Las comunidades Maguén David y Monte Sinaí organizaron un evento de plegaria por Israel, en el cual los asistentes encontraron una manera espiritual de apoyar al Estado judío en esta última guerra contra Hamás.

El evento contó con actividades diversas como un mural de la paz, encendido de velas y rezos.

 

El evento comenzó con las palabras del presidente de la comunidad Monte Sinaí, Alberto Kichik Sidauy.

“Es un honor recibir a todas las comunidades en este evento, donde se respira la hermandad comunitaria”. En su discurso, narró los eventos de prosperidad pero también las persecuciones que ha sufrido el pueblo judío.

“Israel es el hogar de todos nosotros” dijo. “Por ello es de suma importancia orar por los secuestrados, por el éxito de los soldados (israelíes) y por la memoria de las víctimas del pueblo de Israel”.

El presidente de la comunidad Maguén David, Abdo Chacalo, agradeció a sus anfitriones por este evento: “Una vez más, nuestro país está en guerra”.

“La Torá ha demostrado que la protección física de cada integrante del pueblo judío está conectado intrínsecamente con el optimismo intelectual”.

“El terrorismo y la guerra no llevan a ninguna solución, solo a la muerte de inocentes.

Alcemos nuestras voces por el derecho que tenemos como pueblo para defender a nuestro país”.

El Rabino Abraham Tobal comentó: “Estamos consternados por los sucesos, algo que en la mente no se puede concebir”. De lo más profundo del dolor tiene que salir nuestra fortaleza”.

Pero el pueblo de Israel siempre sigue adelante. “La acción del ser humano contamina” dijo el rabino.”La fuerza espiritual es contagiosa y es posible enviar buena vibra. Si en México hacemos una acción positiva, le estamos dando fuerza al pueblo de Israel”.

La acción de cada individuo a su manera ayuda al pueblo de Israel. “Levantar el ánimo, fortaler nuestra fe, y si depositamos esa fe en D-os, D-os responderá”. Israel se está defendiendo: ellos (Hamas) comenzaron masacrando inocentes. Todo el pueblo de Israel se está tendiendo la mano”.

El Rab. Yaacob Nacach en su discurso dice “estamos reunidos está noche, como ya se mencionó,para demostrar una unión muy especial, pero principalmente para despertar la misericordia divina. Pero está vez se necesita de una manera muy clara.

“Se requiere mucha alegría mucho optimismo, para que también esa sombra divina levante mucha misericordia” los soldados necesitan apoyo moral, económico y espiritual”

“Las tefilot (rezos) pueden hacer el cambio, pero más importante nuestras acciones. Aprender amor y cariño, expresarlo toda la vida, eso es el secreto del Shalom”.

“Hay que aprender a hablar con nuestros compañeros, no hablar de nuestros compañeros” continúa “ese es el secreto de la unión”.

“Durante la Guerra de los Seis Días, uno de los rabinos, a pesar de la incertidumbre de la situación estaba muy tranquilo.

Al preguntarle el porqué de su serenidad, él contestó ‘Sé que vamos a ganar, porque veo unión’.

El rabino terminó su discurso esperando que la comunidad salga con un compromiso de Shalom y valorización a Israel.

La noche terminó con un cierre musical.

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