Una cadena de televisión transmitió el domingo imágenes que muestran a una mujer a la que se le niega la entrada a un autobús del transporte público en Ashdod porque los hombres ultraortodoxos a bordo insistieron en que era solo para hombres, informó The Times of Israel.

En el video, la mujer intentaba abordar un autobús de la línea número 80 operado por la empresa Electra Afikim.

“Solo para hombres”, se puede escuchar a un hombre decir mientras la mujer se detiene en la puerta principal del autobús.

“Ve a pie o toma otra fila”, le aconseja el chofer.

Cuando el conductor le preguntó que ella tiene derecho a abordar, respondió: “¿Qué puedo decir? No es mi problema”.

La red no identificó a la mujer ni explicó por qué llevaba una cámara oculta para registrar el incidente. Un hecho similar ocurrió en la misma línea de autobús la semana pasada.

Según la ley israelí, la segregación de género es ilegal en los espacios públicos, incluido el transporte.

Los partidos ultraortodoxos han exigido durante mucho tiempo una legislación que permita la segregación de género en eventos financiados con fondos públicos.

A modo de explicación, Electra Afikim dijo que los conductores a veces impiden que las mujeres se suban a los autobuses para evitar que sean atacadas por pasajeros ultraortodoxos, pero dijo que acabará con el fenómeno.

La semana pasada, a una niña de 17 años en Ashdod se le negó el acceso a un autobús número 80 que quería llevar a casa, informó en ese momento el sitio web local de noticias Ashdodi.

La niña y otra mujer intentaron abordar el autobús junto con un hombre, pero solo a este último se le permitió ingresar, mientras que el conductor les dijo que el autobús era solo para hombres.

El sitio web de Ashdodi preguntó en el puesto de información de Electra Afikim en la estación central de autobuses de Ashdod sobre el autobús número 80, pero los trabajadores insistieron en que no hay tal línea operando en la ciudad, a pesar de que la ruta apareció en el propio sitio de información de Electra Afikim.

Después de más consultas, Electra Afikim le dijo a Ashdodi que la línea había sido coordinada especialmente por un alto funcionario de la compañía en nombre de los estudiantes de Yeshivá ultraortodoxos, y que era una “línea privada” solo para hombres.

Como servicio de transporte público, la línea de autobuses no puede negar legalmente el paso a las mujeres.

Según el Canal 12, ha habido incidentes similares en otras rutas en Ashdod, la quinta ciudad más grande del país y que ha visto crecer rápidamente su población haredi en los últimos años. A las mujeres también se les ha negado la entrada a los autobuses en las líneas 74 y 79, según el informe.

La cadena también informó que a pocos metros de la parada de autobús donde le negaron el ingreso a la mujer, los rostros de mujeres y niñas en un gran cartel fueron vandalizados. La destrucción de imágenes de mujeres en espacios públicos es otra táctica adoptada por algunos activistas ultraortodoxos.

La abogada Gili Zinger, directora ejecutiva adjunta del grupo de derechos de la Red de Mujeres de Israel, dijo al Canal 12 que los incidentes de discriminación contra las mujeres en los autobuses en Ashdod son “parte de un fenómeno que se vuelve más extremo y se expande cada día”.

“Son cosas que antes no pasaban. Que se entienda que esto va contra la ley, también es un delito”, subrayó.

Electra Afikim respondió al informe del Canal 12 en un comunicado diciendo que “la empresa está en contra de la exclusión de las mujeres, y luego del incidente, se convocó al conductor para una charla y se aclararon las instrucciones entre todos los conductores”.

La empresa dijo que cuando los pasajeros del autobús actúan contra las mujeres, “el conductor, por temor a su seguridad [la de las mujeres], a veces ofrece otra alternativa”.

Dijo que los conductores ahora han recibido instrucciones de que cuando se enfrenten a un dilema similar, deben detener el autobús y llamar a la policía.

El Ministerio de Transporte dijo en una respuesta que “está prohibido cualquier tipo de discriminación contra los pasajeros en el transporte público”.

El ministerio agregó que instruirá a las empresas de transporte público para que sean diligentes en el cumplimiento de las regulaciones y “tomarán medidas serias sobre cualquier informe que reciban al respecto”.

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