y varios gravemente heridos. El alboroto se produjo en respuesta al asesinato terrorista de los hermanos israelíes Hillel e Igal Yaniv en un tiroteo palestino en la ciudad del área de Nablus horas antes.
Smotrich tiene previsto visitar Washington para una conferencia de Bonos de Israel del 12 al 14 de marzo, aunque varios grupos judíos han hecho llamados de boicot a raíz de sus comentarios.
La Casa Blanca dijo el jueves que los funcionarios del gobierno estadounidense no se reunirán con Smotrich durante su visita.
La Casa Blanca ha estado discutiendo si otorgar o no a Smotrich una visa para un próximo viaje a Estados Unidos, pero es poco probable que finalmente bloqueen su visita.
El embajador de EE. UU. en Israel, Tom Nides, negó haber hecho comentarios de que “si pudiera, lo arrojaría del avión a Washington”. Sin embargo, tanto Smotrich como el primer ministro Benjamin Netanyahu aludieron en sus comentarios al enviado.
En una serie de tuits celebrando la aclaración de Smotrich de sus comentarios, Netanyahu escribió que “ninguno de nosotros está libre de errores, incluidos los diplomáticos extranjeros”, un golpe apenas velado a Nides.
Y el mismo Smotrich tuiteó: “No estoy enojado y estoy convencido de que no tenía la intención de incitar a mi asesinato diciendo que debería ser arrojado del avión, al igual que yo no quería dañar a inocentes cuando dije que Huwara debería ser aniquilado. A veces usamos expresiones fuertes sin sentido literal para transmitir un mensaje contundente. Le pasa a todo el mundo”.
A finales de esta semana, el secretario de Defensa de EE. UU., Lloyd Austin, tiene previsto visitar Israel, un viaje que la oficina del ministro de Defensa, Yoav Gallant, anunció tras una conversación la semana pasada.
Durante esa llamada telefónica, Austin instó a Gallant a reducir las tensiones en Judea y Samaria después de una redada antiterrorista mortal en la ciudad de Nablus, en el norte de los territorios, aunque la violencia ha alcanzado un punto álgido durante la última semana después de la llamada.
Austin llegará a Israel tras la visita del jefe de Estado Mayor Conjunto de EE. UU., el general Mark Milley, que estuvo en Israel la semana pasada para conversar con altos funcionarios de seguridad sobre Irán y otros temas de seguridad.
En un comunicado, el Ministerio de Defensa dijo que hablaron de la cooperación “para evitar que Irán obtenga un arma nuclear”, así como de los “avances de seguridad”.
