“Secuestraron a mi hermana y a toda su familia”. La mañana del 7 de octubre parecía ser una mañana como cualquier otra para los ciudadanos israelíes que habitan en el sur del país. Era temprano, todavía no eran ni siquiera las 7:00 de la mañana, por lo que muchos dormían cuando las alarmas comenzaron a sonar.

Estas alarmas sirven para avisar a la población que un cohete o misil (lanzado desde Gaza) ha sido detectado por el sistema defensivo israelí Cúpula de Hierro, y que independientemente de cual sea el destino final de ese proyectil, los ciudadanos de Israel tienen entre 15 y 30 segundos para ponerse a salvo.
Desafortunadamente, esto suele ser algo habitual para las ciudades que están cercanas a la Franja de Gaza, así que todos saben lo que tienen que hacer: correr al refugio más cercano, y eso es justamente lo que hicieron Romina y su familia.
Poco tiempo después del sonido de las sirenas, Romina comenzó a escuchar que afuera de su casa gente gritaba en árabe. No entendía muy bien lo que pasaba, pero conforme el tiempo transcurrió se enteró del ataque terrorista que se había perpetrado.
Y lo peor de todo, que su hermana Karina y su familia habían sido secuestrados.
Ésta es su historia.

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