Las fuerzas de seguridad se mantuvieron hoy en alerta en en Jerusalén y Judea y Samaria (Cisjordania) cuando decenas de miles de musulmanes participaron en oraciones masivas del segundo viernes de Ramadán, informó The Times of Israel.

La Guardia Fronteriza desplegó 2300 soldados en Jerusalén y sus alrededores y en Judea y Samaria, dijo la fuerza en un comunicado.

Según estimaciones oficiales, más de 100000 personas participaron en las oraciones en el Monte del Templo, incluidos unos 52000 palestinos que ingresaron a Israel desde Judea y Samaria.

El mes sagrado musulmán, que comenzó el jueves y finalizará el 21 de abril, a menudo presenta tensiones elevadas entre israelíes y palestinos, con fricciones ya altas este año en Jerusalén y en Judea y Samaria luego de meses de violencia mortal.

Si bien no hubo informes de violencia en el lugar sagrado de la Ciudad Vieja, los videos mostraron a los fieles palestinos cantando su apoyo al jefe del ala militar de Hamás, Muhammad Deif, durante las oraciones matutinas en la mezquita de Al-Aqsa.

Para los musulmanes palestinos, el culto en la mezquita, el tercer lugar más sagrado del Islam, es una parte central del mes. Los judíos reverencian el mismo sitio que el Monte del Templo, el lugar más sagrado del judaísmo como ubicación de los templos antiguos.

El ejército ha aliviado algunas restricciones de movimiento para los palestinos de Judea y Samaria y Gaza para permitir que mujeres, niños y algunos hombres recen allí sin permiso.

El comisionado de policía de Israel, Kobi Shabtai, dijo que el comienzo “relativamente tranquilo” del mes sagrado se debió al trabajo profesional de las fuerzas de seguridad, después de asistir a una evaluación de seguridad con el comandante de la policía de Jerusalén, Doron Turgeman, en el Muro de los Lamentos.

“Es necesario continuar con la preparación operativa inteligente y preservar la situación existente en el campo tanto como sea posible”, dijo Shabtai.

La policía dijo en un comunicado que ha habido un aumento en la incitación de las organizaciones terroristas en las redes sociales, incluidos los esfuerzos para representar falsamente un peligro para los lugares sagrados.

La policía prometió mantener la libertad de culto y abordar “cualquier intento de utilizar el mes de Ramadán o los lugares sagrados para alterar el orden, incitar o apoyar el terrorismo”.

El viernes pasado, las oraciones en Jerusalén transcurrieron sin mayores incidentes, sin embargo, la policía detuvo a un hombre sospechoso de incitación por colgar la bandera de una organización terrorista en el complejo.

Algunos funcionarios advirtieron que este Ramadán puede ser el más difícil de manejar en años, ya que las tensiones se mantuvieron altas en medio de un ciclo de incursiones israelíes mortales en Judea y Samaria y ataques terroristas palestinos mortales, así como un aumento en la violencia de los colonos.

Israel y la Autoridad Palestina celebraron dos cumbres regionales antes del Ramadán, donde se comprometieron a reducir las tensiones durante el mes sagrado.

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