En su primer discurso desde que estalló la guerra entre Israel y Hamás, el líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, lanzó este viernes amenazas al Estado judío y expresó solidaridad con los palestinos.

Pero no hizo ningún anuncio de planes explícitos para ampliar el conflicto de su grupo terrorista libanés con Israel, como algunos temían que hiciera.

“Algunos afirman que Hezbolá está a punto de unirse a la contienda. Les digo: estamos en esta batalla desde el 8 de octubre”, dijo, recogió The Times of Israel.

“A algunos les gustaría que Hezbolá se involucrara en una guerra total, pero les puedo decir: lo que está sucediendo ahora a lo largo de la frontera entre Israel y el Líbano es significativo y no es el final”.

Nasrallah advirtió a Israel contra el lanzamiento de una ofensiva preventiva: “Les digo a los israelíes que si están considerando llevar a cabo un ataque preventivo contra el Líbano, será el error más tonto que cometan en toda su existencia”.

Mientras hablaba, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, lanzó su propia amenaza, advirtiendo a los “enemigos del norte” de Israel que no cometieran el costoso error de intensificar la guerra. “No se imaginan cuánto les costará esto”.

En Israel y en toda la región, se había anticipado y temido que el discurso de Nasrallah, que Hezbolá anunció con días de anticipación, presagiaba potencialmente una declaración de guerra o algún ultimátum.

Pero el jefe terrorista no fue tan lejos y en algunos casos pareció incluso distanciar a Hezbolá del conflicto.

Dijo que no sabía de antemano sobre los planes de Hamás para el 7 de octubre, ni tampoco lo sabía Irán, lo que indica que Hezbolá no era parte integral del ataque.

Desde el estallido de la guerra, Hezbolá, respaldado por Irán, ha llevado a cabo y supervisado ataques diarios contra la frontera norte de Israel desde el Líbano, pero no ha llegado a lanzar una campaña a gran escala contra el país.

Israel también ha intentado caminar sobre una delgada línea, respondiendo con un importante poder de fuego a los ataques e intentos de ataques, al tiempo que intenta evitar acciones que pudieran intensificar el conflicto mientras busca mantener su atención en Gaza.

En el lado libanés de la frontera, unas 70 personas han muerto, incluidos al menos 56 miembros de Hezbolá, 8 terroristas palestinos, varios civiles y un periodista de Reuters.

Del lado israelí, 6 soldados de las FDI y un civil han muerto en ataques de Hezbolá y pistoleros palestinos.

En su discurso, Nasrallah se jactó de que las acciones militares de Hezbolá en la frontera habían alejado a las fuerzas de las FDI de la guerra contra Hamás.

“Lo que hemos hecho desde el 8 de octubre no tiene precedentes en términos de nuestra estrategia de lucha. Todos los días, hemos estado apuntando a soldados, tanques, drones y sensores israelíes, los ojos y oídos de Israel. Hemos estado involucrados en una verdadera batalla. La cantidad de nuestros mártires, 57, lo atestigua”, dijo.

“Nuestras operaciones en la frontera han obligado a las FDI a desviar fuerzas, armas y equipos de Gaza y Cisjordania al frente libanés. Un tercio de las FDI se encuentran ahora concentrados en nuestra frontera”, afirmó.

“Una victoria de Gaza contra Israel no será una victoria para Irán o los Hermanos Musulmanes, será ante todo una victoria patriótica para los palestinos, pero también para Egipto, Jordania, Siria y también el Líbano. Por tanto, es nuestro deber apoyar a Hamás en Gaza”.

Y dijo: “El único factor que afectará nuestra posición es la progresión de la guerra. Le digo a Israel: no vayan más lejos. Muchos civiles ya han muerto. Se los prometo: un civil por un civil”.

Israel ha desviado fuerzas masivas hacia el norte, al mismo tiempo que ha hecho lo mismo en el sur, para prepararse ante la posibilidad de que Hezbolá intente replicar las atrocidades de Hamás. También ordenó la evacuación de comunidades fronterizas para proteger a los residentes.

Pero Nasrallah también señaló que la guerra es principalmente una preocupación de Hamás, diciendo que el grupo terrorista libanés no sabía nada sobre el ataque de antemano.

“La operación del 7 de octubre se planeó en total secreto. Incluso otras facciones palestinas no estaban al tanto de ello, y mucho menos los movimientos de resistencia en el extranjero”, dijo Nasrallah.

“La comunidad internacional sigue mencionando a Irán y sus planes militares, pero el ataque del 7 de octubre fue una operación 100% palestina, planeada y ejecutada por palestinos para la causa palestina, no tiene relación alguna con ninguna cuestión internacional o regional”.

Nasrallah hizo la falsa afirmación de que los civiles israelíes en las comunidades fronterizas de Gaza fueron asesinados el 7 de octubre por fuerzas israelíes que estaban “actuando de manera demente al ser tomados por sorpresa y estaban ‘borrachos’”, y no por Hamás.

No hay evidencia que respalde tales afirmaciones, y hay evidencia abrumadora, visual y de testigos presenciales, de atrocidades sin sentido y planificadas previamente por Hamás contra civiles.

Israel afirmó falsamente que Hamás decapitó a bebés, pero no presentó ninguna prueba”, dijo, “mientras que el mundo entero ha visto imágenes de niños palestinos bombardeados en Gaza“.

Nasrallah dijo que uno de los principales errores de Israel fue “fijarse objetivos elevados que no puede alcanzar” y señaló que “en 2006 [Israel] se fijó el objetivo de aplastar la resistencia en el Líbano y recuperar los [cuerpos de] dos prisioneros sin negociaciones ni intercambios. No lo consiguieron durante 33 días y hoy en Gaza la situación es la misma”.

Israel nunca ha podido recuperar a los rehenes sin negociaciones”, dijo Nasrallah.

El jefe de Hezbolá hizo referencia a sus propias declaraciones pasadas de que la nación israelí es tan débil y fugaz como una telaraña, diciendo esta vez que era incluso “más débil” que eso.

“Necesita el apoyo estadounidense y occidental”, afirmó. “De lo contrario, ¿por qué la marina estadounidense enviaría un portaaviones poco después del ataque del 7 de octubre? ¿Por qué si no visitaría Biden Israel, junto con numerosos secretarios del gobierno estadounidense, los altos mandos militares y líderes europeos?

Por su apoyo, dijo, Estados Unidos “debe rendir cuentas y pagar el precio por los crímenes perpetrados por Israel en Gaza, de ahí que los movimientos de resistencia hayan atacado y seguirán atacando a las fuerzas estadounidenses en Irak y Siria”.

Nasrallah dijo que Hezbolá no se dejó intimidar por las amenazas estadounidenses ni por las fuerzas estadounidenses desplegadas en la región.

“Desde el estallido de la guerra, Estados Unidos ha amenazado con bombardearnos en el Líbano desde sus barcos militares en el Mediterráneo. Estamos preparados para cualquier escenario”, advirtió. “Si estalla una guerra total, ustedes, los estadounidenses, pagarán con sus barcos, sus aviones y sus soldados.

“Todavía necesitamos tiempo, pero ganaremos, de la misma manera que ganamos en 2006, de la misma manera que la resistencia logró resultados en Cisjordania“, prometió Nasrallah.

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