Otra vez la historia que parece interminable: terrorismo palestino, operativos israelíes. Otra vez familias enlutadas y “niños” palestinos armados hasta los dientes cayendo eliminados por las tropas del Estado de Israel. 

Otra vez los dimes y diretes en la prensa, la propaganda haciendo lo suyo, y el esfuerzo de las agencias judías de información para que el público conozca lo mejor posible qué es lo que realmente sucede allí.

Irving Gatell nos vuelve a recordar lo que ya ha señalado varias veces: el problema no tiene solución inmediata. No mientras el régimen iraní siga financiando a las facciones terroristas palestinas. Menos mientras la administración Biden mantenga cierta condescendencia hacia los ayatolas.

A Israel, por el momento, no le queda más alternativa que administrar el conflicto lo mejor posible, a la espera de que las cosas caigan por su propio peso en Irán. La furia de la propia sociedad iraní hace que cada vez resulte más inviable el dominio de los ayatolas, pero su colapso no es algo que vaya a darse en el corto plazo.

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