Funcionarios de la administración Biden celebraron recientemente reuniones secretas a puertas cerradas con el jefe del partido Unidad Nacional, Benny Gantz, y el ex primer ministro Naftali Bennett para discutir un posible acuerdo de normalización con Arabia Saudita, según informes en hebreo del martes, informó World Israel News.
Según se informa, la subsecretaria de Estado de los Estados Unidos para Asuntos del Cercano Oriente, Barbara Leaf, se reunió con Gantz y Bennett en los últimos días para evaluar los niveles de apoyo al acuerdo fuera de los partidos de la coalición.
La elección de Leaf de reunirse con Bennett es significativa, ya que el ex primer ministro se ha retirado de la política y ya no participa públicamente en la formulación de políticas ni encabeza ningún partido político.
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En particular, tanto Gantz como Bennett se negaron a confirmar o negar si las reuniones habían tenido lugar.
Según Noticias de Canal 12, Gantz y Bennett expresaron su apoyo al acuerdo, aunque junto con sus preocupaciones sobre la condición saudita de que se permita al Reino del Golfo establecer su propio programa nuclear civil, incluido el enriquecimiento de uranio.
El Departamento de Estado se negó a comentar sobre el informe, pero la Embajada de Estados Unidos en Jerusalén dijo que Leaf se reúne periódicamente con funcionarios israelíes para discutir “una variedad de cuestiones regionales y bilaterales”.
También se cree que Leaf se reunió brevemente con el líder de la oposición, Yair Lapid, quien expresó su desaprobación del acuerdo.
“Me opongo a cualquier acuerdo que incluya el enriquecimiento de uranio en Arabia Saudita. El acuerdo por el momento pone en peligro la seguridad de Israel y de la región. No se puede dar a Arabia Saudita cualquier nivel de enriquecimiento de uranio”, supuestamente dijo Lapid a los legisladores estadounidenses en agosto.
En declaraciones al Canal 12 de noticias el mes pasado, Lapid enfatizó que “no tiene ningún problema con un programa nuclear civil. Hay países de Oriente Medio que tienen programas nucleares civiles. Lo que no tienen es enriquecimiento de uranio en su suelo.
“Esto es lo que está sobre la mesa ahora y no se puede permitir que esté sobre la mesa. Israel no puede aceptar el enriquecimiento de uranio en Arabia Saudita porque pone en peligro la seguridad de Israel.
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