El creador de Nas Daily alguna vez fue un chico árabe común y corriente que vivía en una aldea de Israel. Hoy, sus videos acumulan 20 mil millones de impresiones y han sido vistos por más de 3% de la población mundial. En su historia de éxito hay un elemento poco conocido: todo empezó con la ayuda de un matrimonio judío. 

 

Puede ser que el nombre de Nuseir Yassin no le diga demasiado a mucha gente, pero muchos millones de personas han visto los videos de Nas Daily, el proyecto que lo llevó de ser un chico palestino convencional que vivía en una pequeña ciudad israelí, a convertirse en un fenómeno viral de los medios digitales.

“Básicamente, se puede decir que el principio de mi vida fue cuando dejé Israel”, dice Yassin en entrevista exclusiva de Iván Tellez para Enlace Judío. Y podría parecer paradójico que un joven israelí haya tenido que dejar la “startup nation”, una de las capitales de la tecnología, para hacer una carrera exitosa, primero como programador y, después, como el fundador de una compañía de medios y tecnología con base en Dubai y Singapur.

La historia la ha contado él mismo en algunos de sus famosos videos. Yassin se volvió amigo de un chico estadounidense, cuya madre, Martha Jacobs, solía pasar los veranos en Israel, como voluntaria, enseñando inglés a chicos como él.

Por insistencia de su hijo, Martha Jacobs decidió invitar a Yassin a pasar un mes en Estados Unidos, todo pagado.

“Fue mi primer viaje solo y mi primer viaje a Estados Unidos”, recuerda Yassin, quien sigue sin entender “por qué la gente hace estas cosas”.

El gesto de bondad del matrimonio judío por un chico palestino musulmán lo sigue conmoviendo hasta el día de hoy, en que se ha convertido en un exitoso empresario cuya imagen le ha dado la vuelta al mundo muchas veces.

Pero viajar a Estados Unidos fue solo el comienzo. Algún destello, algún brillo habrá visto en su mirada Martha que, además de albergarlo en su casa, sembró en él una semilla que terminaría por germinar. Otro de los hijos de Martha Jacobs estudiaba en Harvard. “¿Por qué no vas a visitarlo?”, le propuso, segura de que Yassin se vería deslumbrado por el imponente campus.

No se equivocaba. Yassin volvió de aquella visita con una fantasía que, gracias a la insistencia de la propia Jacobs, se volvería pronto un sueño. Un sueño que se materializaría gracias a la inteligencia y la voluntad del joven palestino: aplicar para Harvard, ser aceptado y, eventualmente, graduarse como ingeniero en sistemas.

Dos mundos nuevos

Sobre aquella estancia con los Jacobs, Yassin conserva gratos recuerdos.

“En Israel no tenía amigos judíos. Los primeros amigos judíos que tuve fue fuera de Israel (…). Me enseñaron sus tradiciones, su cultura. Me invitaron a su sinagoga. Participé en el Shabat. Hice todo con ellos y fue realmente maravilloso”.

Durante aquel primer viaje a Estados Unidos, “no solo aprendí sobre la cultura americana, también aprendí sobre la cultura judía (…). Esto cambió mi manera de pensar. Cambió totalmente mi manera de ver el mundo y me hizo realmente apreciar a otras personas”.

Ese concepto, el de las personas, el de la gente, acabaría por marcar el rumbo de su vida. “Nas”, en árabe, significa “gente”. Nas Daily, el proyecto que lo encumbró en el mundo digital, parece ser un tributo a eso, a la gente, a su complejidad y a su valor humano. Pero antes de comenzar a recorrer el mundo para construir su empresa, Yassin debía pasar por un obstáculo que para muchos otros chicos habría sido una meta en sí.

Una vez graduado como ingeniero de software en Harvard, Yassin comenzó a trabajar en una compañía estadounidense que le ofrecía un magnífico salario. Pero, según narró en un video él mismo, en algún momento se dio cuenta de que para entonces había transcurrido ya un tercio de su vida, basándose en las expectativas de longevidad promedio de los hombres en Estados Unidos.

Pasar los dos tercios faltantes detrás de un escritorio le pareció una idea insoportable. Supo que tenía que hacer algo más y, usando sus ahorros como trampolín, Yassin decidió entonces comenzar a grabar videos que tuvieran el potencial de cambiar el mundo.

La aventura comenzó como un reto: el joven se propuso grabar un video de un minuto, todos los días, durante mil días consecutivos. Recorrería diversos lugares del mundo grabando gente y contando historias inspiradoras. Así nació Nas Daily.

Pero, aun siendo palestino y musulmán, Yassin era israelí y su pasaporte le impedía entrar a 20 países. Así que, para cumplir su misión, tuvo que adquirir un pasaporte distinto. “Sé que suena terrible que Bangladesh es un país musulmán al que no le gusta Israel, pero a mucha gente en Bangladesh simplemente no le importa (…).

Para él, que ha viajado por todo el mundo y conocido a tantas personas y retratado de una manera tan sucinta la diversidad, el color y la alegría al rededor del planeta, está claro que, si bien Israel no es perfecto, muchos de los países que proscriben la entrada de los ciudadanos de aquel país podrían aprender algunas cosas del país judío.

“Tienen mucho que aprender de la tecnología, tienen mucho que aprender de computadoras, de ciencia en general. Israel no es perfecto pero hacen algunas cosas bien y muchas cosas mal… pero hacen algunas cosas bien”.

Mil días de amor y locura

Como si a la historia de Yassin le faltaran elementos dramáticos, el chico encontró el amor en su travesía. En una muy puntual línea de tiempo que está publicada en el sitio web oficial de Nas Daily puede leerse que, para el día 400 de publicar videos diarios, un millón de personas habían visto ya sus contenidos.

Una de ellas fue Alyne, quien no solo se incorporaría al equipo sino que terminaría convirtiéndose en la novia de Yassin.

Para el día 609, los algoritmos de Facebook cambiaron e hicieron que los videos de Nas Daily pudieran llegar al feed de noticias de millones de personas en todo el mundo, lo que le permitió al chico alcanzar una notoriedad global en muy poco tiempo. Para el día 1000, la marca contaba ya con casi 12 millones de seguidores.

Según ha confesado en otras entrevistas y en videos que él mismo ha producido y difundido a través de Facebook (su principal plataforma de difusión), hubo momentos durante la travesía en que estuvo a punto de flaquear. Días de enfermedad y de desámino. De cansancio extremo y sinsentido. Pero la perseverancia y el compromiso hicieron que Yassín, no solo cumpliera la meta sino que, eventualmente, terminara recaudando más de 20 millones de dólares para construir su compañía.

El éxito de Nas Daily

Actualmente, el equipo de Nas Daily cuenta con 110 miembros y asegura que sus videos tienen un alcance real y totalmente orgánico de 3.2% de la población mundial. ¿El secreto?

“Para hacer videos tienes que enfocarte un millón por ciento en lo que haces. Yo dejé mi trabajo y dediqué toda mi vida, toda mi vida a esto”.

“Entonces, así es como logré hacerlo. Fue muy difícil y sacrifiqué mucho para ello, pero mi recomendación es, si alguien quiere hacer videos, si alguien quiere contar historias, si alguien quiere hacer un proyecto, debe dedicar el 150% de su vida en eso y estar loco, psicópata por ello. Esa es la única manera de crecer”.

Su fórmula podría parecer imposible de seguir para mucha gente.

“Tienes que ser un poco psicópata para poder hacer esto durante mil días, y decirle no a la familia, decirle no a los amigos. Tienes que ser raro. Entonces, pregúntate, ¿eres raro? Mientras más raro seas es mejor”.

Nas Daily sigue publicando videos diariamente. Ahora tienen mayor producción y no todos duran solo un minuto. Yassin y Alyne anunciaron su rompimiento en una de esas piezas, y en otra, Yassin posó en el Centro Histórico de la Ciudad de México mientras un mariachi tocaba de fondo. El mundo entero ha cambiado para aquel chico inseguro que vivía en una aldea en Israel, sin conocer judíos y totalmente inconsciente de lo que llegaría a conseguir.

Sin embargo, jamás olvidó a la pareja de judíos estadounidenses que le dio el empujón que necesitaba. “Estoy muy agradecido, estoy muy agradecido de que alguien me haya dado todo esto”, dice.

La pregunta del millón: ¿cómo puede resolverse el conflicto israelí-palestino?

Creo que debemos obligar a las personas a vivir juntas. La gente no elige vivir con alguien que no le gusta por sí misma. Alguien tiene que obligarlos. Ya sea porque es más económico vivir juntos, tal vez es mejor vivir juntos. Quizá se puede ganar más si viven juntos…

“Necesitamos tener una razón para que judíos y árabes puedan vivir juntos. Entonces, yo diría que en mi aldea el 100% somos no judíos. No tenemos a gente judía. Y eso no está bien. Si yo tuviera la solución, no sería así de fácil, ¿sabes? Alguien hubiera llegado a la conclusión hace 70 años.

“Creo que el mayor problema es que la gente no está poniendo suficiente empeño. Es más fácil no tener paz que lograr la paz. Ese es el problema. El statu quo es fácil, la paz es difícil. Ahora, necesitamos hacer que el statu quo sea difícil para que la paz sea más fácil.

Siempre he estado a favor de una solución de dos Estados. No construiremos un solo país. Creo que esa es una locura. Necesitamos un país para los palestinos y un país para los israelíes.

Dentro de Israel, el 20% son árabes como yo. Nos quedamos en Israel. Palestina tiene su propio país, nosotros tenemos nuestro propio país y eso es todo. Seremos vecinos y post enemigos. Esa es mi solución. No es una innovación, no es una locura. Pero funciona, funciona”.

<em>Las opiniones, creencias y puntos de vista expresados por el autor o la autora en los artículos de opinión, y los comentarios en los mismos, no reflejan necesariamente la postura o línea editorial de Enlace Judío. Reproducción autorizada con la mención siguiente: @EnlaceJudio</em>