El expresidente de los EE. UU., Donald Trump, prometió permanecer en la carrera presidencial de 2024 incluso si es condenado por múltiples cargos federales por mal manejo de documentos clasificados.
Los 37 cargos de la acusación, publicados el viernes y centrados en su presunto mal manejo de materiales clasificados, exponen al expresidente a un ajuste de cuentas mucho más severo que los cargos de mala conducta personal, política y comercial.
“Nunca me iré”, dijo Trump a Politico a bordo de su avión el sábado. “Mira, si me hubiera ido, me habría ido antes de la carrera presidencial en 2016. Fue difícil. En teoría, eso no era factible”.
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La ley de los EE. UU. no prohíbe que Trump se postule mientras está acusado o incluso si es declarado culpable y sentenciado a prisión.
Trump también afirmó, sin evidencia, que fue objeto de persecución política, y le dijo al fiscal especial Jack Smith: “Estos son matones y degenerados que me persiguen”.
La aparición de Trump el martes por la tarde en Miami marcará la segunda vez en tantos meses frente a un juez por cargos penales.
Pero a diferencia de un caso de Nueva York que algunos analistas legales ridiculizaron como relativamente trivial, el primer enjuiciamiento de un expresidente por parte del Departamento de Justicia se refiere a una conducta que, según los fiscales, puso en peligro la seguridad nacional y que involucra cargos de la Ley de Espionaje que conllevan la amenaza de una sentencia de prisión significativa en caso de un convicción.
El expresidente dijo que creía que no sería condenado y que no necesitaría un acuerdo de culpabilidad, pero estaba abierto a firmar uno en el que “me paguen algunos daños”.
Si gana las elecciones de 2024, Trump dijo que no usará los poderes presidenciales para perdonarse a sí mismo y afirmó: “No hice nada malo”.
Se espera que Trump parta hacia Miami el lunes y pase el resto del día en Florida, rodeado de asesores. Después de su comparecencia ante el tribunal, regresará a Nueva Jersey, donde tiene programado un evento de prensa para responder públicamente a los cargos.
Los partidarios de Trump también planeaban cargar autobuses para dirigirse a Miami desde otras partes de Florida, lo que genera preocupación para la policía, que se está preparando para posibles disturbios alrededor del juzgado.
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