El embajador de Emiratos Árabes Unidos en Estados Unidos, Yousef al-Otaiba, dijo el miércoles que el gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu está inmerso en un proceso de anexión de facto de Judea y Samaria, y que detenerlo puede corresponder a otros países que sopesan la normalización con Israel.
El compromiso israelí de no ejercer su soberanía sobre los asentamientos a cambio de la normalización con Abu Dhabi solo se extiende hasta 2024, dice Yousef al-Otaiba.
En un panel durante un evento en Washington que conmemoraba el tercer aniversario de los Acuerdos de Abraham, preguntaron por zoom a Otaiba cuál era la perspectiva de Abu Dabi sobre el actual gobierno israelí y sus políticas en Judea y Samaria, a las que los críticos se han referido como “anexión de facto”, publicó The Times of Israel.
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“Es difícil porque está sucediendo, y creo que está sucediendo de una manera que no es visible y hará que volver a una solución de dos Estados sea un desafío aún mayor”, dijo Otaiba.
Si bien los Emiratos Árabes Unidos han condenado repetidamente las políticas israelíes en Jerusalén y en el complejo del Monte del Templo/Haram al-Sharif en particular, las críticas públicas a la política israelí en Judea y Samaria no son frecuentes.
Los opositores al gobierno señalan su avance a un número récord de viviendas en asentamientos por construir, sus medidas para legalizar aproximadamente una docena de asentamientos de colonos, su agillización del proceso de aprobación de asentamientos y su transferencia del control sobre las autoridades civiles en Judea y Samaria al Ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, como ejemplos de un esfuerzo más amplio para anexar Judea y Samaria en la práctica, aunque formalmente Israel no implemente tal medida.
Netanyahu archivó sus planes de anexar oficialmente gran parte de Judea y Samaria en 2020 a cambio de normalizar las relaciones con los Emiratos Árabes Unidos.
Los países involucrados en los Acuerdos de Abraham no lo hicieron público en ese momento, pero el compromiso de Netanyahu de no anexar Judea y Samaria tenía una duración limitada. Días después del anuncio del acuerdo de normalización en septiembre de 2020, tres fuentes familiarizadas con las negociaciones dijeron que el entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se comprometió con Emiratos Árabes Unidos a que Washington no reconocería ninguna medida de anexión israelí hasta 2024 como muy pronto.
Emiratos Árabes Unidos buscó el compromiso de Estados Unidos y no de Israel entendiendo que el primer ministro no avanzaría con la anexión sin el apoyo estadounidense, dijeron las fuentes en ese momento.
El plazo hasta 2024 se explicó porque daba a Estados Unidos otros cuatro años para avanzar en un acuerdo de paz entre israelíes y palestinos si Trump ganaba la reelección en 2020. Si perdía, el entonces candidato demócrata Joe Biden seguramente se opondría a una medida israelí hacia la anexión.
Otaiba, quien encabezó las conversaciones de normalización para los Emiratos Árabes Unidos, pareció ser uno de los primeros funcionarios gubernamentales involucrados en hablar públicamente de la naturaleza finita del acuerdo de Israel para archivar los planes de anexión.
“Nuestro acuerdo se basó en un período de tiempo determinado, y ese período de tiempo casi ha terminado, por lo que no tenemos capacidad para aprovechar las decisiones que se tomen fuera del período en el que se basaron los Acuerdos de Abraham“, dijo el embajador de los Emiratos.
“Creo que ahora son futuros países los que deberán adoptar ese enfoque particular, pero hay muy poco que los Emiratos Árabes Unidos puedan hacer en este momento para dar forma a lo que sucede dentro de Israel“, dijo.
El miércoles temprano, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo que Arabia Saudita había transmitido que la “cuestión palestina será muy importante” para un posible acuerdo de normalización con Israel.
Otaiba aclaró que si bien acuerdos como el que alcanzaron los Emiratos Árabes Unidos con Israel pueden dar a las partes “más espacio para la diplomacia y una solución de dos Estados”, un acuerdo de paz entre israelíes y palestinos tendrá que surgir en última instancia de las propias partes.
Durante el panel en el evento organizado por Iniciativa N7, una empresa conjunta del Atlantic Council y la Fundación Jeffrey M. Talpins, el embajador de los Emiratos destacó la rapidez con la que los vínculos entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos han logrado crecer en tan solo tres años.
Se ha pasado de no tener vuelos directos a 152 cada semana, afirmó Otaiba. El comercio entre los dos países asciende a 3.000 millones de dólares al año y se espera que crezca a 10.000 millones anuales.
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